Doctores cubanos en Amazonía, Brasil / Cuban doctors in Amazon, Brazil.

El programa Más Médicos, que tiene a los profesionales de la salud cubanos como protagonistas, ha sido un suceso trascendente para el gigante suramericano, pues ha permitido llevar al 100% la cobertura en la atención primaria de salud, priorizando además las zonas más pobres y de difícil acceso

“Los médicos cubanos miran a los ojos de las personas, tocan su cuerpo, escuchan lo que estas tengan que decir, los tratan con dignidad…” Así reseñaba en la pasada edición de la Convención Internacional Cuba-Salud 2015, Arthur Chioro, el entonces ministro de salud de Brasil.
“Se trata de calidad técnica, pero también del compromiso y la manera humana, afectuosa y respetuosa con que se establece la relación médico-paciente y realizan los cuidados de salud”, decía el titular.
Hablaba sobre la satisfacción del pueblo brasileño al recibir los beneficios del programa Más Médicos –al que se integraron más de 11 400 colaboradores cubanos desde el año 2013, a solicitud del gobierno de la presidenta Dilma Rousseff y con la participación de la Organización Panamericana de la Salud– y de cómo la ampliación de la cobertura y acceso a la atención primaria de salud había limado reticencias.
Porque más allá de apoyar la estrategia de salud familiar y garantizar la atención primaria, estaba ocurriendo en Brasil; y en ello los médicos cubanos eran la referencia, una importante contribución a una nueva manera de cuidar la salud de las personas: la de prevenir las enfermedades y concebir al individuo como un ser biopsicosocial, no ajeno al entorno que le rodea.
Sin importar el origen, la vulnerabilidad o pobreza que marca la vida de una persona, los médicos cubanos llegaron para hacer lo que mejor saben: curar el cuerpo y el alma. En más de 500 años de historia oficial en Brasil, era la primera vez que este país tenía médicos en todas las aldeas indígenas. Ese pueblo, por solo ejemplificar, de unos 800 000 habitantes, nunca habían tenido la garantía de contar con un equipo de salud.
El programa Más Médicos cambió esa realidad, llegó a las poblaciones de la Amazonía, a las regiones semiáridas y al mismo tiempo a las zonas rurales de difícil acceso, así como a la periferia de las grandes ciudades. “Sao Pablo tiene millones de personas y en su periferia miles de ellas no tenían atención médica”, ejemplificaba el ministro.
Tres años después, este programa, que nació de la convicción de que una salud para todos sí es posible, sigue desandando la geografía brasileña en casi 4000 de los 5000 municipios de esta nación.
“La calidad de la formación y los servicios de los profesionales de la salud cubana; su disposición para aprender varios idiomas, incluso dialectos nativos para poder tratar a la población e ir a donde nadie quiere ir si de salvar vidas se trata”, son para la jefa del Departamento de Negocios en el Exterior de la Comercializadora de Servicios Médicos Cubanos, S.A. (CSMC, S.A.), Eucalia Mantilla, características que distinguen a los profesionales de la salud de la Mayor de las Antillas.
La CSMC, S.A. está presente hoy, dijo, en más de 25 países distribuidos por todos los continentes, con una cifra superior a los 11 000 colaboradores contratados.
“Tenemos a nuestro cargo la brigada médica de Argelia, el primer país con el que Cuba inició la colaboración médica, con más de 900 profesionales prestando asistencia en las diferentes provincias, en tres hospitales oftalmológicos y en la atención primaria de salud, con un amplio programa dirigido a la madre y al niño”, explicó la especialista.
También la medicina cubana ha llegado a más de seis países africanos, con una cifra superior a los 500 colaboradores, y se abre paso en naciones como Mongolia, Vietnam y Bután.
“Hemos contribuido, además, a la organización del sistema de salud en algunos países, que han pedido trasladar la experiencia cubana en la búsqueda de mejorar el bienestar de sus pueblos, sobre todo en la atención primaria de salud”, señaló Eucalia Mantilla.
Y en ese empeño, Más Médicos en Brasil, es uno de los más preclaros ejemplos.