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Aunque en cualquier época del año se puede disfrutar del espectacular arrecife coralino y la enorme diversidad de la vida subacuática de la región más occidental de Cuba, es en el mes de junio cuando se celebra el concurso de fotografía submarina IMASUB, un evento que ya se ha hecho tradicional, organizado por el Grupo de Turismo Gaviota S.A., en su sede María la Gorda, un renovado y bien acondicionado centro especializado en buceo.

Venidos de las más diversas latitudes, los fotógrafos, después de limpiar y colocarse sus máscaras, toman sus cámaras y comienzan a hundirse en las límpidas aguas. En el fondo, todo es silencio, la luz permite descubrir desde los peces de brillantes colores que curiosos rodean a los intrusos, hasta las más pequeñas criaturas que habitan en los arrecifes. Unos comienzan la búsqueda de esos seres diminutos, con el sueño de obtener el premio de fotografía macro, otros buscan marcos propicios para colocar a sus modelos y un tercer grupo anda a la caza de la variada y abundante fauna en este cálido mar.

Después de tres fructíferos días, los concursantes han entregado sus selecciones, el jurado, integrado por prestigiosos especialistas internacionales, tras una madrugada de evaluación ha escogido  las mejores fotografías en cada categoría y, en la noche, en un ambiente de risas y camaradería, son anunciados los premios y entregados los  hermosos trofeos, medallas, diplomas y regalos a los ganadores. 

María la Gorda los despide y los espera nuevamente.