El mágico universo de Cohiba

Marca y fábrica, binomio ineludible en la leyenda del Habano, toda una promesa para quienes gustan de un Habano distinguido y de estilo clásico.

Silencio, concentración, un aroma a frescura natural inunda los salones y espacios de esta fábrica, rodeada de hermosos jardines tropicales en el barrio de Siboney. Es donde se elaboran los Habanos de la marca Cohiba con todas sus líneas y vitolas. Visitarla permite disfrutar durante algunos minutos de toda una tradición en contacto directo con los secretos de esta verdadera leyenda, la referencia más valorada en el mundo de los puros Premium a nivel mundial. La oportunidad es única por muchos motivos: allí están los grandes maestros torcedores en faena, herederos y también transmisores de una centenaria tradición; se elabora la marca estandarte de la industria tabacalera cubana, la única cuyas hojas se someten a una fermentación adicional; parece vivir el mito de la perfección…que vuelve a expresarse ahora en el nuevo Cohiba Pirámides Extra, el primer figurado para permanecer en la gama de Cohiba, en su Línea Clásica. Por eso puede ser el mejor lugar para que los participantes del XIV Festival se acerquen al proceso de elaboración de un Habano, una obra de arte que antes de nacer debió cumplir una larga travesía de años desde el campo hasta la galera, el corazón de la fábrica, donde los torcedores –mayoritariamente mujeres– dan con sus manos los mimos definitivos a la preciada hoja y surgen de ellas estas apreciadas joyas. El Laguito cautiva, además, por ser una forma de expresión del carácter ancestral y remoto de una industria que a lo largo de los siglos ha perdurado por su apego a la exquisitez; y por esa extraña capacidad de seducción que ejerce sobre el visitante, que salvo excepcionalmente, no alcanzará jamás a imaginar a priori el vivo latir en sus salones, de una tradición más que centenaria.