Junto a los también legendarios Raquel Revuelta y Alejandro Lugo.

Según confesó en cierta oportunidad, prefería encarnar personajes malvados. Desde luego, en su prolífica carrera interpretó roles de damita joven y de mujer tierna, pero lo cierto es que todos recordamos a Silvia Maritza Rosales Pomares, nuestra primerísima actriz Maritza Rosales, como una de las «malas» más repudiadas y simultáneamente —vaya maravillosa contradicción— más queridas y reverenciadas de todos los tiempos.
Maritza nació en Cienfuegos el 10 de septiembre de 1929. Estudió Ballet, se graduó de Comercio, estudió y actuó en el Seminario de Artes Dramáticas del Teatro Universitario de la Universidad de La Habana y se convirtió en primera figura del Grupo ADAD y, posteriormente, del Patronato del Teatro. Ya en su madurez obtuvo el título de Licenciada en Historia del Arte por la Universidad de La Habana.
Su inicio en la vida artística profesional tuvo lugar en 1947, en Unión Radio, aunque fue en RHC Cadena Azul donde tuvo la primera oportunidad de asumir un rol protagónico, en la radionovela Tú me hiciste perversa, del espacio Mujeres indefensas, junto al nunca olvidado primer actor Raúl Selis. Con posterioridad, pasó a Radio Progreso, hasta que integró el cuadro dramático de CMQ Radio, donde triunfó definitivamente.
Aunque trabajó muchísimo en teatro, en la radio y algo menos en cine, el mayor peso en su carrera lo ocupó la televisión, a la que consagró más de cuatro décadas de su fecunda vida. Fue animadora en programas de participación y actriz en espacios dramatizados, reconocida como una auténtica estrella en la que confluían belleza facial y corporal y maestría interpretativa.
En los espacios televisivos dramatizados trabajó bajo la dirección de reconocidos directores como Antonio Vázquez Gallo, Carlos Piñeiro y Roberto Garriga, y junto a los actores y actrices Alejandro Lugo, Enrique Santiesteban, Violeta Casal y Margarita Balboa. ¿Cómo olvidar su Ana Bolena, la segunda de las seis esposas de Enrique VIII, en Jaque al rey? Entre las telenovelas, es imprescindible mencionar Historia de tres hermanas, transmitida entre 1957 y 1958, en la que dio vida a la malévola y memorable Reina Milanés. La fama alcanzada por Maritza con ese personaje salvó su vida, que corría peligro por su activa participación en el Movimiento 26 de Julio. De igual modo, es memorable su también súper mala Verena Contreras, en la versión televisiva de la radionovela Medialuna, de Dora Alonso, que tuvo un remake en 1997 bajo el título Tierra brava.
Maritza se jubiló en 1987. Continuó haciendo actuaciones especiales, como aquella del espacio humorístico ¡Gracias, doctor!, en 1994, o en la recordada telenovela El año que viene, del Maestro Héctor Quintero, en 1995, que logró un elevado rating de teleaudiencia. Allí dio vida a la picarona y criollísima doña Nenita Pubillones, personaje que ha quedado para siempre en el imaginario popular cubano. Como ella misma dijo, le permitió reencontrarse con un público que no la había olvidado.
Maritza fue una mujer simpática, valiente y desprejuiciada. A los más jóvenes ofreció siempre su invaluable experiencia, y a su formación profesional contribuyó de modo directo cuando junto con otros prestigiosos artistas fundó e impartió, por varios años, clases en la Escuela de Formación de Actores del Instituto Cubano de Radiodifusión. Ejerció como directora en emisoras como Radio Liberación, heredera de CMQ Radio después de 1959.
Fundadora de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (Uneac), a lo largo de su carrera fue acreedora, por sus indiscutibles méritos artísticos, de numerosas condecoraciones, entre las que cabe mencionar la Distinción por la Cultura Nacional, el Premio Nacional de Televisión, la condición de Artista de Mérito de la Radio y la Televisión Cubanas, las medallas Alejo Carpentier, Frank País, Raúl Gómez García y por el Aniversario 40 de la Televisión Cubana, el Micrófono por el Aniversario 70 de la Radio Cubana y el Premio Actuar por la obra de la vida.
Maritza nos abandonó físicamente el 12 de febrero de 2013, cuarenta y ocho horas antes del Día del Amor y la Amistad, sentimientos que cultivó y prodigó en su máxima expresión. Sus malvadas y personajes humorísticos siempre serán recordados. Por encima de ello, que ya es mucho decir, la perpetuaremos como el maravilloso ser humano que fue.