«Dentro de la concepción de Habanos S.A., la Gran Reserva viene siendo la línea de la más alta exclusividad y exigencia para personas conocedoras del producto, el tope de lo mejor, la selección de la selección»; según la visión de Ángel Brown Vaillant, director de la fábrica El Laguito, donde se elabora la marca Cohiba.

Se trata de un producto para el que se han reservado materias primas de las mejores vegas de San Juan y Martínez y San Luis, con exquisito tratamiento en la agricultura, el beneficio de un prolongado añejamiento natural en las mejores condiciones, de lo que derivan su singularidad y apreciados atributos que el fumador puede percibir como algo completo, muy valioso, de un gusto y aromas plenos, como sólo puede garantizarse con un riguroso enfoque en los sistemas de calidad, mediante todo el proceso. Insiste Brown, «hablamos de lo más supremo en materia prima logrado en las más selectas vegas de Vuelta Abajo, tratado con las más exquisitas atenciones durante un largo período de añejamiento de 5 años de las diferentes hojas de la tripa, así como del capote y de la capa, para un torcido inmejorable en nuestra fábrica».

La Gran Reserva se presenta en la vitola Siglo VI de Cohiba (cepo 52 x 150 mm), la ideal para los momentos más especiales, pues garantiza una fumada larga y placentera durante unos 45 minutos, bien aprovechados; de ella otro de los atributos que apreciarán los amantes de los grandes detalles y coleccionistas de obras de arte, es la elegante y fina presentación en estuches exclusivos, para camadas de 15 unidades.

El origen, la cata y otros apuntes

El Instituto Cubano del Tabaco y Habanos S.A. llevaban tiempo trabajando conjuntamente en un proceso largo de estudios y tanteos, hasta que fueron cerrándose las pistas hacia una primera versión de dos ligadas que tuvieron a su vez, sucesivos ajustes y precisiones por los catadores propios de la fábrica El Laguito.

Fueron meses, jornadas tensas y a la vez emocionantes. «Por fin se organizó la primera cata, cuenta Brown, a la que acudieron 102 participantes, entre especialistas del Instituto Cubano del Tabaco, ejecutivos de Habanos S.A., los propios miembros de los paneles sensoriales de todas las fábricas de La Habana, sommeliers, distinguidos amantes del Habano y fumadores con experiencia.»

«En Cohiba, teníamos ya una bien diferenciada inclinación, pero lo asombroso de esa primera ronda fue el alto nivel de coincidencia y unanimidad con esa misma ligada.»

No obstante, se organizó una segunda sesión unos días después, ahora con 94 personas y «los resultados fueron similares; o sea que se trataba de algo sumamente impactante, de un producto supremo, de una ligada muy especial, a partir de la mejor materia prima, con la que hubo el más alto por ciento de unanimidad en el criterio de preferencia y eso por sí sólo, es sumamente importante».

El IX Festival se convierte ahora en el escenario ideal para develar esta maravilla –Cohiba Gran Reserva Siglo VI–, un habano de la más alta calidad distinguido por su sabor en boca y el aroma; en la marca más prestigiosa y en un formato muy demandado por los mejores conocedores, todo lo que es una garantía de inmenso placer y rotundo éxito de antemano.

La gran reserva es lo más Exquisito de la materia prima lograda en las vegas de Vuelta Abajo, con un largo añejamiento de 5 años de la tripa, capote y capa, y un torcido inmejorable en la fábrica El laguito, donde nació y se produce la marca cohiba, el más prestigioso de todos los habanos