Investigar e innovar para ofrecer un producto nuevo y a la vez enraizado en la tradición más antigua de Ribera del Duero son las claves que distinguen a esta bodega familiar, cuyos vinos son cada vez más apreciados

La familia Viyuela es una de las más antiguas de viticultores que se conocen en Boada de Roa, Ribera del Duero, población que se fundó como monasterio a principios del siglo X, para convertirse en el transcurso del tiempo en una zona eminentemente vitivinícola. Sobre la continuación de este negocio como una prestigiosa bodega de la región, habla para Excelencias Gourmet su consejero, Andrés Viyuela. P: ¿Cómo y cuando se originó bodegas Viyuela? “Nació en 2003, pero nuestro proyecto en realidad comenzó mucho antes, ya que somos viticultores de toda la vida y la idea fue surgiendo para dar continuidad a la labor de nuestros padres, y al final decidimos involucrarnos totalmente en el tema del vino”. P: ¿A qué niveles de producción llegan actualmente? “Estamos ahora mismo en una producción en torno a las 180-200.000 botellas. Nos gustaría pasar de esa cifra, pero sin llegar a masificar. También está el hecho del “boom” del vino, que esperamos se estabilice en algún momento. Por tanto, estamos un poco parados de momento en esa cantidad, que es importante y a la vez nos permite hacer una selección exhaustiva de la uva, la base de nuestro proyecto: hacer vinos de calidad, selectos”. P: Hay quienes son partidarios de las bodegas pequeñas con producciones pequeñas o medianas, y otros que están por la masificación, pero ustedes están por la originalidad. “Nosotros queremos hacer vinos originales y de calidad. Dudo mucho que una bodega que haga cuatro millones de botellas pueda hacerlo con todo rigor. No digo que sea imposible hacer una selección en alguna pequeña cantidad, pero como bodeguero de Ribera del Duero, abogo por las bodegas de siempre. “Las de esta zona siempre han sido familiares, que elaboran entre 20 000 y 300 000 botellas. Entre esas cantidades creo que están el 90% de las bodegas. “Yo abogo por el tipo de bodega familiar, que cuida y mima los vinos, y que va a buscar calidad, no a estandardizar. Pienso que la calidad y la originalidad lo es todo en los vinos”. P: ¿Continúan utilizando los sistemas tradicionales o aplican las tecnologías modernas? “Utilizamos todos los procedimientos tradicionales pero adaptados a los sistemas modernos. Un vino actual no se parece en nada a lo que hacían nuestros abuelos. Lo único que tienen en común para que sea vino es que tienen que fermentar. Lo demás, son los cuidados que se tienen desde el principio en la viña hasta el acarreo a la bodega. Luego, los tratamientos en bodega, que hoy en día es un laboratorio y tiene que haber una pulcritud tremenda, pues no hay cosa peor para los vinos que los malos olores, la humedad y la falta de limpieza”. P: ¿Continúan experimentando e innovando para obtener nuevas líneas de vinos? “Siempre. Creo que una bodega debe tratar constantemente de sacar creaciones nuevas, experimentar en busca de novedades y de mejor calidad. “Por ejemplo, nosotros en vísperas de la Navidad de 2009, hemos sacado una nueva línea de vino de autor, que es la idea que tiene el enólogo, pero un poco adaptado a lo que demanda el consumidor. “Si en este momento se demandan vinos que resalten por muy aromáticos y florales, que los aromas primarios persistan mucho tiempo en el vino, hay que tratar de conseguirlo en esa forma que pide el consumidor. Entonces, llámese de autor o como se quiera llamar, es una línea fuera de lo que es la línea clásica, más moderna, más nueva y tratando de compaginar los criterios del público con los del consumidor. P:¿Qué piensa usted del mercado actual del vino en España? “Creo que el mercado del vino en España está sufriendo desde hace algunos años una transformación importante. Hoy se beben vinos más selectos, menos cantidad, pero más selectos. Por eso están bajando los consumos de vino, pero en base a que se consumen de más calidad”. P: Ustedes venden vino prácticamente a toda España ¿Se han diversificado también internacionalmente? “El futuro está en la exportación y en Bodegas Viyuela hemos apostado desde el principio por ella. Ahora estamos vendiendo en varios países, poco a poco, porque la crisis no es sólo en España, sino en el mundo. Por otra parte, el valor de cambio actual del euro también afecta bastante, con respecto al dólar y otras monedas hace que nuestros vinos no sean excesivamente competitivos en muchos mercados, frente a los vinos norteamericanos, chilenos, argentinos, que son muy aceptados en sus mercados. “Nosotros no podemos competir en precio con ellos, porque además están sacando unas producciones altísimas, en torno a los 12-16 mil kilos por hectárea, y aquí estamos por debajo de los 4 mil kilos. Sin embargo, los cuidados que tenemos en España con el vino marcan también una diferencia importante”. P: Al respecto, hay quienes dicen que hay un bouquet americano y otro europeo. “Se dice, pero no lo creo así. Hay muchas variedades de vino, y no todos los vinos europeos son iguales como no lo son todos los americanos. Puedo admitir que el mercado americano esté muy masificado en esas grandes producciones que se hacen casi todas con máquinas, en plantaciones enormes. El terreno también es diferente al nuestro, y lógicamente aquellos son viñedos nuevos, jóvenes, y todavía les falta recorrido por hcer. “En Europa, en cambio, apreciamos mucho nuestras viejas cepas, que no las tienen aún los americanos, aunque las tendrán. Sus vinos quizá sean un poco más comerciales, no tienen tal vez los aromas que puedan tener los europeos, o la duración. “Al respecto si creo que nuestros vinos son más longevos que los americanos, pero también es por la edad de la viña y las variedades”. P: Como viticultor y bodeguero, ¿cuál es el secreto para mantenerse en la delantera de los buenos productores y capear el temporal económico? “Como decía anteriormente, la bodega siempre tiene que estar investigando para mejorar sus productos, quien se estanca perece. Un producto puede triunfar en una época determinada, pero luego siempre habrá alguien que investigue, rebase y mejore ese producto. Por tanto, eso es lo que hay que hacer constantemente, en la bodega: investigar e innovar”.