Topes de Collantes, paraíso codiciado y remanso de paz
Sobre los Topes del Macizo Montañoso de Guamuhaya, demarcación cafetalera por excelencia, uno de cuyos linderos se nombraba Collantes, y al centro de la isla grande, se ubica una de las plazas turísticas de Cuba con mayor atractivo para los amantes de la naturaleza.
Topes de Collantes, a 781 metros sobre el nivel del mar y con una extensión de 343 kilómetros cuadrados, posee condiciones bioclimáticas excepcionales, una vegetación típica del Caribe montañoso, un alto endemismo de flora y fauna, sistemas cavernarios, valles intramontanos y hermosos oasis donde las cascadas y afluentes de ríos y arroyuelos revelan un inmenso reservorio medioambiental.
El grupo empresarial Gaviota S.A. opera en la zona un sistema de seis parques nombrados Guanayara, Codina, Altiplano, El Cubano, El Nicho y hacia el mar el paradisíaco Cayo Las Iguanas con su fauna silvestre de iguanas y jutías y pequeñas caletas devenidas íntimas áreas de baño.
El hotel Los helechos y la Villa Caburní, se unen al Kurhotel Escambray, centro especializado en programas de rehabilitación y revitalización con más de doscientas habitaciones, al tiempo que espacios como la Hacienda Codina propician la modalidad de acampadas, senderismos y actividades como el trekking, hiking, la observación de aves, cabalgatas y el espeleoturismo.
Sitio obligado de concurrencia es la Casa del Café, erigida en un mirador natural donde se rescatan las tradiciones cafetaleras de la zona con su muestrario de modos de producción antiguos y objetos relacionados con el cultivo del más codiciado grano, en esa comarca que singulariza culturalmente a sus pobladores.
Topes de Collantes se enlaza históricamente con la otrora villa de la Santísima Trinidad y el Valle de los Ingenios, declarados por la UNESCO Patrimonio Cultural de la Humanidad. Es escalada inevitable o bajada feliz para quienes transitan por la provincia cubana de Sancti Spíritus y reconocen en ese ecosistema montañoso un paraíso codiciado y un remanso de paz.