Termas de Río Hondo
LAS NUEVAS TENDENCIAS DE LA SOCIEDAD POSTMODERNA VALORAN COMO IMPORTANTE, QUE EL SER HUMANO CONSIDERE CONJUGAR SU TIEMPO DE OCIO, CON EL LOGRO DE BIENESTAR FÍSICO Y MENTAL. ESO HA TRAÍDO COMO CONSECUENCIA UN INCREMENTO Y RENOVACIÓN DEL DENOMINADO MODELO DE TURISMO Y SALUD EN EL MUNDO, DESTACÁNDOSE ARGENTINA COMO PAÍS CON GRAN POTENCIALIDAD EN ESTE SENTIDO
El Turismo de Salud engloba dos vertientes fundamentales: el turismo de curación y el de prevención. El primero a su vez, está representado por dos ramas, el Turismo Médico (con instalaciones y personal especializados) y el Turismo de Rehabilitación, que utiliza recursos naturales para obtener beneficios para la salud, como es el caso del Turismo de Termas, donde se aprovechan las virtudes físicas y químicas de las aguas termales y de sus fangos.
Según reportes de la Organización Mundial del Turismo (OMT), este segmento, en la actualidad y a pesar de la crisis global, genera más de 75 000 millones de euros al año y se prevé que para 2015 su dinámica económica concentre 128 000 millones de euros anuales. Se observa una tendencia al ascenso en países de Centroamérica, Suramérica y el Caribe donde se pronostica un crecimiento de un 9 % por año en el próximo lustro, un 50 % más que el turismo en general. Argentina se destaca como país líder en este segmento desde tres aristas fundamentales: Centros Termales, la Talasoterapia y los Spa; donde no solo se demandan los recursos naturales, sino la utilización sustentable de los mismos, a través de programas educacionales tanto para receptores como emisores de esta actividad.
Fuente de Agua, Vida y Salud
Argentina cuenta con termas en 20 de sus 23 provincias. Las más representativas son las Termas de Río Hondo, ubicadas a 69 km de la ciudad de Santiago de Estero. Estas se han convertido en centro turístico gracias a su caudal de aguas termales (dulces, saladas y multimineralizadas) que lo han transformado en el balneario más importante de Sudamérica. Río Hondo es capaz de ofrecer toda una gama de servicios integrales que permiten desarrollar un nuevo concepto en turismo, combinando salud y belleza con recreación.
Las Termas de Río Hondo presentan un clima cálido y seco, de tipo subtropical, con veranos calientes (38 ºC) e inviernos suaves (15 º C), y una temperatura media anual de 21º C. Se ubican sobre cuencas de aguas muy ricas en sales y minerales, que de forma general, se describen como: alcalinas, bicarbonatadas, clorosulfatadas y ferruginosas; además de contener pequeñas cantidades de hierro, sodio, fósforo, yodo, arsénico, flúor y bromo que se encuentran en estado iónico, cargadas de energía eléctrica, lo cual le confiere gran fuerza de penetración y difusión en todo el organismo.
Esas características las hacen efectivas en diferentes tipos de terapias: para mejorar la oxigenación de los tejidos, ayudar a relajar los músculos, mejorar el tono y elasticidad de la piel, acción antiinflamatoria, cicatrización de las heridas, contra el reumatismo, artrosis, artritis, estimulante del sistema inmunológico, contra infecciones, para combatir el estrés, neuralgias, afecciones de la piel como la Psoriasis, entre otros.
La principal aplicación del agua de las Termas de Río Hondo es en forma de baños, debido a que sus compuestos fisicoquímicos atraviesan fácilmente la barrera cutánea en cantidades pequeñas. El turista puede disponer lo mismo, de un baño termal con absoluta privacidad, que de baños públicos en piletas dispuestas en las plazas y la costanera del Río Dulce, que son combinados con muy buenos servicios de catering y la posibilidad de pasar un momento de esparcimiento con familiares y amigos. Los baños deben ser tomados en forma racional y oportuna, con frecuencia adecuada (según prescripción médica), aunque generalmente se indican dos veces al día y para esto se cuenta con: piscinas, cabinas de duchas, bañera de hidromasaje, sauna y hamman. También existen los espacios relax con tumbonas, donde los visitantes tienen la posibilidad de recibir distintos tipos de masajes y fangoterapia que ayudan a potenciar los efectos anteriores y que se obtenga una recuperación en menor tiempo, con menos costos y menor dolor que otros tratamientos médicos con fármacos y técnicas más avanzadas.
Todo esto se complementa con una infraestructura hotelera de más de 170 establecimientos de distintas categorías y confort, con más de 14 000 plazas, donde se combina la terapia con otros beneficios como son: la nutrición sana, técnicas apropiadas para la lucha contra el estrés y la práctica de ejercicios (aeróbicos, gimnasios con equipamiento, golf, trekking, la navegación y pesca en el Lago del Río Hondo).
Para una estancia placentera
No todo es termas en Río Hondo. Además del contacto con la calidez de su gente, se pueden realizar también interesantes excursiones como visitas al Dique Frontal, caminatas por la costanera del Río Dulce hasta la Reserva Natural Tara Inti, donde conocerás la naturaleza de la zona en su estado original, admirando cientos de aves y árboles desde una isla que exhibe restos paleontológicos, cañadores internos y apostadores de aves acuáticas.
Continuando el recorrido podemos llegar al Museo del Automóvil que se encuentra junto al Autódromo Provincial de Las Termas de Río Hondo. El primero exhibe una importante muestra de vehículos y motos de colección que han sido protagonistas de páginas inolvidables en la historia del deporte motor en Argentina y el mundo; el segundo recibe anualmente a las principales categorías de automovilismo de velocidad del país y del ámbito internacional.
Otra opción a tener en cuenta es su destacada gastronomía, con platos autóctonos que van desde dorados, chivitos, empanadas, tamales y humitas, hasta delicatessen como las boutiques de chocolates y las fábricas termeñas de alfajores donde se elabora un producto de pastelería netamente regional (a base de yema de huevo y miel), pero con raíz europea como sus fundadores, el matrimonio francés Haure.
Por su parte, los que gustan de souvenir, podrán deleitarse con el trabajo típico de la zona, que son las artesanías tejidas con diferentes fibras naturales, de las que se confeccionan canastos, cajas, paneras y adornos, que les harán recordar su placentera y reparadora estancia en este lugar.
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