En medio de una hermosa y variada vegetación donde los verdes se combinan con el azul del cielo y los matices claros oscuros del lago Gatún, se alza desde hace más de 10 años este magnífico hotel cinco estrellas, de 285 habitaciones.

Ocupa un edificio histórico construido en la primera mitad del siglo XX, que en 1946 se convirtió en la sede de la Escuela de las Américas y que muchos años después, cuando los gringos la abandonaron, fue devastada. Es aquí donde apareció Don Damián Barceló, español muy conocido en el ambiente turístico americano y europeo, quien hizo de aquellas ruinas un lugar al servicio de los hombres para encontrar en él paz y alegría, a pesar de su historia de dolor y de guerra. En la imaginación del empresario apareció –tras una «operación de estética ligera»–, como él mismo dice, el hotel cinco estrellas Meliá Panamá Canal, a sólo 10 minutos de la Zona Libre de Colón, y a 45 minutos de camino de la Ciudad de Panamá por una buena autopista recién inaugurada. A sus comodidades, lujo y confort, hermosos jardines y piscina, se añade una espectacular vista al lago Gatún y el acceso a todo un tesoro de flora y fauna, que le convierten en el sitio ideal para quienes se sienten atraídos por la naturaleza, buscan relajarse y disfrutar de una atención personalizada. Un curioso detalle en la decoración de este alojamiento es un cañón antiaéreo de la II Guerra Mundial, que aparece en la entrada rodeado de flores, como testimonio de que no le queda ya ninguna misión bélica. Sol Meliá brinda a sus huéspedes el escenario perfecto para el desarrollo de tours de aventura en lugares históricos, el ecoturismo, la pesca deportiva, las playas del Caribe, el canopy, el paintball y el senderismo; y próximamente –en una de las islas cercanas al hotel–, desarrollarán un proyecto de team building para servicios coorporativos. Para sus huéspedes ofrece excursiones, paseos y fiestas temáticas, que les permiten entrar en contacto con la cultura del país. Para un público más exigente constituye una garantía el Servicio Real con registro privado, servicio de mayordomo, diario local en la habitación, desayuno de la casa en el Lounge Real y las atenciones más personalizadas. Restaurantes de primera como el Miraflores, con servicio de buffet y a la carta; El Darién, especializado en cortes de carne; y la Pérgola del Lago, en un ambiente muy especial; son un verdadero regalo para los paladares más refinados. Meliá Panamá presta también servicios para la celebración de eventos y convenciones, en salones con capacidad desde 10 hasta 40 personas; mientras que en su Centro de Convenciones, Hernando Colón, puede acoger citas de hasta 800 participantes. Una comodidad adicional ofrece en su Kid's Club, donde los pequeños disfrutan de un sano esparcimiento y disponen de las mejores atenciones. Está programada para el año próximo la apertura de un Spa, como otro complemento de placer en un hotel verdaderamente inolvidable, el único de esta marca en el país.