Se le considera la capital más sureña del Ecuador, ubicada en el Valle de Cuxibamba y bañada por los ríos Malacatos y Zamora; muy conocida por su tradicional riqueza religiosa y cultural… mitos y fe que han creado la peculiar memoria histórica y cultural de sus moradores.

La joya de Lojas es su notable y singular Basílica con la imagen de la Virgen del Cisne o La Churonita, como cariñosamente le llaman sus fieles. Mide 67 metros de alto, es de madera y ha devenido símbolo de fe de sus habitantes y muchos otros peregrinos que la visitan por su tradición milagrosa desde 1590, cuando las prolongadas sequías y largas hambrunas sembraron la desolación y el infortunio en la región. Cuenta la leyenda que fue la fe de los moradores en la Virgen del Cisne, lo que proporcionó abundantes lluvias y bonanzas para todos, probando así los prodigiosos milagros de que era capaz. Pero a Lojas, que de hecho es cuna de numerosos personajes ilustres de este país, se le reconoce también por ser una ciudad muy musical, alegre y distinguida, de gran arraigo cultural y marcada inclinación por las artes, entre las que se destacan especialmente manifestaciones como la pintura, la oratoria, la literatura y el cine. Entre sus tradicionales atracciones para naturales y extranjeros están su exquisita gastronomía y, además, sus artesanías de refinada elaboración, con materiales como la madera, el cuero, los textiles y los metales de diverso tipo. Imprescindible extensión en las afueras es el llamado Vallacabamba, que en lengua quechua significa Valle Sagrado y que desde épocas ancestrales es también conocido como el Valle de la Longevidad, un lugar sencillamente prodigioso, por su temperatura, aire puro y naturaleza, donde vivir más de 100 años resulta algo muy común. En el paisaje se descubren las típicas viviendas de la zona, de adobe y madera, con patios interiores y portales de agradable estancia. Muy cerca de Lojas se encuentra, además, el Parque Nacional Podocarpus, una enorme reserva de la biosfera que se extiende desde las estribaciones de la Cordillera Oriental de los Andes hasta la cuenca de los ríos Nangaritza, Numbala y Loyola, con grandes poblaciones de Podocarpus, la única conífera nativa del Ecuador. Al disponer de una excelente infraestructura turística y ser la tercera ciudad del Ecuador después de Quito y Guayaquil con mayor numero de hoteles y hostales, Lojas gana espacio como destino turístico en este hermoso país, con la promesa de ser todavía un lugar poco conocido, especie de paraíso lejano que incluye el turismo cultural, antropológico, de aventura, naturaleza y relax, junto a la experiencia de descubrir o acercarse a los secretos de la larga vida en el hermoso Vallacabamba.

La arquitectura, los parques bien diseñados y el trato amable de su gente, son las primeras señales para el visitante de que Lojas es una ciudad muy cultural, con gran arraigo de manifestaciones como la pintura, la oratoria, la literatura y el cine.