Cada año, un equipo de la revista excelencias del motor cubre la Vuelta Ciclística a Cuba. Somos parte del pelotón de periodistas que sigue el clásico cubano del pedal, etapa por etapa, desde la ciudad más oriental del país, Baracoa, hasta la cabecera de la provincia más occidental, Pinar del Río, para luego terminar en La Habana. Poco más de dos semanas de viaje, casi 5 000 Km de duras pruebas para los vehículos participantes.

Uno de los grandes animadores de la Vuelta, es BDC International S. A. (con las marcas Peugeot y Michelin). Así, año por año (desde 2004 que nos incorporamos a esta fascinante aventura) hacemos el recorrido en un automóvil Peugeot con neumáticos Michelin. Ninguna avería, ningún ponche. Comenzamos con un Peugeot 106 (2004), luego se sucedieron 206 (2005), 307 (2006) y 407 SW (2007). La caravana de vehículos que marcha con la Vuelta, está compuesta por unos 70 autos y motos, así como camiones y ómnibus de diferentes tamaños. En los automóviles van los mecánicos de cada equipo de ciclistas (unos 22, de ellos, 10 extranjeros), los jueces y comisarios de la UCI y la prensa. Son más de 30 autos, mayoritariamente Peugeot (72 %). También había de otras marcas, como FIAT y Lada.Casi todos los periodistas viajamos en Peugeot. La Televisión Cubana y Radio Rebelde en sendos 307, Prensa Latina, Jit, Juventud Rebelde y Granma, la (AIN) y las emisoras de radio, en varios 206.

VIAJE HACIA LA SALIDA DE LA VUELTA Del municipio Playa, en Ciudad de La Habana (donde está la revista) hasta Baracoa, (desde donde sale la Vuelta) hay unos 1 300 Km. Hicimos el trayecto en 13 horas, a un promedio superior a 100 Km/h. Solo paramos dos veces para abastecernos de combustible. Partimos a las 5 y 45 a.m. y arribamos a Baracoa al filo de las 7 p.m. Llevábamos alimentos y bebidas. Nunca paramos para comer. Con Willy júnior al timón, entramos a la Autopista Nacional a las 6 a. m. Todavía es noche cerrada. Vamos a 130 km/h con el motor a 3 500 rpm, la temperatura del líquido refrigerante es de 90 grados y afuera (llevamos las ventanillas cerradas y el aire acondicionado), el termómetro indica 15 grados centígrados. En el habitáculo la temperatura es muy agradable, está graduada a 22 grados. Este Peugeot tiene un motor EW10J4, de cuatro cilindros en línea y dos litros de cubicaje (1 997 cc). Ofrece una potencia de 138 CV a 6 000 rpm. Viene con 10,8 a 1 de compresión, por lo que solo echamos gasolina especial. Está dotado de un sistema de inyección multipunto. Este motor mueve magníficamente la imponente carrocería, de más de cuatro metros.

PRIMERAS PRUEBAS Pasados los primeros tráficos, aceleramos un poco y llegamos a 160 km/h con 4 500 rpm. La temperatura del motor se mantiene en 90 grados, sin embargo el termómetro exterior baja a 14 grados. A mayor velocidad, el frío aprieta. La excelente aerodinámica de la carrocería ayuda y no se sienten ruidos extraños por el efecto del aire. Con las primeras luces del día, aceleramos a tope. Rápidamente sube la aguja del velocímetro, en poco tiempo llega a 209 km/h, la temperatura del motor subió a 92. El carro se desliza por la autopista silenciosamente. En dos horas y treinta minutos el 407 SW se tragó toda la autopista. A las 8 y 30 entramos a Taguasco. Mientras echamos gasolina, disfrutamos de los habituales panes con lechón que sirven allí. Toma el volante Willy senior. Camino estrecho y sinuoso, con lomas pequeñas, hasta la Carretera Central. En la Central tratamos de mantener 100/120 km/h; las constantes frenadas (algunas bastante abruptas) ponen a prueba el sistema ABS, que funciona de maravillas. La caja de cinco velocidades, sube y baja cambios rítmicamente. La recta de Florida nos permite 140 km/h, pero los obstáculos (carretas, tractores, bicicletas y demás) nos obligan a frenar y volver a salir, una y otra vez. Pasamos Ciego de Ávila y Camagüey. En la ciudad de Victoria de Las Tunas, nos desviamos hacia el sur, doblamos hacia Bayamo. Hora: 2 y 30 p. m.

ESTAMOS EN TIEMPO En Bayamo rellenamos combustible y seguimos viaje. Al llegar a Santiago de Cuba tomamos la circunvalación y entroncamos con el camino a Guantánamo. Pasada la ciudad del Guaso, cambiamos de chofer y tomamos la carretera que bordea la costa sur oriental, cuyo paisaje desértico resulta imponente. Tras cruzar varios caseríos, comenzamos a escalar el viaducto de La Farola, una maravilla de la arquitectura cubana. Subimos en segunda y tercera velocidades, no tuvimos que poner primera nunca. La potencia del motor y la tracción delantera, nos lleva sin dificultad loma arriba. Pasado el Alto de la Cotilla, empezamos a bajar. Los frenos y la caja de velocidades se turnan para aminorar la marcha del impulso loma abajo. Todavía no son las 7 y el Sol aún nos deja algunos rayos de luz. Arribamos a Baracoa tras 13 horas de viaje.

BARACOA Comienza la Vuelta. Del Malecón parte la caravana que atraviesa Baracoa rumbo a la salida oficial. Partimos delante, Willy senior al timón (Willy júnior va tirando las fotos), vamos al Alto de la Cotilla, donde está el Premio de Montaña. Nos acompañan dos amigos belgas, uno de ellos (Benoit) gerente general de BDC International y gran colaborador de la Vuelta. Subimos rápidamente. Esperamos. Luego que pasan los primeros ciclistas, bajamos a toda velocidad. Vamos casi a 100 km/h loma abajo, en tercera, y reducimos a segunda en las curvas cerradas. No obstante, los ciclistas nos pasan como balas. El 307 de la televisión se aparea con nuestro 407 SW y así tomamos más de una curva, lado a lado. Los dejamos atrás y llegamos al llano primero que todos. Nos detenemos para tirarle fotos al pelotón a su paso. Luego los fotografiamos en movimiento, desde atrás, pasamos el pelotón para tomar fotos de cerca a los ciclistas en pleno pedaleo. Al mediodía llegamos a Guantánamo

DE GUANTÁNAMO A LA HABANA Por carreteras y caminos de todo tipo, a través de pueblos y por la campiña, como parte de la Vuelta Ciclística, anduvimos miles de kilómetros (exactamente 4 735 km) en 17 días. Unos 280 km de promedio diario. El porte del auto último modelo, hacía que muchas personas se interesaran. Pacientemente respondimos todas las preguntas e incluso entregamos revistas Excelencias del Motor donde está la publicidad de este modelo. Cansados pero satisfechos llegamos a casa.