Monumento a Marta Abreu
Museo Memorial del Tren Blindado.
San Juan de los Remedios
Bellísimo altar mayor de la Parroquial Mayor de San Juan Bautista, en Remedios
Pedraplén (viaducto) que enlaza tierra firme con la cayería del norte de Villa Clara. Esta obra recibió el premio iberoamericano Puente de Alcántara, España, por su calidad, el cuidado del medio ambiente y el aporte económico para la nación.

Villa Clara, la provincia ubicada en el mismo centro de Cuba, tiene atractivos diversos que invitan a un recorrido por su circuito turístico para apreciar historia, cultura y riquezas naturales. El inicio del periplo no puede ser otro que Santa Clara, la capital, conocida por la ciudad de Marta Abreu y el Che Guevara. Ambos con una presencia viva en sus principales plazas.
De Marta Abreu de Estévez, su patriota y benefactora, conocimos con solo visitar el Parque Vidal. Allí se levanta un monumento erigido por August Maillard, con texto del poeta Juan Evangelista Valdés, develado el 24 de febrero de 1924, como agradecimiento del pueblo a quien financió importantes proyectos en aquellos años para mejorar la vida de los santaclareños.
Su gran obra, sin dudas, fue el teatro La Caridad, construido en 1885 en una de las esquinas de la plaza central. Resalta por la conservación del inmueble y de las obras de arte que atesora en la decoración de la cubierta, pertenecientes a pintores y escultores académicos, nacionales y extranjeros, como Miguel Melero, Manuel Arias, Fernando Bossi y Camilo Salaya. Artistas de la talla de Caruso y de Alicia Alonso han dejado su impronta en el escenario, dispuesto a continuar recibiendo a las más encumbradas figuras de la cultura cubana y foránea.
A la salida del teatro, también en áreas del parque, nos encontramos al querido Niño de la Bota Infortunada, un simpático pilluelo con un zapato raído en su mano, desde donde vierte el agua hacia la fuente que le rodea. Una figura de bronce de tamaño real fabricada en los Estados Unidos, y trasladada desde hace más de ochenta años al lugar para acompañar a los niños en sus juegos, a las parejas de enamorados y a los ancianos que se cobijan bajo la sombra de los frondosos árboles.
No podemos abandonar el Parque Vidal sin detenernos ante los varios monumentos que rememoran la obra de valiosos próceres de su historia, pues este céntrico sitio es el único de la Isla que ha sido testigo de importantes batallas en las tres gestas libertarias cubanas.
Otro elemento distintivo es la glorieta, donde cada jueves, sábado y domingo la Banda Municipal de Música interpreta un variado repertorio para el disfrute de las personas de diferentes edades motivadas por el inusual concierto.
La llegada puntual de los pajarillos que en cada atardecer inundan sus árboles, la alegría de los estudiantes uniformados a la salida de las clases de preuniversitario, la risa contagiosa de los niños con sus padres en la Casa de Cultura constituyen momentos inolvidables de una visita al centro histórico y cultural de la ciudad de Santa Clara.
La Ruta del Ché en el Centro
Santa Clara se conoce como la Ciudad del Che en Cuba porque su presencia se siente viva en todos aquellos lugares que conocieron de su actuación guerrillera en la gesta libertaria de 1959, y luego del triunfo revolucionario por su contribución al desarrollo industrial de la provincia.
Interesados por conocer la Ruta del Che en su ciudad cubana visitamos el Conjunto Escultórico Comandante Ernesto Che Guevara. Comenzamos por el sitial más visitado desde el 28 de diciembre de 1998 cuando llegaron sus restos y los de sus compañeros de lucha.
El complejo monumentario lo integran la plaza, la tribuna, el museo y el memorial. La escultura, realizada en bronce por el escultor José Delarra, se yergue sobre un pedestal con una altura de 6,80 m y un peso de veinte toneladas. El Che se muestra en marcha, con su brazo enyesado y el arma en mano, mirando al sur.
El memorial, debajo de la tribuna, es un espacio sobrio, solemne, pero no lúgubre. Su interior evoca el escenario agreste donde se desenvolvió la guerrilla boliviana. Posee elementos de cueva, de selva. En sus paredes están colocados los nichos de cada uno de los combatientes, acompañados de una flor que cada día se cambia al amanecer. El del Che se distingue por la luz que emana de su estrella. Al final está la llama eterna, encendida por Fidel Castro en las honras fúnebres del recibimiento.
Salimos mucho más documentados acerca de la vida del revolucionario argentino cubano y nos trasladamos hasta el monumento a la acción contra el tren blindado, por ser ese uno de los hechos más relevantes de la última etapa de la gesta insurreccional.
