Primera categoría Hombres, 1er. lugar, José Marfil, España.
Primera categoría Hombres, 2do. lugar, Alexei Castellanos, Cuba.
2do. lugar de las damas, Drive más largo y Gross femenino, Annia Blanco, Cuba.

XIV TORNEO POR EL DÍA DE LA HISPANIDAD

Del primero al cuatro de octubre pasado, profesionales y amateurs concurrieron al Varadero Golf Club, ubicado en el occidente cubano, para celebrar el XIV Torneo de Golf por el Día de la Hispanidad

La primera jornada del XIV Torneo de Golf por el Día de la Hispanidad vaticinó un certamen de altos quilates. Frente a la Mansión Xanadú se desplegaba un campo agradable a la vista no solo de los aficionados, sino también de los participantes que integrarían una nómina de más de 60 competidores provenientes de 11 países, incluida Cuba, durante el XIV Torneo de Golf por el Día de la Hispanidad.
Del primero al cuatro de octubre profesionales y amateurs concurrieron al Varadero Golf Club, ubicado en el paradisíaco balneario de la península de Hicacos. Unos repitieron su asistencia al certamen, pero otros llegaron por primera vez. Entre ellos se encontraron Gonzaga Escauriaza, presidente de la Federación Española de Golf e integrantes de la notoria Asociación Profesional de Golf (PGA, por sus siglas inglés), prestigiados por la figura de Rich Beem, ganador del torneo de la PGA en el año 2002 sobre el legendario Tiger Woods.
Por esos días en la sede deportiva del evento, organizado desde hace más de una década por la Embajada de España en Cuba, se vieron pequeñas siluetas aisladas en una extensión verde de casi 6 270 m lineales de recorrido, entre el inicio y la meta; diminutos puntos que por momentos alzaban los bastones y dibujaban una trayectoria que la vista perdía en busca de la pelota blanca.
Si se miraba así, el golf parecía un deporte de soledades. Pero no, porque contemplar a los atletas de un hoyo a otro, hacía pensar que también el juego podía crear vínculos. De esta manera lo confirmaba para Excelencias Gonzaga Escauriaza, al aseverar que este certamen se trataba de un “torneo de amigos”.
Con esta fiesta del golf los organizadores españoles han ganado prestigio, solidez y sobre todo jugadores jóvenes, cubanos y prometedores, como valorara Rich Beem. Según el excelentísimo señor Juan Francisco Montalbán, embajador de España en Cuba, hoy se consolida el deporte de “palos” y pelotas como negocio de altas potencialidades deportivas y turísticas.
Luego de las fechas de competencia, la actual edición confirmó la excelente forma deportiva de los participantes nacionales quienes lideraron la tabla de premiaciones. Si bien el veterano golfista español José Luis Marfil llevó a casa el gran premio de la primera categoría, lo siguieron los cubanos Alexeis Castellanos, Idolio Méndez y Daniel Batista en los puestos del segundo, tercero y cuarto escaños respectivamente.
El cubano Alexander Blanco comandó la ronda de la segunda categoría. En tanto, los siguientes galardones correspondieron a Robert Berardgell, Osvaldo Pousada y John Walker.
El viento del Mar Caribe durante la competición obstaculizó un tanto el trabajo en el green, comentó a esta publicación la jugadora Vilma Otero. Sin embargo, ello no le impidió obtener el primer lugar a la canadiense Lynn Crete en la categoría Stableford para damas. Mientras, la cubana Annia Blanco, una de las favoritas del torneo, quedó relegada al segundo puesto, seguida de Hayme López y Otero en los lugares tercero y cuarto respectivamente.
La XIV edición del Torneo por el Día de la Hispanidad celebrada en los márgenes de la Mansión Xanadú lució, por vez primera, la asistencia de un campeón como Beem, de Escauriaza, el undécimo presidente en la historia del organismo federativo español, y nada más y nada menos que de Gary L. Schaal, una “leyenda viviente” del golf , director de la PGA (1993-1994) nominado al Salón de la Fama en 2005.
No obstante, el saldo más significativo esta vez resultó la motivación por desarrollar aquí alguno de los certámenes de la PGA, organización que también se comprometió a donar equipamiento y capacitar profesores con el fin de trascender conceptos elitistas del juego. Asimismo, quedó abierta la posibilidad de que la Federación Española, con la mediación de la sede diplomática del país ibérico, contribuya a fundar en la Isla una asociación cubana de este deporte.