- El Caribe Paraíso del Crucerismo y el Multidestino.
CON UN CRECIMIENTO EN TODOS LOS DESTINOS QUE CONFORMAN ESTE GRAN ESPACIO GEOTURÍSTICO LLAMADO CARIBE, EL TURISMO DE CRUCEROS SE CONVIERTE EN EL PARADIGMA DEL MULTIDESTINO
De acuerdo con la Asociación de Estados del Caribe (AEC)1, el mercado mundial de cruceros ha presentado un constante crecimiento en las últimas décadas y la región del Caribe sigue siendo el destino preferido por los turistas, contando con el 40% de todos los itinerarios.
Al contrario de lo que en principio pudiera parecer, no es un tipo de vacaciones exclusivo de la tercera edad, ni de las clases económicas más pudientes y esto es debido a la oferta de itinerarios cada vez más cortos, por lo tanto, menos costosos y más adaptados a los gustos y exigencias de varios segmentos específicos del mercado.
Por otra parte, los cruceros tienen fuertes impactos económicos en los países donde operan, impulsando la construcción de infraestructuras portuarias, el comercio, y los servicios, tanto al buque como a los pasajeros, lo que genera un nivel significativo de ingresos a las economías locales y genera un número importante de puestos de trabajo en los destinos.
Lo anterior crea nuevos retos que motivan a la región caribeña para alcanzar nuevos estándares de competitividad, mediante la generación de ingresos, ya sea como producto del gasto promedio de los visitantes, diseño y venta de excursiones, pago de impuestos portuarios, tarifas por los servicios al buque, o fondos canon creados para este segmento por cada destino. Uno de ellos es el de la conectividad efectiva y asequible entre los destinos caribeños, siendo esto un elemento que facilitaría el desarrollo de los vínculos comerciales entre los estados insulares y de estos con otros países del mundo. En este sentido, hay que aprovechar los esfuerzos de las compañías de cruceros, en su interés por ofrecer mejores servicios y atractivos, de última generación, con el fin de atraer clientes que se interesan en visitar los destinos insulares del Caribe.
Son muchas las razones del Caribe para ser considerado uno de los destinos más importantes para la industria de cruceros, entre estas:
» Está conformado en su mayoría por una cadena de islas que implican distancias cortas entre los puertos donde hacen escala los cruceros
» Cuenta con una variedad de paisajes, selvas tropicales, y la presencia de exuberantes fondos marinos y arrecifes de corales
» Atesora una larga historia asociada con el colonialismo europeo y preserva los asentamientos más antiguos de las Américas de origen africano, español, inglés, francés y holandés que hacen de las islas del Caribe una región muy diversa; capaz de ofrecer a los viajeros una notable variedad de experiencias culturales.
» Desde el punto de vista comercial, es una región colindante con los países del norte de América los que ofrecen un gran mercado emisor de turistas con capacidad adquisitiva para pagar programas de cruceros, sin tener que viajar lejos de sus ciudades de origen para iniciar un itinerario.
Adicionalmente, el Caribe es un fuerte atractivo para recibir cruceros de todo el mundo, ya que, según los datos de Florida Caribbean Cruise Association (FCCA)2, el 71% de los cruceristas provienen de Estados Unidos, el 12% de Canadá, 6% del Reino Unido, y un 5% de alemanes; el restante de los pasajeros provienen de una amplia gama de países.
Lo anterior pone en evidencia el proceso de globalización del mercado mundial en este sector, que cada vez recibe mayores índices de pasajeros y en donde se busca, al mismo tiempo, ofrecer nuevas opciones de embarcaciones que pronto permitirán navegar a través de novedosas infraestructuras portuarias, en donde serán atraídos buques de cruceros de mayores magnitudes.
El informe del mercado elaborado por la AEC (2016) ejemplifica que este crecimiento es la introducción de líneas de cruceros que navegarán en el mar Caribe, ofreciendo viajes con una duración de 7 a 21 noches, con itinerarios que recorren las rutas este, oeste y sur del Caribe. Otras líneas iniciarán sus recorridos en el puerto de Amber Cove, ubicado en la República Dominicana, proveyendo un centro de bienvenida, un mercado de artesanías, comidas típicas y un centro de transportes para acceder a las excursiones de las diferentes atracciones turísticas, mientras los puertos cubanos de La Habana, Santiago de Cuba y Cienfuegos, se aprestan a integrarse en los nuevos itinerarios.
Otros ejemplos de cruceros, como el Norwegian Cruise Lines proveniente de Miami, el Aida Mar de Alemania y el Monarch de la compañía Royal Caribbean, estarían desembarcando un promedio de 45 000 pasajeros mensualmente en la región caribeña; generando una oferta atractiva de cruceros con nuevos itinerarios que permitirán establecer más puertos y destinos, operando el 38% de los itinerarios que se realizan a nivel global. Ante este promisorio escenario, los operadores en los destinos deberán diseñar excursiones y actividades que permitan nuevas y variadas experiencias para los cruceristas.
En términos de conectividad, se tiene gran expectativa en relación con la firma de contratos entre varias compañías estadounidenses de cruceros con empresas cubanas, entre estas Carnival, Royal Caribbean, Norwegian Cruise Lines y Pearl Seas Cruises, con el fin de establecer operaciones entre los EE.UU. y Cuba lo que permitirá, no solo el tránsito de cruceros entre ambos países, sino también una cooperación bilateral de beneficio mutuo, y que repercutirá positivamente en toda la región del Caribe, reforzando la imagen turística integrada, el multidestino, la seguridad de la navegación marítima, la preservación de los ecosistemas marinos y el manejo sustentable de las costas; aspectos en los que Cuba ha demostrado una experiencia acumulada, que compartirá con todos los pequeños estados caribeños.
Con referencia a este tema de la conectividad, es importante mencionar que los ferries son otro tipo de buques que se han hecho presentes casi en la mayoría de las islas que conforman el Caribe y que han permitido un acceso más inmediato para viajar a los países que se encuentran geográficamente cercanos. Debido al creciente turismo en la región, los ferries se han integrado a las nuevas tendencias que incluyen la modernización de las naves y de las infraestructuras portuarias, ofreciendo una capacidad de transportar unos 1 200 pasajeros, convirtiéndose en una opción diferente para facilitar la conectividad a favor del multidestino de la región.
Sin duda, estas iniciativas, junto a un clima de paz, colaboración e integración entre todos los estados caribeños, impactarán positivamente en el crecimiento y desarrollo sustentable del turismo en el Caribe.