En el comienzo de la carretera de Camajuaní, la misma que nos conduce por el circuito turístico hacia los cayos se encuentra el monumento integrado por cinco elementos escultóricos que representan las acciones realizadas por los rebeldes, y los cuatro vagones originales descarrilados por las tropas del Che. Intacto permanece el buldózer utilizado para levantar la línea férrea, mientras los vagones muestran fotos de los acontecimientos, las pertenencias de algunos rebeldes y armas similares a las capturadas al enemigo.
La Ruta del Ché es mucho más amplia, la integran los disímiles puntos de la ciudad que intervinieron en la batalla, señalizados todos por las tarjas del propio escultor José Delarra. En cada lugar se respira la admiración de los santaclareños a este hombre que entró en su historia para siempre.
Remedios, rumbo al medio milenio
En la ruta hacia los bellos balnearios del nordeste villaclareño, llegamos a la ciudad de San Juan de los Remedios, octava villa fundada por los españoles en Cuba que en junio próximo cumple 497 años, los que exhibe a través de una cuidada arquitectura colonial de casonas con grandes puertas de caoba, techos de tejas y amplios patios interiores.
El entorno edificado sirve de escenario a mágicas leyendas y añejas tradiciones, con las cuales se identifica el viajero gracias a la pasión mostrada por los nativos ante cada una de ellas. En 1980 su centro histórico –construido en 1851 a imitación de la Plaza de Armas de La Habana, originalmente dedicada a la reina Isabel II, que hoy lleva el nombre de José Martí, y forma parte del centro histórico– fue declarado Monumento Nacional.
La primera mirada lleva a la Parroquial Mayor de San Juan Bautista, una de las principales muestras de la arquitectura barroca en Cuba. El recinto de tres naves tiene una torre de cien pies de altura con tres niveles y cada uno exhibe un estilo diferente: dórico, jónico y corintio.
El templo, levantado en el siglo XVI y reconstruido tras un derrumbe, transitó por varios códigos constructivos, hasta que una restauración en la última centuria le devolvió su máximo esplendor, proveniente del siglo XVIII, cuando la sobriedad decorativa caracterizó ese estilo en el país.
Tallado en cedro y laminado en oro, el altar mayor figura entre los principales atributos del inmueble. Sobresale también el artesonado en madera que cubre todo el techo, realizado con bellos ornatos de relieves profundos, particularidades barrocas de las obras de la época en América Latina, y una escultura de la Inmaculada Concepción embarazada que se dice es única en el mundo.
Con la festividad originada en el siglo XVIII, una de las más antiguas de Cuba, los pobladores de la vetusta localidad celebran cada 24 de junio el aniversario de la ciudad, que dentro de poco llegará al medio milenio.
Urbe famosa en Cuba por las parrandas, originales festejos que se celebran los 24 de diciembre desde la segunda década del siglo XIX y se caracterizan por una rivalidad festiva entre los barrios El Carmen y San Salvador, que concluye con la exhibición de monumentales carrozas y el derroche de luces y coloridos fuegos artificiales.
En ruedas sobre el océano Atlántico
Comenzamos la entrada a un paraíso. Desde lo alto parece una cinta de plata en medio del océano Atlántico, en tierra resulta camino seguro, con el mar como custodio desde la localidad costera de Caibarién hasta la tríada de cayos Las Brujas, Ensenachos y Cayo Santa María, de gran atractivo para los viajeros.
Recta y por ratos sinuosa la ruta de 48 km trasciende como hermosa obra de ingeniería que cambió la geografía de islotes a península y articuló la Isla grande con uno de los polos turísticos de mayor crecimiento en Cuba.  Desde 1995, la más larga vía cubana sobre el mar, constituye el colofón de una ruta que lleva a paradisíacas playas donde existen más de cinco mil habitaciones, en hoteles de cuatro y cinco estrellas.
La realización de 46 puentes que facilitan el intercambio de agua a uno y otro lado de la calzada son parte del esmero en la ejecución y protección del entorno, que condujeron a varios reconocimientos.
Entre los lauros recibidos por los constructores de esta obra sobresale el premio iberoamericano Puente de Alcántara, en la VII Convocatoria (1998-2000), que otorgó un jurado de la Fundación San Benito de Alcántara, España, por la calidad de la obra, el cuidado del medio ambiente y el aporte económico para la nación.
A diecisiete años del completamiento del pedraplén sobre las aguas, la zona conserva todas las características para que el mangle prospere y la estructura pétrea de la senda sirva de refugio a ejemplares juveniles de las más variadas especies de la fauna marina.
Sobresale la presencia en la zona de enorme cantidad de aves que se alimentan de peces, lo que refleja abundancia de esos animales y agua cristalina, para que se puedan ver.
Sin duda, el colofón del viaje desde Santa Clara se vuelve atractivo en un mundo marino donde un hermoso paisaje, la brisa junto a pelícanos y gaviotas, acompañan al viajero hasta su bello destino

