Verde y azul
Así es como veo Puerto Vallarta cuando cierro los ojos y pienso en ella, azul cielo intenso, azul mar y verde, muy verde por las montañas que lo rodean, por las palmeras que cortan el horizonte.
Tanta es la belleza que dan deseos de compartir, de decir al mundo que aún los paraísos existen aunque sean terrenales, por que también tienen sus problemas.
Y esa visión de nuestra vivencia es la que nos disponemos a compartir, la inmersión en lo verde viene de la mano de un viaje inolvidable al cercano San Sebastián, Talpa y la increíble Laguna de Juanacatlan.
El azul nos lo da un paseo por una selección de playas diferentes, especiales, todas con su toque mágico, divertido, bohemio o desiertas para Robinsones.
El espíritu se llena de color, se eleva según la neblina de las montañas baja y según llegan las olas a la orilla, a ese ritmo nuestra vida de cada día parece más lejana y relativa. El verde y el azul se funden y hay instantes que el mar es verde y las montañas se vuelven azules…sabrán porque.