La fuerza de un nombre
UN HABANO ES MUCHO MÁS QUE UN PURO DE TRIPA LARGA HECHO MAGISTRALMENTE A MANO. PRIMERO LO PENSAMOS, LUEGO DELETREAMOS SU NOMBRE -QUE SUENA IGUAL EN TODOS LOS IDIOMAS DEL MUNDO- Y CUANDO LO ESCUCHAMOS SABEMOS QUE SE HABLA DE UN PRODUCTO GENUINAMENTE CUBANO
La Denominación de Origen Protegida (D.O.P.) define sobre todo el origen de los productos. Esta característica determina el origen ya sea un lugar, región y excepcionalmente un país que le confiere características exclusivas a un producto debido al medio geográfico particular, los factores naturales y humanos que determinan cada una de las fases de producción que tienen lugar en la zona geográfica delimitada.
Las D.O.P. se aplican a productos agrícolas cuya calidad y características están determinadas exclusivamente por el medio geográfico donde nace, se produce y transforma (en las manos expertas de las personas que ahí habitan). Esta denominación lo diferencia de todos los productos similares que existan en el mercado que se producen en otras regiones, y además sustituyen algunas etapas del proceso de elaboración original, por técnicas de industrialización.
Cada productor que asuma una D.O.P. se compromete a mantener la calidad del producto elaborado en el nivel más alto posible. De igual forma existen organismos públicos reguladores de la denominación de origen que se dedican a avalar y autorizar la exhibición de esa categoría.
A todas luces, la principal ventaja de la calificación es la garantía para los consumidores de un nivel de calidad casi constante y las características irrepetibles del producto. Las D.O.P. brindan una protección legal contra la producción o elaboración de los mencionados productos en otras zonas, aunque se utilicen los mismos ingredientes y procedimientos.
D.O.P. en el Mundo
Reconocidas mundialmente, las Denominaciones de Origen Protegida catalizan el prestigio de diferentes productos como el queso Roquefort: un queso azul francés elaborado en la región de Causses del Aveyron, que obtuvo la D.O. en 1925.
Así mismo despunta el vino de Jerez, producido en la ciudad española de Jerez de la Frontera, en la provincia de Cádiz. A la lista de productos selectos se suman el Ron de Venezuela, el tequila mexicano, el pisco peruano, el pisco chileno y el café colombiano… entre otros.
HABANOS
En Cuba, la zona de Vuelta Abajo*, en Pinar del Río* –en la región más occidental del archipiélago, en particular las locaciones de San Luis* y San Juan y Martínez* características únicas que le aportan a los puros desde el crecimiento de la planta y en su proceso de secado, peculiaridades irrepetibles en cualquier parte del mundo, incluso dentro de Cuba.
Un amante de Habanos reconoce en la primera calada los puros originarios de San Luis* y San Juan y Martínez*. El proceso que comienza con la cosecha, luego se cuelgan las hojas en casas al aire libre, se dejan secar y viven una fermentación natural. Después se empacan muy apretadas y experimentan una segunda fermentación, se airean, se humedecen y se ponen en barricas para una tercera fermentación y añejamiento.
En todos los pasos las hojas de los Habanos ganan mayor complejidad organoléptica que propicia diversas sensaciones gustativas como la cremosidad en la boca, untuosidad rozando el paladar, humo voluminoso que envuelve. En cuanto a los aromas saltan los matices de frutos secos, maní, nuez, avellanas y en el retrogusto café, cacao y notas propias del tabaco cubano.
LEYES Y D.O.P.
Un poco más de 500 procesos manuales comprenden la producción de Habanos y todos son sometidos a estrictos controles establecidos por el Consejo Regulador de la Denominación de Origen Protegida (D.O.P.) Habanos para ser merecedores del tan añorado título de ser considerados Habanos.
Si bien no existe una teoría única sobre el tratamiento de las Indicaciones Geográficas. En su tesis en opción del grado científico de Máster en Gestión de la Propiedad Intelectual presentada en el año 2014, Yatelier Hernández Santana asegura que:
“La legislación cubana regula el régimen legal de las indicaciones geográficas en el Decreto-Ley 228 donde se establece el tratamiento tanto de las Indicaciones de Procedencia como el procedimiento de registro de las Denominaciones de Origen nacionales y extranjeras. Además, prevé que el control de las Indicaciones Geográficas esté en manos de la Oficina Cubana de la Propiedad Industrial.
“Mediante variables edafoclimáticas se compararon a Cuba, República Dominicana, Honduras, Nicaragua y México, constatándose que las características de los suelos tabacaleros Ferralíticos Rojos (zona Partido –en Artemisa-) de Cuba presentan magníficas propiedades hidrofísicas, que se adaptan perfectamente a las necesidades biológicas del cultivo del tabaco. Asimismo, se identificó que República Dominicana posee las características climáticas más similares a la zona de Partido, dado entre otros factores por la cercanía geográfica e insularidad, no siendo así en el resto de las zonas analizadas, sin embargo, los productos fumables cubanos no exhiben características organolépticas y calidad similares” asegura Hernández.
El Habano goza de una exclusividad merecida, un símbolo de distinción y buen gusto. El tabaco Negro Cubano fue considerado el mejor del mundo por las condiciones que ostentan ciertas zonas para su cultivo, distinción que mantiene sin discusión más de cinco siglos después.