Excepcional embajador de buena voluntad
LOS GLOBOS NOS ACERCAN A PARAJES QUE DE NINGUNA OTRA MANERA PODEMOS CONTEMPLAR CON LA MISMA TRANQUILIDAD QUE SI ESTUVIÉRAMOS ASOMADOS A UN MAGNÍFICO BALCÓN. ELLOS NOS ABREN DE PAR EN PAR LAS PUERTAS DEL MUNDO
Es evidente que cuando te sumerges en un mundo diferente al habitual, los sentidos se despiertan y descubres sensaciones que un minuto antes parecían inimaginables. Ese poder lo tienen los globos aerostáticos, que con sus colores, formas y majestuosidad han sabido adaptarse a los tiempos, consiguiendo hacerse un lugar en su espacio atemporal.
En la actualidad estamos viviendo manifestaciones aerostáticas cada vez más abrumadoras e increíblemente vistosas. Estos vehículos con su pausado caminar, a modo de manada de elefantes viajando por la «azul sabana» de los cielos, tienen la capacidad de congregar a miles de espectadores que pueden vivir la experiencia en primera persona, bien subiéndose a su lomo como pasajero del viento, o tal vez participando de lo que llamamos «Night glow»: un espectáculo nocturno de luz y sonido muy sorprendente, en el cual los globos resplandecen al son de la música, mientras los asistentes están entre nosotros a pocos centímetros, e incluso dentro de las barquillas, sintiendo el rugir de los quemadores y viviendo una experiencia que los marcará para siempre.
No ajeno a ello, el mundo de la comunicación, en constante evolución, sabe que lo que ayer funcionaba, mañana está obsoleto, pero en los globos ha encontrado un magnifico filón que no caduca. Arropado a las nuevas tecnologías y a la fuerza de las redes sociales, ha conseguido exportar e influenciar a partir de la imagen que un patrocinador quiere transmitir al mundo de sí mismo.
Hace tan solo unas semanas, fuimos invitados a sobrevolar un país increíblemente bello, Arabia Saudita. En la actualidad las nuevas generaciones están tomando el relevo y se han propuesto sumir a su tierra en el siglo actual, propiciando importantes cambios sociopolíticos en temas de igualdad, educación, inversiones, transparencia, religión, turismo, etcétera.
Trabajan duro en ello, y quieren que se sepa y se les visite: utilizan el icono de sus fiestas de invierno de la siembra de Tantora, de la provincia de Al Ula, y organizan un programa muy completo conformado por megaconciertos, carreras de caballos de alta resistencia, increíbles albergues y restaurantes con todo tipo de lujos, instalados en el desierto para dar cobertura al turista... Y para que todo este nuevo perfil traspase fronteras, emplean nada menos que la imagen del globo aerostático como hilo conductor, lo cual nos enorgullece y nos hace ser mejores en lo nuestro, y nos invita, más que a competir, a colaborar y arropar estos eventos con nuestro soporte multicolor.
Cada mañana, nuestros 70 globos salían a volar con los VIPs, que la organización tenía coordinados, quienes siempre acudían expectantes y encantados para la experiencia que iban a vivir: sobrevolar a solo unos pocos metros de alturas, una superficie de unos 15 km2 que alberga asentamientos de varias civilizaciones con más de 4000 años de antigüedad, y apreciar las formaciones rocosas de Madaîn Saleh, con sus tumbas labradas en la piedra se ha convertido en el primer paraje saudita bajo el ala de la UNESCO.
Los globos nos acercan a parajes que de ninguna otra manera podemos contemplar con la misma tranquilidad que si estuviéramos asomados a un magnífico balcón. Pues a partir de unos meses, Windtrotters Balloons, empresa del Grupo Excelencias, les facilitará a los turistas disfrutar de esta fascinante actividad también en Cuba. Es una aventura que de seguro querrán vivir en nuestra increíble Isla, la mayor del Caribe, con la complicidad de la agencia de viajes ECOTUR y el Club de Aviación de Cuba.