Eclecticus Augusto Enríquez
La gala de apertura del XIV Festival del Habano en el teatro habanero Karl Marx, vuelve a inscribirse en la historia de este evento como una noche inolvidable. El espectáculo definido por su creador Augusto Enríquez, como un divertimento cubano, mezcla varios géneros musicales con singular ingenio, en compañía de algunos conocidos amigos.
es más una forma de pensar la vida, que una adicción. Puede ser perfectamente el compañero de un momento de reflexión, de períodos maravillosos de relax, amigo en los procesos creativos tan importantes para los artistas o para cualquier persona. El Habano se puede convertir en tu confidente; y no es fetichismo, es realidad. El humo te transporta… solamente su elaboración constituye una obra de arte, que te predispone favorablemente y te hace crear.» Así define Augusto Enríquez su concepto sobre el mundo del Habano y la especial emoción que representa poder participar en la noche de apertura del XIV Festival del Habano, algo que considera un honor y un compromiso. En sus palabras fracasa cualquier intento de enmascarar al artista apasionado que con la misma vehemencia, resuelve entregarse a cada uno de los proyectos que emprende. Eclectic-us es una producción discográfica que realizó en complicidad con Pucho López, uno de los más importantes músicos del panorama musical cubano contemporáneo. «Es un proyecto muy bonito, muy interesante, que ha recibido críticas favorables de las más grandes revistas de jazz en el mundo; y entonces nos pareció que esa era la propuesta con la que debíamos corresponder a la invitación de Habanos. Esta noche constituye el debut en escena de Eclectic-us, a lo que sigue una temporada ya contratada de presentaciones en los diferentes clubs Blue Notes del mundo.» Génesis de Ecléctic-us «Hace tres años, un músico italiano llamado Pino Daniele me invita a hacer un concierto en la isla de Ischia y me sugiere que en lugar de la Mambo Band con la que hemos estado trabajando, fuera una agrupación más pequeña para facilitar los traslados y la logística general. Llamé al maestro Pucho López, le expliqué la propuesta de Pino y enseguida se puso a trabajar. Lo primero fue escoger el repertorio y como en los últimos años le hemos dedicado bastante tiempo y esfuerzos a la música tradicional, decidimos partir de temas muy conocidos. «Los dos primeros arreglos fueron sobre piezas antológicas como Drume Negrita y Bilongo (La negra Tomasa) y esos dos arreglos me convencieron de la propuesta que él me estaba haciendo desde el principio. Allí habían evidencias claras de la indefectible interconexión entre las músicas del sur de los Estados Unidos y todo el archipiélago cubano, con mucha ingeniosidad. «Me sentí impresionado y le dije a Pucho: Independientemente de que hagamos el concierto en Italia, la verdad es que esto merece un disco en el que tú me vas a acompañar como colerrigionario. Yo no quiero que hagas los arreglos para mí, sino que participes como culpable de una cosa que pertenece a ambos. Y así empezó el proyecto.» Fisión, no fusión Luego de un minucioso trabajo de selección, en el disco quedaron registrados 11 temas cuyos arreglos les devuelve revitalizados a la contemporaneidad, casi como piezas inéditas. «Perla Marina, por ejemplo, está hecha en 6 por 8 con todos los atributos de la entrada, un domingo, a una iglesia negra de Nueva Orleáns. Canciones harto conocidas son pasadas por el tamiz de la fisión y no de la fusión. Es decir, ritmos en interacción, sin mezclarme. Es lo que tiene de singular este proyecto, lo que prueba o innova como posibilidad creativa; es lo que permite hacer be-bop y pasar a cu-bop, que son dos estilos muy diferentes, pero que tienen que ver y pueden asimilarse cuando se arregla para que coexistan armónicamente.» Pero como dice Augusto, «es mejor escuchar, que hablar de la música de Eclectic-us», y es por eso que este concierto inaugural despierta ya cierta impaciencia. A la novedad de estos temas tan magistralmente registrados en el disco que editó la casa discográfica Colibrí –Manisero, Vete de mí, No puedo ser feliz, Mamá Inés, entre otros-, se une el privilegio de apreciar el trabajo