Respaldada por la Federación Nacional de la disciplina y la colaboración de la PNR, SIUM, así como de la dirección de deportes de la joven provincia Artemisa, la carrera dejó una feliz impresión entre  participantes y espectadores.

 

Vale destacar igualmente toda la ayuda en diferentes aspectos de la familia Vázquez (“Wajay” padre e hijo) y del también motociclista  Félix Lazo. Con largada y meta en el kilómetro 0 de la Autopista Habana-Pinar del Río, los hombres mayores de 50 años cumplieron un trayecto de 60 km, mientras que los inscritos en las categorías 30-39 y 40-49 devoraron la distancia de 120 km. Un domingo soleado del veraniego agosto, con alta temperatura de 30 grados, acompañó el paso de los ruteros en ese empeño de llegar a la línea final.

 

Silvio Iturralde, un exvelocista en su juventud, quien desde hace bastante tiempo rueda cientos de kilómetros en su natal Matanzas, fue el gran dominador sobre el terreno plano y los vaivenes de la autopista frente a otros destacados exponentes que ya cuentan más de 60 años de edad. Iturralde, el conocido Raúl Vázquez y Germán Smith, triunfadores entre los “añejos”, marcaron un tiempo de una  hora, 40 min y 18 s.

 

La competencia mezclada de 30 y hasta 49 años transitó por un destino diferente. Tras un despegue rápido, los 51 hombres se mantuvieron a un ritmo de casi 40 km por hora, pero al desviarse hacia la Carretera Central y ya a la altura de Guanajay, comenzaron los estirones y escasos segundos de diferencia. En esa localidad ganó la volante intermedia Javier Prieto, seguido por Vicente Sanabria y Luis Gil, mientras que más adelante en la capital artemiseña el local Joel Borrego atacaba e imponía su clase frente a Gil y Anatoli Cancio.

 

Calles estrechas y distintos vericuetos llevaron a los ciclistas de nuevo a la autopista y hasta la subida al centro turístico Las Terrazas. El premio de montaña situado en el alto fue ganado por Cancio, escoltado por Borrego y Ernesto Enrique Martínez, en tanto los perseguidores ya se fraccionaban en tres pequeños grupos.

 

En la prolongada bajada y recorridos más de 80 km, volvieron a reagruparse para retornar a la autopista.

Cada intento de escapada fue controlado hasta el segmento decisivo. En ese momento Javier Prieto se descolgaba a toda velocidad y se llevaba el éxito en la raya de sentencia con 3 h, 11 min y 31 s

en la categoría 30-39. Sus escoltas fueron los también capitalinos Rusbel Quigñon y Anatoli Cancio. El artemiseño Joel Borrego se adjudicó el primer sitial entre los corredores de 40-49 años (3:12,06), por delante del yumurino Sanabria y su coterráneo Carlos Hernández.

 

Motivados y agradecidos por la realización de esta Primera Clásica PEUGEOT, los masters que se concentran y compiten todas las semanas en los alrededores de la presa “La Guayaba” reconocieron esta magnífica iniciativa que tuvo como patrocinador a Automóviles Peugeot, representado en Cuba por la firma belga BDC International S.A.