Ya era conocido de los sistemas Tempomat (acelerador electrónico manual), la posibilidad de seleccionar una velocidad determinada por el conductor y la intervención  automática de la aceleración del motor y de los sistemas de frenos para mantener esta velocidad previamente fijada. Ahora tenemos una evolución de esta tecnología, incorporándose adicionalmente un control automático sobre la transmisión para adecuar la relación óptima según las condiciones de la vía, consiguiéndose una mayor eficiencia y ahorro de combustible. No solo se conserva la velocidad preestablecida sino que se aprovecha el impulso en pendientes cuesta abajo o interviene en la estrategia de cambio de marchas durante la subida. 

El innovador sistema de asistencia a la conducción Predictive Powertrain Control, integra en el mando automático del cambio, un modo de marcha adaptado a la topografía de la ruta. Utilizando un sistema de ubicación vía satélite por GPS y un mapa de carreteras en 3D, el sistema detecta el trazado de estas, incluyendo las pendientes del terreno, y actúa en consecuencia, optimizando con previsión los puntos de cambio y la velocidad regulada por el Tempomat. Ello permite ahorrar un 5 % adicional de combustible. Esto conlleva a un estilo de conducción predictivo basado en el conocimiento de la ruta y el vehículo.

Este sistema está disponible para las gamas de camiones Mercedes-Benz ACTROS, ANTOS (para distribución) y AROCS (para la construcción) y trabaja en combinación con el cambio automatizado de 12 velocidades Mercedes PowerShift 3, mejorado una vez más, que es capaz de transmitir una enorme fuerza con inmediatez y eficiencia al eje trasero gracias a la precisa elección de las marchas y los rápidos cambios de relación. Para ello se ha mejorado la lógica de cambio, que tiene en cuenta numerosos factores a la hora de elegir la marcha adecuada: peso del conjunto, inclinación de la carretera y posición del acelerador. Un sistema electroneumático del mando del cambio, permite que una Unidad de Control tome las mejores decisiones y se integre al Predictive Powertrain Control. 

En 2013 aparecía el Scania Opticruise y como una función dentro de este, el Scania Active Prediction con diferentes modos de rendimiento, cuyo objetivo es igualmente conservar una velocidad crucero del vehículo, pero su entrada es seleccionada directamente por el conductor y no mediante la intervención automática con GPS. 

Sin dudas, esta resulta una nueva contribución hacia la fuerte tendencia de desarrollo de la conducción autónoma en la industria automotriz y continuarán sorprendiéndonos con sistemas de funcionamiento predictivos que permitan aumentar el confort, la seguridad y el rendimiento de los vehículos.