COHIBA el señor de los maridajes.
LA MÁS ICÓNICA DE LAS MARCAS DE HABANOS SE HA IMPUESTO EN EL MUNDO DE LOS “ASSEMBLÉES” POR SU CALIDAD, EXCLUSIVIDAD Y LA DIVERSIDAD DE SU VITOLARIO
Cohiba ha sido una de las grandes marcas de Habanos desde sus comienzos. Su concepción, elaboración y comercialización estuvo rodeada por un encantamiento de vitolas originales, selección de las hojas de las cinco vegas de primera de los míticos distritos tabacaleros de San Juan y Martínez, y San Luis, en Pinar del Río, así como de procesos adicionales de añejamientos de la materia primera y exquisita selección de los torcedores, todo a favor de un producto de sublime calidad.
Es por todo ello que Cohiba se convirtió en la más perseguida marca de Habanos. Hoy es la única marca con cuatro líneas, perfectamente tipificadas, y posee tres de los cinco territorios de sabores: la Línea Clásica y la Maduro 5 son medio fuerte; la Línea 1492 es medio; y La línea Behike es de territorio de sabor fuerte.
Nunca en el mundo del Habano se han combinado tan sabiamente el amor y el trabajo en la perfección, por lo que, en su 50 aniversario, Cohiba representa el orgullo de la cultura tabacalera cubana.
Sus cuatro Líneas y extenso vitolario tienen auténticas singularidades, por lo cual también deben ser únicas sus propuestas de maridajes.
BENDICIONES DE COHIBA
Desde sus comienzos, esta marca gozó de bendecidos misterios, una vieja mansión señorial, selectiva composición de mujeres torcedoras y un buen hacer de sus vitolas.
A ello se le suman los altos estándares de calidad y ser la única marca de Habanos en la que tres de los cuatro tipos de hojas que se emplean en su conformación (seco, ligero y medio tiempo) experimentan una fermentación adicional en barricas de roble blanco.
Muchas pueden ser las familias de destilados compatibles con las vitolas de Cohiba, pero sin duda el ron, y en especial el ron ligero cubano es insustituible con el Habano, pues son almas gemelas e hilos conductores de la identidad de la nación.
No obstante, esto no quiere decir que en el extenso y exclusivo vitolario de Cohiba no haya opciones para todos los gustos, especialmente si los maridajes se realizan con espirituosos de las gamas Premium, Ultra Premium e incluso Prestige.
ENCUENTROS DE COHiBA CON EL RON
Su primera Línea, llamada Clásica, desarrollada entre 1966 y 1989, la conforman seis vitolas. El Lancero fue, como su nombre lo indica, su “punta de lanza”, y lo acompañan en nivel de éxitos el Robusto y el Espléndido, los cuales se completan con las Coronas Especiales y las Panetela.
Lanceros es una obra maestra, solo elaborada por los más profesionales torcedores. Este Habano, largo y fino, es potente, de notas especiadas y recuerdos a chocolate, altamente recomendado con grandes añejos como Santiago 11 años o Mulata 12 años.
Robusto y Espléndido son los grandes acompañantes de la Línea Clásica. El primero sentó las bases futuras de los Habanos de corto recorrido, de proporciones perfectas, con notas a frutos secos, deliciosas notas a madera, las cuales hacen que un Robusto se acompañe muy bien con Havana Club 7 años.
Espléndido, el más hermoso de la Línea, es una excepcional Julieta, bien conformada, de preciosas notas a madera, frescas notas herbáceas, con notas de torrefacto donde domina el humus y esos lujuriosos amargo en boca ideal con rones como Caney 12 años, o Mulata 15, ligeros pero de post gustos largos y complejos.
En 1992 es lanzada la Línea 1492, en conmemoración a los 500 años del descubrimiento de América, inicialmente con cinco vitolas, a las cuales se les agregó en el 2002 el Siglo VI, la más espectacular de las vitolas hasta entonces elaboradas en la marca Cohiba, poseedora de una personalidad irresistible.
Al Cañonazo, nombre en galera del Siglo VI, se le consideró la fumada perfecta. El novedoso Habano, de cepo 52, presenta sabores intensos, con notas a cedro y pimienta, y es altamente recomendado con Havana Club Unión, la última joya de la Colección Icónicas de Havana Club, ron voluptuoso, muy bien integrado y seductor si lo maridamos con Cohiba Siglo VI.
Por otra parte, de la propia Línea 1492 se puede disfrutar disfruto mucho del encuentro entre un Cohiba Siglo IV, una corona grande, con el Ron Havana Club Reserva, ligero y sedoso en boca.
