De izquierda a derecha: Alfonso Marín, Kenneth Broder, Álvaro Ruiz de Somocurcio, Pilar Larrain, Luis Ros, María Podestá, Rafael Ansón, Ignacio Gutiérrez Zaldívar, José Carlos de Santiago, Maria Cristina Muanis do Amaral Rocha, Antonella Ruggiero y Sylvio do Amaral Rocha.
Ignacio Gutiérrez Zaldívar y José Carlos de Santiago frente al logotipo de Buenos Aires como Capital Iberoamericana de la Cultura Gastronómica.

LA ACADEMIA IBEROAMERICANA DE GASTRONOMÍA CONTINÚA SU BREGAR EN 2017, AMPLIANDO EL HORIZONTE DE LAS COCINAS TRADICIONAL Y GOURMET, ESTA VEZ CON LA SUERTE DE CONTAR CON ARGENTINA COMO SU CAPITAL

Todavía recuerdo con cariño la creación de la primera panacademia de gastronomía, la Iberoamericana, el 21 de septiembre de 2009 en un solemne acto que llevamos a cabo en la sede de la Real Maestranza de Caballería de Sevilla (momento del que hablo en mi último libro La Cocina de la Libertad).
Ese día nos reunimos, con profunda ilusión, los presidentes de las Academias de España, Argentina, Portugal, México, Brasil, Colombia, Chile y Perú para sellar el compromiso de crear una institución colaborativa que, desde entonces, ha fomentado la investigación, divulgación y protección de las cocinas y actividades gastronómicas propias de las distintas regiones y pueblos iberoamericanos, así como el cuidado de sus tradiciones, el apoyo permanente para su modernización y el impulso de actuaciones integrales en materia de cooperación internacional y solidaridad.
Ese fue el punto de partida de un sentimiento en el que ya creía y que, confío, se hará aún más fuerte: el ser iberoamericanos. Hoy, 13 países se hermanan en la AIBG (España, Portugal, México, Cuba, República Dominicana, Panamá, Venezuela, Colombia, Perú, Chile, Argentina, Brasil y Estados Unidos Este como Academia asociada).
Más de una decena de naciones que, además de compartir el español y el portugués como idiomas, han hecho de su alimentación el mejor ejemplo del maravilloso intercambio que se vivió entre América y Europa.
Sería imposible concebir el recetario europeo sin productos de aquellas orillas –como el maíz, el tomate, el pimiento, la patata o el cacao– y el americano sin el café, la caña de azúcar, el trigo, la vid, el cerdo o el aceite de oliva. A ese enriquecedor e histórico proceso se le conoce como de “ida y vuelta” y se ha traducido, desde el punto de vista de la cultura gastronómica, en una oferta muy singular y superior a la del mundo anglosajón.
Una realidad que se confirma, año tras año en las clasificaciones internacionales más importantes –como la Guía Michelin o los rankings The World’s 50 Best Restaurants y Latin America’s 50 Best Restaurants–, porque los cocineros y cocineras iberoamericanos ocupan las primeras posiciones de la cocina mundial, gracias a la ejecución (revisada), en muchos casos, de los recetarios tradicionales de cada uno de sus países.   

Los próximos 12 meses de la AIBG
Uno de los proyectos bandera de la Academia Iberoamericana de Gastronomía es la marca Capital Iberoamericana de la Cultura Gastronómica, una designación que nace para recordar la importancia de nuestra oferta gastronómica.
De momento, las ciudades que han recibido esta distinción son: Córdoba (Andalucía, España) en 2014; Guanajuato (México) en 2015; Mérida (Extremadura, España) en 2016 y Buenos Aires (Argentina) que será la capital del 2017.
Esta capitalidad se dio a conocer en el curso de la VIII Asamblea General de la Academia Iberoamericana de Gastronomía, celebrada en noviembre de 2016 en la capital argentina.
En los próximos meses, la ciudad porteña pondrá el foco en sus alimentos y bebidas, mercados, restaurantes y en eventos como los I Juegos Gastronómicos Iberoamericanos, la II Feria Iberoamericana de Gastronomía (FIBEGA), los I Premios Iberoamericanos de Gastronomía, la I Cena Virtual Iberoamericana o el II Congreso Visión Global de la Gastronomía en el siglo XXI.
Además, ratificará su compromiso de colaboración y trabajo mancomunado con la Secretaría General Iberoamericana (SEGIB), la Unión de Ciudades Capitales Iberoamericanas (UCCI) y con la Organización Mundial del Turismo (OMT).
No quiero olvidar que Buenos Aires ya tiene sucesor pues se aprobó, a merced de la candidatura de la Academia Brasileira de Gastronomía, que el estado y la ciudad de Sao Paulo ostenten la capitalidad en 2018 por su innovación y excelencia.