- Recuperar el espacio perdido.
Cuba y Estados Unidos
La posible apertura de Cuba al turismo estadounidense y la paulatina normalización de las relaciones entre los dos países, tendrán un impacto significativo en la industria del turismo del Caribe; ya que enlazará por primera vez en más de cinco décadas, a Cuba el mayor destino receptor potencial de la subregión, con el mercado emisor más grande de la región.
Casi 29 millones de turistas internacionales viajaron al Caribe en el año 2015, con un gasto estimado de 30 000 millones de dólares. Los Estados Unidos, con 14,3 millones de visitas, representaron aproximadamente el 50% del total de llegadas al Caribe, seguido de Europa (18%), Canadá (12%) y América del Sur (7%).
Como destino, Cuba atrajo a más de un tercio de todos los visitantes canadienses al Caribe en 2015; casi el 17% de todos los europeos, y solo el 1% de los viajeros estadounidenses.
La eliminación completa de las restricciones de viajes turísticos desde Estados Unidos hacia Cuba debe traer un aumento de la competencia, poniendo en peligro la cuota de mercado de EE.UU. a varios destinos insulares del Caribe (Figura 1).
Cuba, desde los inicios del siglo XX, se consolidó como el principal destino turístico caribeño, especialmente para el turismo estadounidense. Hacia la segunda mitad del siglo, se hizo presente una larga etapa de más de cincuenta años de enfrentamientos y prohibiciones de todo tipo hacia la Isla; que propiciaron la pérdida de espacios y cuotas de mercado desde los principales emisores, y en particular desde Estados Unidos.
En todos esos años otros destinos caribeños, con playas de arenas blancas, fueron desarrollándose y construyendo instalaciones para el turismo internacional, con una importante contribución de la inversión extranjera.
El cambio de la política del Gobierno de Estados Unidos, a partir de enero de 2015, con la ampliación de las licencias para viajar a Cuba; el incremento de los arribos turísticos, la entrada de buques cruceros y la normalización de los vuelos comerciales directos, inserta nuevos retos al escenario turístico actual. La posible eliminación de todas las restricciones para los viajes desde Estados Unidos, impondrá un desafío impresionante al sector turístico cubano, a toda la cadena de valor y a los gobiernos locales.
En 2015, la Mayor de las Antillas recibió 3.524.779 visitantes internacionales, lo que representó un incremento de 17,4% en relación con el año precedente; mientras los primeros seis meses del presente año muestran un crecimiento de 11,7% en relación con igual período del año 2015.
Estos crecimientos no están dados en sí por el arribo de estadounidenses, sino por el efecto push que originó en el mundo la reanudación de las relaciones con Estados Unidos, pues muchos viajeros ya no consideran un pecado viajar a Cuba.
En los últimos tiempos, el turismo ha demostrado ser el sector que más puede favorecer el clima de normalización de las relaciones entre los dos países. En los dieciocho meses transcurridos; que van de enero de 2015, en que se anunciaron desregulaciones y nuevas licencias para los viajes desde el Norte, a junio de 2016; Cuba ha recibido 5.672.698 visitantes internacionales; de estos, 732.868 residentes en Estados Unidos, que incluye a 434.722 cubanoamericanos.
Oportunidades para invertir
En esta etapa, llamada por muchos “deshielo”, se ha propiciado la llegada de representaciones gubernamentales y delegaciones de hombres de negocios, y la celebración de encuentros que impulsan acuerdos, convenios y proyectos inversionistas, dirigidos al fortalecimiento del sector turístico cubano.
Este sector económico resulta el más dinámico en los negocios con compañías internacionales y en asociaciones económicas con capital extranjero.
La cartera de negocios del turismo, continuamente renovada, ha concretado más de 80 contratos de gestión y comercialización con 17 compañías hoteleras extranjeras; más otros relacionados con el desarrollo de campos de golf e inmobiliarias.
Estos contratos incluyen un total de 39.422 habitaciones, que representan el 60,5% del total de los existentes, incluyendo a la estadounidense Starwood, cadena hotelera que gestiona o franquicia casi 5.500 hoteles, en unos 100 países, con un total de 1.072.000 habitaciones, que asume las reconocidas marcas Sheraton, Westin, Courtyard, Residence Inn, St. Regis; Starwood y Marriott. Fuerte presencia en la industria hotelera cubana tienen: Meliá Hotels International con 30 hoteles; Blue Diamond con 14 hoteles e Iberostar Hotels con 12 instalaciones.
Nuevas oportunidades se van negociando en la búsqueda de instrumentos y mecanismos que impulsen el desarrollo acelerado de todos los sectores económicos, priorizando aquellos, que como el turismo, están mejor preparados para asimilar el financiamiento externo y las nuevas tecnologías.
Al iniciarse el mes de septiembre del actual año se firmó un primer acuerdo de colaboración entre Cuba y el Banco de Desarrollo Latinoamericano (CAF), con la finalidad de impulsar mecanismos financieros favorables al desarrollo económico y social del país.
El acuerdo también facilita que la entidad regional trabaje en forma conjunta con otros organismos internacionales favorables al desarrollo del modelo cubano, como el Banco Internacional de Inversión y el Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola.
A través de estas instituciones financieras internacionales (IFI), la Isla podrá acceder a financiamientos que ayuden a desarrollar el modelo económico, en temas trascendentes contemplados en los planes de desarrollo hasta el 2030.
Cruceros desde la otra orilla
En estos últimos tiempos, se ha comenzado en la recuperación del espacio perdido en el turismo de cruceros. La temporada de cruceros 2015-2016 cerró con unas 96 escalas en el puerto de La Habana, 26 en Santiago de Cuba y 54 en Cienfuegos; siendo estas las principales terminales de cruceros del país, donde se recibieron cerca de 90.000 pax.
Cuba, insertada en el mercado de cruceros del Caribe, ofrecerá a las navieras itinerarios novedosos. El Caribe representa el 40% del crucerismo mundial y entre todos sus destinos se reciben unos 25 millones de visitantes de cruceros.
Nuevos itinerarios han sido anunciados. La línea de cruceros de lujo de bandera francesa Ponant también lanzará sus viajes a la Isla desde los Estados Unidos a partir de 2017. Otras navieras basificadas en puertos estadounidenses como Royal Caribbean Cruises, Princess Cruises, Norwegian Cruise Line, Crystal Cruises y Pearl Seas Cruises, entre otras; esperan los permisos correspondientes y la firma de los acuerdos con Cuba.