Cualquiera puede ser testigo de excepción de exóticos animales en su medio natural, como las tortugas, que arriban a las playas de las islas a poner sus huevos y las aves que se han adueñado de algunos cayos. Un destino protegido del tiempo y del espacio, donde todavía es posible regresar a un verdadero paraíso en la Tierra.

La provincia de Bocas del Toro, en el extremo occidental de Panamá, limitando con Costa Rica, es un territorio de 8.917 Kms2, dividido en tres distritos: Changuinola, Chiriquí Grande y Bocas del Toro.

Porque en estas islas de Bocas del Toro dejará atrás el contacto con la civilización asfixiante que ha conocido y se encontrará en pleno contacto con una naturaleza inexplorada. La zona se encuentra rodeada de abundantes manglares y hermosos arrecifes coralinos, además de unas excelentes playas semi-desérticas.

En el extremo norte de Isla Colón, las más recomendables son Bluff y Bocas del Drago, a 45 minutos en lancha, o 20 minutos en coche, de la capital de la provincia, que se encuentra en el extremo sur de esta isla, a unos 25 Kms. La reserva natural de Isla Bastimentos En el marco incomparable de este archipiélago se creó el primer Parque Marino Nacional de Panamá, el de Isla Bastimentos. Se trata de una reserva natural de increíble riqueza, que abarca arrecifes coralinos, inmensas extensiones de manglares, playas de blanca arena y aguas cristalinas, y va desde la propia Isla Bastimentos y los pequeños islotes que la rodean, hasta los Cayos Zapatilla, que se sitúan hacia el sureste, a menos de una hora de vuelo de la Ciudad de Panamá. Es uno de los hábitats más hermosos, con más de 13.000 hectáreas, donde encuentran protección ranas de especies autóctonas, perezosos, manatíes y tarpones.

Paraísos del coral en Cayos Zapatilla Los Cayos Zapatilla son dos pequeñas islas coralinas ubicadas dentro del Parque Nacional Marino de Isla de Bastimentos. Deben su curioso nombre a la forma de zapatilla que ofrecen si las observamos desde el cielo. Son conocidas entre los amantes del buceo por los inigualables lugares de inmersión con que cuentan, gracias a la enorme diversidad de su fauna marina.

Además, anidan hasta cuatro tipos de tortugas, que desovan a millares en sus playas, aunque la especie más protegida y escasa es la Carey. Para poder acceder al Parque Marino Nacional de Isla Bastimentos, los visitantes deben conseguir un permiso escrito del INRENARE, que está en la Calle Primera, en la ciudad de Bocas del Toro (Isla de Colón). Es la Agencia Gubernamental para la Protección de los Recursos Naturales.

La única manera de acceder a ellas es por mar, para lo cual será necesario contactar con una agencia de viajes (casi todas las de Panamá organizan excursiones a estas islas), o con el propietario de cualquier embarcación que se ofrezca al transporte de viajeros. Para mantener las condiciones naturales de estos parajes se ha evitado todo tipo de edificaciones y facilidades para el turismo. Esta es la razón de que apenas se perciban huellas de civilización, aunque en el llamado Cayo Menor existe un refugio, que es utilizado ocasionalmente por los científicos que acuden a estudiar las tortugas verdes, y el Cayo Mayor, cuenta con un pequeño muelle para facilitar los desembarcos. Las doradas y extensas playas de los Cayos Zapatilla son lugares idílicos que jamás soñaría encontrar. Junto a ellas, la selva tropical, llena de cocoteros. Déjese llevar por la agradable sensación de estar fuera del tiempo, observando las aves, paseando por la selva, relajándose al sol. Reencuéntrese, en definitiva, con el paraíso terrenal.