de los músicos que para la ocasión se reúnen y sus invitados. Noche de estrellas Según nos explicó Augusto, la formación original con que se concibió el proyecto fue un quinteto: «batería, contrabajo, piano, órgano y teclados, guitarra y voz; a lo que se le agrega un saxofón, eventualmente. Para el Festival del Habano le integramos una trompeta y un trombón, para hacer un trío de metales que permitan reforzar algunas sonoridades». Los ejecutantes de esa formación son todos estrellas y, salvo el guitarrista Jorge Luis Chicoy, que para la fecha estará de gira, estarán presentes en el espectáculo: en la batería, Enrique Plá, uno de los maestros de ese instrumento en Cuba y pilar importante de Irakere, la orquesta que revolucionó el panorama musical de los años 70 en la Isla; los teclados estarán a cargo del propio Pucho López; en el contrabajo, Gastón Joya, músico muy joven cuyo talento lo ha convertido en uno de los instrumentistas más demandados del momento; y en el saxofón Alfred Thompson, otro fuera de serie que ha integrado importantes proyectos en las últimas dos décadas; mientras la guitarra será asumida por el experimentado y versátil guitarrista Raúl (El Chino) Verdecia. «Es una música para hacer con experimentados, estrellas, dice Augusto, pues más que poner bien las notas, exige conocer el sentido de las notas.» Los invitados Casi es una tradición del Festival del Habano que los artistas que protagonizan su concierto inaugural, inviten a escena a otros colegas con quienes, además de una gran amistad, comparten conceptos musicales. Augusto Enríquez ha hecho una selección tan exquisita como la realizada para Eclectic-us. «Hay varios invitados, dos extranjeros y una institución cubana, el cuarteto vocal Sexto Sentido. Los invitados extranjeros son dos ingleses, Phil Manzanera, el legendario guitarrista de esa banda de rock psicodélico de los 70 que se llamó Roxy Music; y Jack Bruce, quien fuera el bajista, compositor y cantante de Cream, la legendaria agrupación de los años 60 que, junto a Eric Clapton, hizo varias canciones antológicas de las cuales vamos a cantar una en el espectáculo que iniciará con las muchachas de Sexto Sentido. «Ellas interpretarán uno de los temas de su repertorio, luego me uniré a ellas para cantar Longina a cinco voces; y luego pasarán a formar parte del coro. Después salgo e interpreto solo y seguidamente presento a Phil, quien hará un tema como solista. En otro momento entra Jack para hacer con Phil y conmigo uno de los éxitos del primer disco de Cream e interpretar, también juntos, El Cuarto de Tula. A partir de ese momento seguirá el concierto con todos en escena.» Pero la presencia de Phil Manzanera y Jack Bruce en este concierto no está fundamentada solamente en la amistad que les une al músico cubano, sino en el propio concepto musical del Eclectic-us. «El disco tiene pasajes de rock, por ejemplo comienza con un cita de Jimi Hendrix, así que además de ritmos sureños, tiene rock dentro, tratado a la americana.»
Un reto y un honor «Cuando Habanos me hace la propuesta de hacer este concierto inaugural ni me lo creí, me quedé un poco impresionado. El año antes pasado tan alto honor correspondió al Maestro Chucho Valdés, quien trajo invitados maravillosos; y el año pasado, al Maestro Leo Brouwer. «Ahora el alumno Augusto Enríquez, alumno de Leo y de Chucho, entre otros muchos, lo que presupone un reto y una responsabilidad que asumo con un placer que ustedes no se pueden imaginar, con la preocupación de los detalles, de que las cosas queden lo más cerca posible de la perfección.» Mientras esta conversación transcurre, Augusto ha ido degustando con placer un Cohiba. ¿Preferirá Augusto algún Habano por encima de otro, cuál será? «Las mixturas diferentes me encantan, soy un amante de las diferentes artes, de la diferencia de colores y sonidos. En cada uno de los buenos Habanos que he fumado, encuentro siempre una particularidad que me interesa y me gusta, independientemente de momentos u otras circunstancias, de modo que lo más claro que tengo para decir es que de los grandes Habanos los prefiero a todos, pues lo que prefiero al fin y al cabo, es la buena fumada».
