Electa Arenal junto al Proyecto Carranza. Foto: Colección familiar.
Electa Arenal, detalle de autorretrato.

La historia del arte holguinero adquiere matices relevantes en las décadas posteriores al triunfo de la Revolución Cubana. En ese trayecto destaca el nombre de Electa Arenal Huerta, para algunos solo La Mexicana. Nace el 16 de mayo de 1935, en la ciudad de México, donde fallece el 12 de junio de 1969. Tenía 34 años y trabajaba afanosamente en los murales del Poliforum Siqueiros. Ese tiempo le fue suficiente para dejar una obra fuerte, como su carácter, emplazada en espacios públicos y obras sociales de Holguín, Velazco y Puerto Padre, aparte de otras en Saltillo y Ciudad México. Procedía de una familia de activistas políticos y de tradición dentro de las artes plásticas. Al amparo del muralismo mexicano cultivó su vocación ética y estética.

Cuando se conmemoran cincuenta años de su deceso, el Centro Provincial de Artes Plásticas puso atención al proyecto de homenaje presentado por el artista, pedagogo y curador holguinero Ramiro Ricardo Feria, que se logró concretar el 12 y 13 de junio con el apoyo de la Dirección Provincial de Cultura y la colaboración del Centro Provincial de Patrimonio, cuyas instituciones atesoran parte de este legado y ha de velar por la adecuada conservación de las obras presentes en otros sectores. 

Buscando a Electa tuvo su primera acción el 5 y 6 de junio en la ciudad de Saltillo, México, de donde es originaria la familia materna de Electa. Su madre, Elena Huerta, es recordada con admiración y respeto. Allí fue indispensable el auspicio de la Secretaría de Cultura del estado de Coahuila, del Centro Cultural Vito Alessio Robles y el apoyo de la Maestra Mercedes Murguía, discípula de Elena, quien acompañó la jornada en Holguín. 

Aunque buena parte de los habitantes de esta urbe interactúan con la autora del Monumento a las pascuas sangrientas, el mural pictórico Revolución, el bajorrelieve Infancia, entre otras, al visitar el Museo Provincial de Historia La Periquera, la Plaza de la Revolución Mayor General Calixto García, al transitar por los edificios biplantas de las calles Cuba y Mendieta o asistir al Cuerpo de Guardia del Policlínico Mario Díaz Legrá, muchos ignoran que, en esos espacios, el nombre de Electa es el pie de firma ausente. Hasta estos y otros lugares de emplazamiento sitos en Velazco y la localidad tunera de Puerto Padre llegaron artistas invitados que pudieron visualizar las obras en su estado y contexto actuales. La mayoría de ellas, como los murales Canto a la Revolución y Niños y átomos (Puerto Padre) fueron concebidas para las instituciones de Educación y Salud en las cuales trabajara como arquitecto Gustavo Vargas, esposo de la artista. Como zona de desarrollo, el nororiente de Cuba le brindó a la joven pareja la posibilidad de aportar sus saberes a la transformación de una sociedad que comenzaba a reconfigurarse a sí misma, y así lo hicieron entre 1961 y 1965.

El programa homenaje incluyó tres exposiciones, inauguradas en la noche del 12. En la sala bautizada con el nombre de la artista, Por siempre Electa reunió una vez más a Electa y Elena y dio la posibilidad de aprehender de conjunto el valor de ambas producciones, actualmente al cuidado de La Periquera, adonde fuera donada parte de la colección por Sandra Arenal Huerta, en 1992. Se exhibe una selección de grabados, esculturas restauradas para la ocasión por el artista Lauro Hechavarría, fotografías de documentos originales, fotos de la artista, así como de una pequeña representación del trabajo gráfico de Elena, generado al calor del Taller de Gráfica Popular de México.

Versos de La Mexicana se escogieron para orientar el sentido de Acompasando tus pasos. Esta muestra tiene el mérito de integrar, como pocas convocatorias recientes, a cuarenta artistas de la ciudad, consagrados y noveles, en su diversidad de técnicas y poéticas. Firmas como las de Cosme Proenza, Jorge Hidalgo, Ramiro Ricardo, José Emilio Leyva y Luis Silva se unieron a las de Hennyer Delgado y Armando Ruiz para una armonía visual que da méritos al trabajo curatorial y museográfico liderado por el también artista Ronald Guillén. A destacar la inclusión de uno de los Átomos, jardineras concebidas para la inauguración del hospital Vladimir Ilich Lennin, donado al Centro para el homenaje. Mientras, Ecos de tu risa convocó a los niños del taller de creación infantil Antes del Alba, que cada sábado realiza la artista Leticia Leyva Azze. Desde la frescura del ingenio infantil, los veintiún participantes se apropiaron especialmente del retrato junto a habitantes permanentes de la fantasía de los niños de toda época, incluidos los de este tecnologizado siglo xxi. 

Más allá de acercarse a su imagen, temáticas abordadas o a la iconografía concebida para murales, esculturas, cerámicas, la gráfica o la pintura está la inspiración que todavía hoy despierta la actitud retadora, el gesto artístico comprometido, la voracidad de un quehacer intelectual en pleno auge que Electa irradió hacia quienes laboraron o interactuaron con ella de una manera u otra. Los queridos años sesenta del siglo xx se sintetizan en su persona con todas las contradicciones y riquezas del momento. 

En este contexto fue entregada la distinción Electa Arenal Huerta, que destaca la labor de personalidades e instituciones con aportes significativos al desarrollo de las artes visuales desde la creación, la investigación o la promoción de esta manifestación. Originada en 1993, como parte de los Premios de la Ciudad en la Semana de la Cultura Holguinera y luego de una pausa de más de diez años sin efectuar su entrega, fueron reconocidos, además, por su vínculo con Electa, el pintor Luis Catalá Maldonado y el escultor Carlos Parra Sánchez, que aprendieron sus enseñanzas en el Taller Experimental de Escultura; el investigador Abel Sastre, la maestra Mercedes Murguía; Guillermo López, Javier Villarreal y Eloy Cerecero, destacadas personalidades de la cultura saltillense. Estos últimos la recibieron en su ciudad, es la primera vez que la distinción se entrega fuera de Cuba.

Mención aparte merece la presentación del catálogo monográfico Buscando a Electa, que tuvo compilación, edición y diseño de Ramiro Ricardo y maquetación digital de Josvel Vázquez. Este queda como amplio material de estudio que recoge la obra íntegra de la artista, fotos inéditas y comentarios de especialistas que justiprecian el valor de un trabajo que, según David Alfaro Siqueiros, impulsó al muralismo los aires de una nueva generación. 

Estos días no fueron suficientes para ahondar en la impronta de Electa Arenal, tampoco estas líneas. Falta mucho por decir sobre su verdadero impacto en el desarrollo ulterior de la práctica escultórica en esta región de Cuba, sobre los valores que para el arte mexicano aportó su trabajo. Queda en preparación un libro-arte con selección de su obra poética e ilustraciones del artista holguinero Daniel Santos, por Cuadernos Papiro. Una gran motivación para continuar promoviendo y revalorizando el patrimonio visual común a las tierras de Martí y Juárez.