Dani García no es un chef preocupado por los soles o estrellas que ha merecido. Basta un minuto de charla con él para apreciar que le sobra autenticidad, sencillez, y un talento que no necesita adornarse con artificios o vanidades. En su reciente debut en La Habana, en el Hotel Iberostar Parque Central, fue uno más entre los cocineros, despojado de etiquetas, descansando a ratos el cuerpo sobre una mesa, y con sus cómodos zapatos deportivos que –confesó risueño– jamás se quita mientras cocina.

El recetario tradicional de Dani García se caracteriza por tener profundas raíces andaluzas. Amante de la cocina de contrastes, suele jugar con texturas, contraposición de aromas y gustos, oposiciones de

caliente-frío… creaciones donde siempre apuesta por el rescate de los sabores tradicionales, de la mano de la más desconcertante vanguardia.

Como él mismo diría alguna vez, es sencillo su secreto: “sobre una base de tradición, verter sabores contrapuestos y singulares, agregar una cucharada de matices intensos, una pizca de talento y una ramita de innovación. Añadir a la mezcla texturas desconcertantes y espolvorear con ilusión”.

La cocina llegó oficialmente a su vida con apenas 18 años, cuando inició sus estudios en la escuela de hostelería de Málaga La Cónsula. Con tan solo 24 años recibió su primera Estrella Michelin, convirtiéndose así en el cocinero español más joven en merecer ese lauro.

Tras pertenecer a distintos restaurantes de la provincia de Málaga, decidió ponerse al frente de uno que lleva su nombre, en el Hotel Puente Romano de Marbella. En su corta trayectoria se ha convertido en un símbolo de la cocina de vanguardia en Andalucía, y en un referente de la cocina contemporánea española. Ostenta dos Estrellas Michelin, tres Premios Sol de la Guía Campsa-Repsol, y recibió el Premio Mejor Cocinero del Año, por la Guía Gastronómica y Turística Gourmetour.

 

IBEROSTARCHEF ON TOUR 2014-2015

No fue casual que Dani García viajase desde el Viejo Mundo para cocinar este 4 de noviembre en la Mayor de las Antillas. Fue como parte del Iberostarchef on Tour 2014-2015, una iniciativa que pretende acercar lo mejor de la gastronomía española a varios hoteles cinco estrellas de Iberostar en destinos como México (Riviera Maya), República Dominicana (Punta Cana), Cuba (La Habana) y España (Mallorca y Canarias).

Para tal propósito se ha diseñado un programa de 30 cenas exclusivas en las que 16 de los mejores chefs españoles con estrella Michelin cocinarán para huéspedes e invitados: Dani García**, Ángel León*,

Quique Dacosta***, Andoni Aduriz**, Nacho Manzano**,

Manolo de la Osa*, Pepe Solla*, Fernando Pérez Arellano*, Jordi Cruz**, Pepe Rodríguez*, Paco Morales*, Fina Puigdevall**, Beatriz Sotelo*, Yolanda León*, Macarena de Castro* y Begoña Rodrigo Top Chef

España 2013. El menú, elaborado por Dani García especialmente para Cuba, se inició con una magdalena que se come entera en la que, para sorpresa de no pocos comensales cubanos, todo era comestible. Le siguió, en perfecta armonía gustativa, un gazpacho de cerezas, queso fresco, pistachos y albahaca, donde se combinaron de forma magistral notas de sabores dulce y salado. Para continuar la experiencia culinaria,

un aterciopelado yogur de foie con naranjas aromatizadas y virutas de anguila ahumada helada, que se fundían con cada toque del cubierto. Y, para los amantes de los productos del mar, un arroz negro de mariscos a las llamas. No podían faltar los raviolis de rabo de toro con patata cremosa y trufa, y como postre, un yogur de pasión, tocino de cielo y piña osmotizada.

Los platos se acompañaron de una exquisita selección de vinos internacionales: fino Tío Pepe, cava Gramona Argent, blanco Zárate do rías Baixas, tinto viña Sastre crianza DO Ribera del Duero y Moscatel Jorge Ordóñez N1.

«El concepto general del proyecto me parece una apuesta única en el mundo. El hecho de que durante un año pasen cocineros de ese nivel por Cuba y otros países latinoamericanos me parece una idea brillante», expresó Dani García en diálogo con Excelencias Gourmet.

 

—EN SENTIDO GENERAL, ¿CÓMO HA SIDO RECIBIDA LA IDEA EN EL GREMIO DE COCINEROS ESPAÑOLES?

—La respuesta ha sido muy buena. Creo que tiene también una parte sentimental, porque podemos aprovechar y compartir lo que es nuestra cocina en un lugar poco habitual. Estamos acostumbrados a cocinar en ciudades como Londres, New York, Hong Kong, Tokio… pero el Caribe no es un destino típico donde venimos a cocinar. A mí me hace muchísima ilusión.

—¿CÓMO HA SIDO LA INTERACCIÓN CON COCINEROS CUBANOS? —Estupenda. Nosotros estamos muy acostumbrados a cocinar fuera, en países con diferentes culturas. Pero el latino es mucho más apasionado. La hemos pasado muy bien porque la gente está con muchas ganas de aprender, de ver lo que hacemos, y nosotros también de ver lo que hacen ellos.

—¿QUÉ PUEDE APORTARLE A UN ESTRELLA MICHELIN UNA EXPERIENCIA COMO ESTA?

—Nos aporta dos cosas importantes: compartir nuestra cocina, enseñar lo que hacemos, y luego aprender de otras culturas. Yo, por ejemplo, aprendí acá sobre la yuca con mojo, la ropa vieja… platos que me parecen espectaculares y que un día, por qué no, puedo aplicar en mi cocina.

—¿QUÉ CREES DEL DESARROLLO CULINARIO QUE ESTÁ PROTAGONIZANDO EN LOS ÚLTIMOS AÑOS AMÉRICA LATINA?

—Latinoamérica tiene mucho que ofrecer, y justamente este periplo por esos países lo demuestra. Hay una cocina muy autóctona, y muy parecida en el fondo a la andaluza, en el sentido conceptual, una cocina de subsistencia, de cocinar con lo que tienes a mano y hacer con ello grandes platos.

Desde finales de 2014, y durante 2015, los 16 chefs viajarán por los paradisiacos enclaves hoteleros de IBEROSTAR con el objetivo de elaborar un menú exclusivo adaptado a cada destino para disfrute de los clientes. Excelencias Gourmet continuará ofreciendo exclusivas sobre el desarrollo de este inusitado tour culinario.

 

* Estrellas Michelín