Ciro Bianchi Ross, presidente fundador de la Academia Cubana de Gastronomía y Turismo.

CREADA PARA INVESTIGAR, RESCATAR, MOTIVAR, CONSERVAR, PROMOVER Y DESARROLLAR TODO LO QUE PUEDA APORTAR A UN MEJOR CONOCIMIENTO DE LA CULTURA DE LA COCINA

La Cátedra Cubana de Gastronomía y Turismo ya es un hecho. Instituida este 2015, un trayecto lleno de retos y grandes motivaciones se abre ante ella. Sobre los principales elementos de su composición conversamos con su Presidente Fundador, el periodista e investigador, Ciro Bianchi Ross.


¿Cuál será el propósito esencial de esta nueva Cátedra?
La Academia Cubana de Gastronomía y Turismo (Cátedra) es una asociación cultural y educativa sin fines de lucro. Persigue, entre otros, los objetivos siguientes: apoyar al posicionamiento del país y la mejora de la calidad de los servicios y la gastronomía. También la coordinación de actuaciones y asesoramiento en la unificación de criterios y acciones específicas de implementación, promoción y formación en y para empresas, restaurantes, escuelas, asociaciones, ferias, congresos, etc; a la par de la clasificación de establecimientos y profesionales de la gastronomía.

¿Cómo está compuesta?
La componen 28 académicos de número. Entre ellos figuran los que componen el Comité Académico o Junta Directiva, esto es Presidente, Vicepresidente, Secretario Ejecutivo, Tesorero y dos Vocales. Habrá, asimismo, académicos supernumerarios. Son aquellos que por su domicilio u otra razón no asisten de manera habitual a los actos que convoca la Academia, la cual tendrá su domicilio social en La Habana. 

Contará, además, con un grupo de académicos de honor que responderán al Presidente de la misma. Ninguno de ellos percibirá retribución económica alguna. Aunque están previstas en los Estatutos que no se constituirán por el momento academias regionales ni provinciales.  

¿Quiénes serán los académicos?
Gastrónomos, empresarios del sector y personalidades destacadas de la vida política, económica, empresarial, cultural y social del país, unidas por su afición o vocación por la gastronomía y entendidas en los temas gastronómicos.

No podrán ser académicos los profesionales de la restauración, cocineros, sommeliers, cantineros… a fin de que la Academia pueda valorar con absoluta independencia e imparcialidad el quehacer de cada cual.

Ministerios como la Industria Alimentaria, Educación, Comercio Interior y Agricultura estarán representados a partir de las propuestas que realicen sus titulares. Entre los académicos habrá también médicos, nutriólogos y directivos de nuestras más importantes empresas. Han aceptado ser propuestos la doctora María Cristina Jorge, directora de la Escuela Latinoamericana de Chocolatería y Pastelería y el doctor Jesús G. Yáñez  Querejeta, Presidente  de  la Asociación para la Ciencia y la Tecnología de los Alimentos. También la doctora Concepción Campa, directora del Instituto Finlay y creadora de la vacuna antimeningocócica, que ha trabajado mucho el tema de la macrobiótica y en la introducción de nuevos alimentos en la dieta del cubano.

La doctora Mariela Castro Espín, directora del CENESEX, aceptó con júbilo la propuesta. Y también Gladys Egües, Premio Nacional de Periodismo y experta en temas de la cocina cubana. Se suma la doctora Luisa Campusano, ensayista y profesora muy destacada que desde la historia ha trabajado el tema de la alimentación.

Otras personalidades que manifestaron su aceptación  son el maestro Leo Brouwer, Premio Tomás Luis de Victoria, el doctor Ricardo Alarcón, ex canciller y ex presidente del Parlamento cubano y el doctor Osvaldo Martínez, ex director del Centro de la Economía Mundial.  Además, Eduardo Torres Cueva y Nancy Morejón, presidentes de la Academia de la Historia y de la Lengua, respectivamente… Como ve, ha sido alto el poder de convocatoria.

¿Cuáles serán las actividades principales a desempeñar?
La capacitación está incluida, por supuesto. Sobre las materias que le incumben la Academia llevará adelante programas de investigación, cursos, seminarios, conferencias, etc. Elaborará materiales didácticos o divulgativos sobre alimentos, cocina, alimentación y gastronomía y procurará su publicación ya sea en papel o en otros soportes. Colaborará a nivel internacional con otras academias y convocará y concederá premios relacionados con su ámbito. En este sentido se trabajará en la organización de los premios nacionales de gastronomía en las categorías de Chef, Sommelier, Labor Periodística, Mejor Publicación  y un Premio Especial por la obra de la vida.

Funcionará como órgano asesor de los ministerios de Salud, Cultura, Educación y Turismo. Atenderá las consultas que le haga la Administración Pública y emitirá los informes, dictámenes, juicios y propuestas procedentes en las materias de su competencia. Podrá, asimismo, emitir informes a petición del sector privado y cooperativas no estatales.

Asumirá los comités que formarán las asociaciones culinarias, de sommelier, de cantineros, etc., por su aporte profesional. Esas asociaciones tendrán voz en las sesiones de la Academia, pero nunca votos.

¿Cómo interactuará esta organización con las Academias de la región y la Iberoamericana?
Espero que las relaciones sean buenas y exista entre todas un fructífero intercambio, no puede ser de otra forma cuando se sabe cuántos esfuerzos y desvelos dedica al tema el señor José Carlos de Santiago, director general del Grupo Excelencias y embajador de la Academia Iberoamericana. El señor Nicolás Muela, presidente ejecutivo de esa última entidad, dirigió a la Academia Cubana un fraternal saludo con motivo de su constitución. En su mensaje se alegra de que el proyecto cubano llegara a buen fin para comenzar así el camino que nos queda por recorrer juntos.