Con la confianza de sus clientes
No es casual la confianza que hoy tienen los clientes de la mayor de las Antillas en la empresa Comercial Hispano Cubana 2 s.l. (CHC). Sus diez años de trabajo en este mercado corroboran tal aceptación, la cual está respaldada, afirma Carlos Munuera Vegas, director general de la entidad, “en que siempre hemos ofrecido un producto de primera calidad”.
Con casa matriz en Barcelona, esta firma fue fundada hace 15 años, por José María Munuera Torres, su actual presidente, unsobresaliente vendedor por toda España y otros países de Europa de varias marcas de pinturas muy reconocidas, quien retado por unos colegas vino en la década de los años noventa a probar suerte también en Cuba, donde no sólo corroboró su fama como buen comerciante, sino además ganó la seguridad e inspiración para crear su propia empresa familiar.
Desde entonces su incursión en el mercado de la Isla con pinturas fundamentalmente para la rama automotriz, se fue incrementando poco a poco, hasta que en septiembre de 1998, solicitó y recibió la aprobación de la Cámara de Comercio de la República de Cuba.
Su hijo, Carlos Munuera Vegas, joven egresado de la especialidad de Sistema Empresarial de la Universidad de Barcelona, recuerda que en un inicio empezaron solo con pintura automotriz, pero dada la expansión de la empresa y las necesidades que fueron surgiendo en este mercado su organización se abrió a otras áreas.
“Ahora estamos trabajando, destaca, las pinturas plásticas, de vinil y otras; también hemos entrado en contacto con el Ministerio de la Construcción para suministrarle pinturas para esa rama, y esperamos que se sigan abriendo más puertas y caminos para continuar nuestra expansión por mucho tiempo”.
Producir sus pinturas en Cub a Munuera Vegas explica que todos sus productos tienen calidad homologada tanto en Europa como en Cuba, los cuales durante su fabricación pasan por rigurosos controles de calidad e incluso ofrecen algunas líneas especiales para proteger los vehículos del embate de corrosión que prevalece en el clima de este país por sus características geográficas, rodeado de mar, altas temperaturas y muy elevada humedad, elementos nocivos para las pinturas tradicionales. Indicó que Comercial Hispano Cubano tiene también el aval del Ministerio de Transporte y “nos vamos relacionando con el Ministerio de la Construcción. En un futuro nos gustaría poder producir aquí nuestras pinturas asociados a una industria de la Isla, lo cual resultaría siempre más beneficioso tanto para el país como para nosotros.
“Esto abriría, añadió, nuevos puestos laborales para trabajadores cubanos, y sobre todo permitiría al mercado nacional contar con productos de calidad, más baratos y cercanos al cliente”.
Reveló que recientemente se han convertido en propietarios de la mayoría de las acciones de la industria IVAT Ibérica Coatings, de Barcelona -que sin ser una trasnacional se ubicada entre las empresas importantes de España-, “productora de las principales marcas que traemos a Cuba, nuestro fundamental destino, aunque ahora empezamos a distribuir una pequeña parte en el mercado español”. El joven empresario expresó su complacencia “porque mi padre me diera la oportunidad de dirigir esta empresa en Cuba,
de poderme labrar mi propio futuro, todo lo cual me hace sentir aún más orgulloso de él. Es una experiencia muy importante porque no es lo mismo aquello que uno aprende en la teoría del aula universitaria, que cuanto se vive aquí en la acción cotidiana, en el trabajo en la calle, visitando clientes, en reuniones con directores de otras empresas; es una experiencia valiosa que uno va adquiriendo.
“Si creo, afirma, que soy capaz de continuar la obra emprendida por mi padre y esto lo digo no porque me considere superior, sino porque todos los conocimientos y experiencia que me ha trasmitido en estos tres años que llevo trabajando codo con codo junto a él en Cuba, me han hecho mucho bien; me ha enseñado muchísimo”.
Munuera Vegas significó que se puede hacer negocios en Cuba, “porque para mi el término negocios es simplemente un acuerdo entre dos personas o entidades en que ambas saldrán beneficiadas de esa relación, y para trabajar en este mercado, como en cualquier otro, hay que aprender sus reglas, y aunque en esta vida todo puede resultar complejo, para salir adelante lo importante es que tengamos empeños, ganas e ilusiones”.
Tecnología de punta Uno de los productos de CHC más demandados por el mercado cubano son los impermeabilizantes para techos, según Munuera Vegas que constituyen una novedosa tecnología en que “no se necesitan mallas u otros aditamentos para aplicarlas, solo pintando se resuelve, por lo cual resultan más económicos y ahorra espacio de almacenaje. Ya se han utilizado en la reparación del Hotel Meliá Habana y en otros”.
Líderes en pinturas para autos, guaguas y camiones, entre otros, el directivo aseguró que hoy suministran a entidades cubanas todo lo que conlleva colorear un vehículo (masilla de retoque, aparejos, diluentes, pinturas monocapas, bicapas, barnices); mientras al sector de la construcción ofrecen pinturas para interiores, exteriores, interiores-exterior, impermeabilizantes, antioxidantes, toda la gama que pueda necesitar un constructor en una obra, y comenzarán a traer pintura para aviones. Cabe destacar que la empresa Comercial Hispano Cubana disponen de pinturas en stock, en almacenes ubicados en la capital cubana, para abastecer de inmediato a sus clientes y también en consignación con los astilleros de la Isla; mientras que aquellos productos muy puntuales, son solicitados a la fábrica en España, donde se elabora con todas las exigencias requeridas por el cliente de la Isla y en un término máximo de 60 días lo ponen en sus manos.
Para Munuera Vegas lo más importante es que “vendemos con la calidad por delante, con una magnífica relación calidad-precio, porque nuestros productos no son baratos, tampoco caros, el precio está en correspondencia con su probada calidad”. Entre sus principales clientes cubanos figuran la Empresa Nacional de Astilleros (ENA); la empresa importadora del MITRANS; también IMECO del MICONS; el Contingente Ñico López; GECA del MINAZ y otras empresas pequeñas.