El primer auto deportivo americano fabricado en serie es el Chevrolet Corvette, aún en producción tras 67 años y 8 generaciones.

La coyuntura de dos acontecimientos hizo posible que este auto deportivo fuera realidad: uno, la II Guerra Mundial dejó inhabilitadas las fábricas de automóviles en Europa; y dos, la pujante economía de postguerra en USA inició los años de oro del auto americano. Y General Motors (GM) inventó su expo itinerante (Motorama) para impulsar «el sueño americano». 

Motorama fue la Parade of Progress de GM, un evento que recorrió USA a bordo de grandes camiones (sueños sobre ruedas), llamados Futureliner, en interminable caravana. Solo verlos pasar era ya un espectáculo. Así, en su gira nacional, el 17 de enero de 1953 se exhibió por primera vez, en New York, el Chevrolet Corvette.

Cómo nació la idea

Entre los productos añorados en la postguerra estaban los automóviles de tipo deportivo, ajenos a los enormes autos americanos, de pavorosa figura e inmensos motores. Los «deportivos» habían triunfado antes en Europa y los norteamericanos anhelaban nuevos vehículos, dignos de apasionantes aventuras sobre ruedas.
Eran los años 50 y los Baby Boomers deseaban una vida en la que primara la modernidad y lo divertido. Al mismo tiempo, los soldados que venían de la guerra se establecían y buscaban satisfacciones para borrar la herida de los combates. Súmese a todo esto que había dinero en USA.  

Cómo se materializó
 
El Corvette fue el resultado de una «conspiración» entre Harlow Curtice, de General Motors, y Thomas Keating, de Chevrolet, con el concurso de Earl Harley, experimentado diseñador de la compañía, quien es considerado el padre del Chevrolet Corvette.  Su proyecto, numerado como EX-122, fue aprobado para producir un auto pequeño, de dos plazas, descapotable, con motor 6 cilindros de serie.

Finalmente, le dieron «luz verde» el 2 de junio de 1952. Era el primer auto genuinamente norteamericano que se consideró «deportivo» y, además, el primero en ser fabricado con la carrocería de fibra de vidrio. El 30 de junio se construyó la primera de las 300 unidades que se fabricaron del primer Corvette C1, todas «hechas a mano» en la planta de Flint, en el estado de Michigan.

Esta fábrica solo tenía una línea de producción que sacaba tres vehículos diarios, todos iguales, con la carrocería de color blanco polo, la capota negra, las llantas rojas y el interior tapizado también en rojo. Así empezó la historia del Chevrolet Corvette, creado por Harley Earl, la cual duró 10 años (1953-1962) en esta primera etapa.

Quién fue Harley Earl (1893-1969)

Este diseñador automovilístico nació en Los Ángeles, California, EE. UU. Era ingeniero y diseñador industrial. Cuando empezó en General Motors tenía 34 años, en 1927. Su primer trabajo fue con el modelo LaSalle, el hermano menor del Cadillac. Fue impulsor del estilo tailfin, aquellas grandes colas que dominaron el diseño de los automóviles en la década del 50  e inicios de la del 60.

Para realizar el Corvette, Earl se inspiró en los autos deportivos británicos de antes de la guerra (II Guerra Mundial), tales como los MG, Standard Swallow (hoy Jaguar) y Morgan, por mencionar algunos. El nombre de Corvette se deriva del término corbeta, los pequeños barcos de guerra que navegan delante de las flotas navales, de mucha movilidad, velocidad, agilidad y suficiente armamento para defenderse.  

 Earl es el autor, además, de los emblemáticos Chevrolet Impala y Bel Air, así como del Cadillac El Dorado. Introdujo al diseño automotor el cambio de estilo anual, los parabrisas envolventes, la tapicería de cromo, pintura en dos tonos y la primera computadora a bordo de un auto. Estos son solo algunos de sus aportes a la industria del automóvil.

El Chevrolet Corvette perdura

Después de 67 años en producción y 8 generaciones que lo mantienen en el podio de los deportivos americanos, para 2020 Chevrolet ha lanzado el poderoso Corvette C8, el primero con motor central. Su propulsor, de 6,2 L, genera 495 CV y acelera de 0 a 100 km/h en 3 s. El motor se puede ver a través de un panel de vidrio de 3,2 mm.
La producción del Chevrolet Corvette C8 comenzó a finales de 2019.