Sus operaciones México-La Habana-México cerraron el año 2006 con el 73% de promedio anual de ocupación y 93 257 pasajeros productivos

Mexicana de Aviación, con una larga y fructífera presencia de más de 75 años en el mercado cubano, aprecia hoy a esta nación caribeña como uno de los destinos importantes en América Latina. Tal interés, según Álvaro Armando González, gerente regional de esa aerolínea en La Habana, «es debido a los atractivos turísticos de la Isla, así como el intercambio cultural, científico, deportivo y comercial que prevalece entre México y Cuba, lo cual confirma la unión de ambos pueblos». Esta aerolínea fundada en junio de 1921 (por lo que es hoy la cuarta con más tradición en el mundo), extendió sus operaciones diez años después a La Habana, a través de Mérida, Yucatán. Allí, recuerda González, los pasajeros que venían desde Ciudad de México abordaban otro avión de la aerolínea filial Pan American, que los trasladaba a la capital cubana, hasta que en los años 40, emprendió los vuelos directos entre ambas capitales, en naves DC-3 que cubrían la ruta en unas seis horas. Para la década de los 50, con la incorporación a su flota de aviones entonces de mayor capacidad y autonomía, del tipo DC-6 (nave de cuatro motores), se disminuía a unas cuatro horas el tiempo de vuelo en esta ruta, que hoy ya realizan en Boeing 757, de 178 plazas, que enlazan a México y La Habana en unas 2:20 horas, a una velocidad crucero de 850 km/h. Actualmente mantiene una frecuencia diaria Ciudad de México-La Habana-México, aunque en algunas épocas del año -en abril (Semana Santa), julio, agosto y diciembre (Navidades)-, según la demanda, se efectúan operaciones adicionales, que alcanza unos diez vuelos en la semana, incluido la utilización de Airbus A-320, de última generación tecnológica. También en temporadas de alta demanda turística, mediante convenios con turoperadores que ofertan el destino Varadero, se incorpora este balneario cubano a las operaciones adicionales de Mexicana. En diciembre último hicieron en esa ruta entre ocho y diez vuelos en directo desde la capital de México, con aviones A-318, de cien plazas. El destino Cuba cerró el año 2006 con el 73 % de promedio anual de ocupación y 93 257 pasajeros productivos transportados en esta ruta. CONEXIÓN CON EL MUNDO Próxima a cumplir 86 años de operaciones, esta aerolínea cubre todo México mediante conexiones con las alianzas: AeroMéxico, Aeromar, Aerolitoral y Click, esta última como su compañía filial. También en el orden internacional Mexicana enlaza con 23 ciudades norteamericanas, otras tres de Canadá y urbes de ocho países de Centro y Sudamérica, y el Caribe, servicios al que suman importantes localidades del resto del planeta, en asociación con otras aerolíneas internacionales. El directivo reconoció la cooperación del IACC y de la Empresa de Servicios Aeroportuarios (ECASA), Elogió la labor del personal cubano de la representación de Mexicana en La Habana, «un equipo, aseguró, muy profesional, comprometido y orientado a la calidad del servicio, tanto en el aeropuerto (en la atención al pasajero, operaciones aéreas y mantenimiento de aviones), como en nuestra oficina en la ciudad, que atienden reservaciones por teléfono y personales, venta de pasajes y la actividad administrativa. Se trata, apuntó, de un colectivo que conoce su trabajo y orienta a los clientes cuando así lo requieren». El directivo mexicano explicó que su compañía se encuentra en un período de reestructuración, «que permitirá hacer frente a los nuevos retos del mercado, con un esquema de costos acorde a los tiempos modernos, a fin de lograr en el mediano plazo acceder a nuevos destinos y ampliar la flota y red de rutas». Muestra de la preocupación permanente por la calidad y seguridad de sus operaciones, la aerolínea líder de México se destaca también por el riguroso programa de servicio de mantenimiento a todas sus aeronaves con la participación de personal altamente calificado de reconocido nivel mundial. Indistintamente en sus rutas emplean aviones Boeing 767 y 757, así como Airbus A-320, A-319 y A-318, los cuales promedian 6,3 años de servicio, que convierten esta flota en la más moderna del mundo.