Dónde estoy?
Villa Clara se constituyó como provincia en 1976. Situada en el centro de la Isla, limita al norte con el océano Atlántico, al sur con las provincias de Cienfuegos y Sancti Spíritus –con las que también limita por el este, sudeste y sudoeste–, y hacia el oeste con Matanzas.
Posee una extensión territorial de 8 662,4 km², incluidos más de 700 cayos adyacentes, lo que la ubica en el quinto lugar por extensión entre todas las provincias de Cuba. Sus mayores alturas se ubican en la Sierra Trinidad. Estas son Pico Tuerto con 923 m y Sierra Guaniquical, con 869 m. Los ríos de mayor caudal son Sagua la Grande con 163 km, Sagua la Chica con 81 km, Cana, Agabama y Zaza.
Con una población de 811 671 habitantes, es la quinta más poblada del país, y posee un índice de urbanización de 76 %.
En Santa Clara
La capital de la provincia es Santa Clara. En esta ciudad se encuentra el Monumento a la Cruz, el puente El Gallego, el Parque Vidal, el Museo Memorial del Tren Blindado, el Teatro La Caridad, junto a otros lugares de especial atractivo por su cultura y tradición, como el museo de Artes Decorativas, el de la Historia, y el Museo Monumento Local Parrandas Remedianas.
Para comer
Si busca un espacio de esmerada atención y buen gusto en la gastronomía, puede acudir a La Concha, Café Parque, El Sótano, Las Arcadas, Cinema, Europa, Los Taínos, La Granjita, Jibacoa, Río Negro, El Louvre, La Cima, Villa Blanca, El Palmar, Bahía de Cádiz y el Ranchón, junto a otras muchas opciones que complacerán los más exigentes gustos.
Los cayos
Apreciados por sus excelentes playas, las características de la flora y fauna terrestre, y la naturaleza marina, atractiva para la práctica del buceo, están los cayos del norte. Allí se encuentran Cayo Ensenachos, las Brujas y Santa María

 

Un programa de 6 noches y 7 días, dos de ellos en La Habana con desayuno incluido, y cuatro en Cayo Santa María con plan Todo Incluido, en hoteles 5 estrellas. La oferta incluye traslados del aeropuerto al hotel en La Habana, vuelo de ida y retorno al cayo con los traslados internos.
Además cuenta con un guía especializado para la travesía.