JACK BRUCE Siendo apenas un adolescente ganó una beca para estudiar chelo y composición en la Real Academia Escocesa de Música y Drama, mientras tocaba en la Jim McHarg’s Scotsville Jazzband para mantenerse a sí mismo. Sin embargo, la academia desaprobaba que sus estudiantes tocaran jazz y le dijeron: «o lo dejas, o dejas la universidad». Y así fue como abandonó esa institución. Es cantante y, además, toca el bajo, el piano, la harmónica, la guitarra y el chelo. En 1966 fundó el grupo Cream junto a Eric Clapton y Ginger Baker. Tras la ruptura del trío en 1968 formó varias agrupaciones y luego se ha dedicado a desarrollar una carrera como solista que ya acumula cerca de veinte fonogramas, moviéndose fundamentalmente entre el rock, el jazz y la fusión
Phil Manzanera ¿Cuál es su vínculo con La Habana? ¿Y con el mundo de Habanos? Tengo una larga historia con Cuba. Cuando tenía seis años mi padre, quien trabajaba para BOAC, ahora British Airways, fue enviado a La Habana para la apertura de la nueva ruta Londres-Habana. Vivimos en esta ciudad de 1957 a 1959. Fue aquí donde comencé a aprender a tocar la guitarra, por lo que se podría decir que las semillas de mi eterno amor por la guitarra fueron plantadas en La Habana. Desde entonces he regresado a dar conciertos junto a mi buen amigo Augusto Enríquez. Tocamos en el Karl Marx e hicimos el primer disco en vivo grabado en Cuba, «Manzanera Moncada: Live at the Karl Marx Theatre». Es grandioso regresar a ese maravilloso teatro y tocar nuevamente con Augusto y la leyenda de Cream, Jack Bruce. Naturalmente mi padre fumaba Habanos, y ese característico y embriagador aroma me resulta increíblemente nostálgico. A él le hubiera encantado ver que su hijo tocara en el prestigioso Festival del Habano. El Festival del Habano rendirá homenaje a las marcas Cohiba y Romeo y Julieta. ¿Están entre sus favoritas? Fue fascinante conocer por qué muchos de estos famosos clásicos tabacos tienen nombres tan maravillosos: de los libros leídos a los torcedores. ¡Habanos debe tener la fuerza de trabajo más «libresca» del mundo! El XIV Festival del Habano tiene lugar en el marco del 520 aniversario del descubrimiento del tabaco. Por ello, el evento estará especialmente dedicado al intercambio cultural que surgió a partir de la unión entre España y Cuba. ¿Cuál es su experiencia respecto a la mezcla de culturas? ¿Qué es lo que más aprecia de los ritmos cubanos y su influencia en la música contemporánea? La música cubana es una mezcla única de ritmos africanos, música clásica y tradicional europea traída a través de España a partir del siglo XVI, y jazz. Sin embargo, las letras y melodías de Pablo Milanés y Silvio Rodríguez han llevado la música cubana a un plano superior, teniendo resonancia en España y todos los países hispanos. Obviamente, los discos de Buena Vista Social Club y la Vieja Trova Santiaguera, han tenido un efecto increíble en la apreciación de la música cubana a nivel global desde la década de 1990. En la Gala de Bienvenida, usted compartirá el escenario con Augusto Enríquez y con Jack Bruce en un espectáculo llamado Eclectic-us.¿Cuál es su relación con el músico cubano? He tocado en Cuba en cuatro ocasiones. Conocí a Moncada en el Festival de San Remo, en Italia, en 1990, donde me invitaron a tocar con ellos. Vine por primera vez en 1990, la segunda vez fue en 1992, la tercera en 1997. En 1999, Augusto, su esposa Yami, cantante, y Aldo López-Gavilán, tocaron en un festival conmigo en el Reino Unido. El concierto fue grabado y se convirtió en el álbum «801 Latino». Jack Bruce es uno de los músicos más famosos del mundo. Su grupo Cream fue y aun es reverenciado; escribieron clásicos como White Room y Sunshine of Your Love, que continúan teniendo el mismo impacto de siempre. ¿Qué actividades del Festival no le gustaría perderse? Esta es una experiencia tan única para mí que trataré de asistir a todo lo que pueda. Durante mi visita a Cuba el pasado mayo hice un recorrido fascinante por la fábrica de la marca Cohiba; fue una revelación ver todo el proceso, de comienzo a fin. Augusto vino conmigo y cautivó a los trabajadores al cantarles dos de sus éxitos –fue muy emocionante ver la alegría y el amor por la música que yace en los corazones del maravilloso pueblo de Cuba. Cuba ha servido de inspiración a los músicos por mucho tiempo, en su opinión, ¿qué es lo que resulta tan inspirador? Cuba es un caldo de cultivo musical. Yo he tenido el gran placer de tocar con muchos de sus grandes músicos. El nivel de maestría musical en Cuba es asombroso. Este es un país como ningún otro: la gente, la impresionante arquitectura, la costa, los campos… para un músico hay mucho para despertar la creatividad .
SEXTO SENTIDO Con su participación en la noche de gala inaugural del XIV Festival del Habano, las chicas del cuarteto Sexto Sentido ponen una especial nota melódica al espectáculo. Han cumplido 15 años de trabajo en escenarios cubanos e internacionales, moviéndose justamente entre el jazz, la bossa nova, el rhythm & blues, muy a tono con la sonoridad y concepto de Eclectic-us. Arlety Valdés (Dirección Musical), Eliéne Castillo, Wendy Vizcaíno y Yudelkis La Fuente (Dirección General), integran la agrupación vocal. Sus discos más recientes Mi feeling y The Way (El Camino), le han conquistado las preferencias del público en Cuba. Más información en: www.myspace.com/sextosentidocuba