En el 2007 es presentada la Línea Maduro 5, con tres nuevas vitolas: Genios, Mágicos y Secretos, las cuales son de corto recorrido, e incorporan una capa maduro, añejada durante cinco años, lo cual le da una coloración muy típica a estos Habanos.
En cuestiones de maridajes, el Genios es el más relevante de esta línea, intenso en sabor, con complejo final de boca, de cuerpo, donde los ahumados, los sabores terrosos y de relevantes torrefactos, así como notas de tenería, hacen un deleite en la fumada.
Excelente resulta el maridaje con el Santiago Siglo y Medio, de reciente lanzamiento, un viejo añejo de estructura y de sugerentes propuestas aromáticas y gustativas. Se trata de un “assemblées” de Habano y Ron que frisa la perfección.
MARIDAJES CON BEHIKE
El surgimiento de la Línea Behike en el 2006, con motivo del 40 Aniversario de Cohiba, significó toda una revolución, tanto por su alta calidad como por su limitadísima producción, lo cual la convirtieron en la línea más exclusiva de la marca.
Behike incorporó por primera vez en la ligada de sus tres vitolas el medio tiempo, una hoja muy escasa proveniente de las dos hojas superiores de la planta de tabaco de sol, que le aportan a esta Línea un carácter y sabor excepcionales. BHK 52, 54 y 56 son vitolas de excepcionales carácter olfato gustativos ,que invitan a proponer los añejos más exclusivos.
El BHK 52, el más pequeño, es a la vez poderoso, de intensas notas especiadas, combinadas con una refinada madera, que comienza impetuoso, con notas terrosas y delicadas notas de cacao y café. Se disfruta con Havana Club Selección de Maestros, ron de perfiles a pieles de naranja confitada, balanceado, de intensas notas amaderadas, chocolate amargo y café, con un voluptuoso final de boca.
BHK 54, el más equilibrado de los tres, elegante en su fumada, tiene notas licorizadas, ahumadas, de notables riquezas gustativas, con presencia del coco y cacao amargo. En el maridaje encuentro este Habano destinado para Havana Club Máximo, la obra maestra de la Colección Icónica de Havana Club, un resultado de la mezcla con los más viejos rones, homenaje a la cultura ronera cubana, rico en aromas, donde la vainilla, la madera, las notas de coco y café tostado nos trasladan a un irresistible final especiado en boca. Es un maridaje de otra galaxia.
Por último, el BHK 56, el Laguito No.6, como es su nombre de galera, presenta intensas notas vegetales, donde la madera está bien insertada aromáticamente con los complejos sabores amargos, con destaque a frutos secos y delicadas notas de tenería. Su fumada es muy pareja y el final muy placentero.
Lo enfrenta en el maridaje con gran esplendor el Ron Santiago 25 años, voluptuoso, rico en aromas, donde destacan los tostados, las deliciosas notas dulzonas, y la madera juega con el aguardiente para lograr un sabor balanceado, sedoso en boca, dando paso a un largo final. Es un maridaje seductor.
OTROS CLÁSICOS COHIBAS
Por su sello de constante y creciente innovación, Cohiba es la primera marca de Habanos S.A. en lanzar su Reserva en el 2002 y su Gran Reserva en el 2009. Ambas han sido elaboradas con hojas de tabaco con mínimo de entre tres y cinco años de maduración respectivamente, los cuales las hacen ideales para emparentarse con el Ron San Cristóbal de La Habana 480 Aniversario, ron de producción única, complejo, con notas a manzana y frutos secos, de carácter excepcional, y sin dudas un ron de colección.
Lanzada en el 2013, la Pirámides Extra de Cohiba es la última frontera de los mono figurados, un Habano de factura impecable, muy aromático, con recuerdos a las hojas de té y las nueces tostadas, una pirámide de cuerpo y personalidad. Sugerente es su enamoramiento con el viejo ron añejo Isla del Tesoro, armónico, envolvente, persistente en boca y equilibrado, donde los dos se funden en una relación de intensidad muy disfrutable.
Para el cierre dejamos la última joya de la Corona de Cohiba, el Robusto Supremo Edición Limitada 2015, un Habano que ha impactado al mundo de los amantes de los Habanos, de bella capa maduro, factura perfecta, con cepo 58, el más grueso del vitolario de Habanos; e inmenso en su riqueza gustativa con notas de cuero y potentes amargos en boca.
Se trata de un Habano rebelde, de cuerpo, tremendamente disfrutable con el Havana Club 15 años, que sigue el clásico estilo de los viejos añejos, armonioso, sedoso en boca, de complejo y largo post gusto en boca. Es un encuentro entre dos potencias… con un soberbio final.