Programa:
Día 1: Arribo a La Habana, traslado al hotel seleccionado según variante de hotel seleccionada. Alojamiento con desayuno incluido.
Día 2: Recogida en el hotel de La Habana en ómnibus colectivo y salida al aeropuerto nacional para tomar el vuelo a Cayo Las Brujas. Traslado colectivo al hotel seleccionado en el cayo.
Del 2 al día 5: Cuatro noches de alojamiento en Cayo Santa María en hotel seleccionado en plan Todo Incluido.
Día 6: Recogida en el hotel de Cayo Santa María en ómnibus colectivo y traslado al aeropuerto para tomar vuelo de retorno a La Habana. Traslado al hotel en La Habana, alojamiento 1 noche con desayuno incluido.
Día 7: Traslado de salida del país desde el hotel en La Habana

Recta y por ratos sinuosa la ruta de 48 km trasciende como hermosa obra de ingeniería que cambió la geografía de islotes a península y articuló la Isla grande con uno de los polos turísticos de mayor crecimiento en Cuba.  Desde 1995, la más larga vía cubana sobre el mar, constituye el colofón de una ruta que lleva a paradisíacas playas donde existen más de cinco mil habitaciones, en hoteles de cuatro y cinco estrellas.
La realización de 46 puentes que facilitan el intercambio de agua a uno y otro lado de la calzada son parte del esmero en la ejecución y protección del entorno, que condujeron a varios reconocimientos.
Entre los lauros recibidos por los constructores de esta obra sobresale el premio iberoamericano Puente de Alcántara, en la VII Convocatoria (1998-2000), que otorgó un jurado de la Fundación San Benito de Alcántara, España, por la calidad de la obra, el cuidado del medio ambiente y el aporte económico para la nación.
A diecisiete años del completamiento del pedraplén sobre las aguas, la zona conserva todas las características para que el mangle prospere y la estructura pétrea de la senda sirva de refugio a ejemplares juveniles de las más variadas especies de la fauna marina.
Sobresale la presencia en la zona de enorme cantidad de aves que se alimentan de peces, lo que refleja abundancia de esos animales y agua cristalina, para que se puedan ver.
Sin duda, el colofón del viaje desde Santa Clara se vuelve atractivo en un mundo marino donde un hermoso paisaje, la brisa junto a pelícanos y gaviotas, acompañan al viajero hasta su bello destino

Dónde estoy?
Villa Clara se constituyó como provincia en 1976. Situada en el centro de la Isla, limita al norte con el océano Atlántico, al sur con las provincias de Cienfuegos y Sancti Spíritus –con las que también limita por el este, sudeste y sudoeste–, y hacia el oeste con Matanzas.
Posee una extensión territorial de 8 662,4 km², incluidos más de 700 cayos adyacentes, lo que la ubica en el quinto lugar por extensión entre todas las provincias de Cuba. Sus mayores alturas se ubican en la Sierra Trinidad. Estas son Pico Tuerto con 923 m y Sierra Guaniquical, con 869 m. Los ríos de mayor caudal son Sagua la Grande con 163 km, Sagua la Chica con 81 km, Cana, Agabama y Zaza.
Con una población de 811 671 habitantes, es la quinta más poblada del país, y posee un índice de urbanización de 76 %.
En Santa Clara
La capital de la provincia es Santa Clara. En esta ciudad se encuentra el Monumento a la Cruz, el puente El Gallego, el Parque Vidal, el Museo Memorial del Tren Blindado, el Teatro La Caridad, junto a otros lugares de especial atractivo por su cultura y tradición, como el museo de Artes Decorativas, el de la Historia, y el Museo Monumento Local Parrandas Remedianas.
Para comer
Si busca un espacio de esmerada atención y buen gusto en la gastronomía, puede acudir a La Concha, Café Parque, El Sótano, Las Arcadas, Cinema, Europa, Los Taínos, La Granjita, Jibacoa, Río Negro, El Louvre, La Cima, Villa Blanca, El Palmar, Bahía de Cádiz y el Ranchón, junto a otras muchas opciones que complacerán los más exigentes gustos.
Los cayos
Apreciados por sus excelentes playas, las características de la flora y fauna terrestre, y la naturaleza marina, atractiva para la práctica del buceo, están los cayos del norte. Allí se encuentran Cayo Ensenachos, las Brujas y Santa María