Los mayas inventaron algo parecido al golf: lanzaban una pelota a un aro colocado en la pared. Era un ritual en el que el premio para el ganador era su ejecución como ofrenda a los dioses.

Las cosas han cambiado mucho desde los tiempos de los mayas. El verdadero deporte del golf, originario de las tierras de Escocia, fue traído en 1895 a México por un grupo de ingleses que trabajaban en las minas de Pachuca, en la localidad de Hidalgo, en el interior del país. El primer campo de golf en la Ciudad de México se construyó gracias a la iniciativa del Sr. Will Townsend, en la primavera de 1900. Se levantó en los llanos de San Pedro de los Pinos. Actualmente, en México hay 43 campos turísticos, abiertos para todos los aficionados y otros 80 campos más de carácter privado. El Fondo Nacional de Fomento del Turismo (FONATUR) hoy en díacuenta con cinco de los campos más visitados de todo el país, como son Loreto y Los Cabos, en la Baja California Sur, Ixtapa, en el Estado de Guerrero, Marina Vallarta, en el Estado de Jalisco y Tangolunda, en el Estado de Oaxaca. Por la costa del Caribe En Mérida hay dos Clubes de Golf donde se reúne la élite de la sociedad yucateca. Son el Club de Golf de La Ceiba y el Club de Golf Yucatán. El campo de Golf Pok-Ta-Pok es un reto para el tirador que debe evitar rozar en sus tiros ruinas milenarias que forman parte del terreno de juego, donde se siente la presencia de los antiguos mayas. En el Caesar Park Cancún se juega como en plena selva. Se puede considerar uno de los campos más difíciles. Llegar al hoyo 14 es toda una aventura: el diseñador del campo, el japonés Isao Aoki, le ganó espacio a la laguna Nichupté, donde habitan pacíficos caimanes. El golfista ha de ser hábil. Trece de los hoyos tienen alguna trampa de agua escondida. El campo mide entre 6.767 y 5.235 yardas, par 72. Los gastos son de US$80, incluyendo carros. Tel: 800-228-3000. El Club de Golf Playacar fue escarbado dentro de la selva. Tiene las instalaciones más adecuadas, la infraestructura más moderna y los hoteles de Cancún a pie de campo. Diseñado por el arquitecto Robert von Hagge, tiene de 7.200 a 5.871 yardas, par 72. Los gastos son de US$99, incluyendo carros y los paquetes de golf están disponibles en el Club Maya Beach (Tel: 800-898-9968) o en Allegro Caribbean Village (Tel: 800-858-2258)

Alrededores de Ciudad de México Algunos “capitalinos”, como se les conoce a los habitantes de la Ciudad de México, tienen casas de campo en Valle de Bravo, y jugar golf en el prestigiado Club de Golf Avandaro es una costumbre. El suave entorno de un lago artificial, rodeado de pinares y encinares, y el pueblo rústico invitan a pasar un fin de semana en la más completa tranquilidad, para jugar golf en uno de los campos mexicanos con más categoría. Por la costa del Pacífico El Club de Golf Ixtapa cuenta con uno de los hoyos más difíciles de lograr: el hoyo 15, un par 4 de apenas 350 yardas, que conjunta el mar y un lago por un lado y un río por el otro. La dificultad estriba en el primer tiro ubicado en la parte alta de un cerro, hacia el mar, con viento en contra que puede desplazar la pelota hasta el lago o hasta la playa, marcando un “out of bounds”. Todo un reto en un recorrido de 18 hoyos, par de 6.898 yardas. En Oaxaca, se encuentra el Club de Golf Tangolunda, construido por FONATUR. Con una superficie de 75 ha., este campo par 72 de 6.851 yardas, es el único en el que el freeway llega hasta la playa. En Puerto Vallarta encontrará el Club de Golf Flamingos, de 18 hoyos, o la Marina Vallarta Club de Golf. En Colima, La Mantarraya ha sido calificado por el Golf Digest como uno de los cien mejores campos de golf del mundo. En la península de la Baja California, en Los Cabos, se reúne a jugar la élite mexicana y los profesionales de todo el mundo. El Palmilla Golf Club es sede del importante Torneo Senior Slam y se juega bajo el auspicio del Circuito Norteamericano Senior de la PGA. Bajamar está situado cerca de Ensenada. Diseñado por Percy Clifford, es un reto para cualquier golfista, pero también cuenta con instalaciones para el relax.