- SANTO DOMINGO CAPITAL DE LA CULTURA GASTRONÓMICA DEL CARIBE
ESTE DESTINO CULINARIO REÚNE TODAS LAS CARACTERÍSTICAS HISTÓRICAS, CULTURALES, TURÍSTICAS Y GASTRONÓMICAS DEL PATRIMONIO CARIBEÑO
El pasado 20 de febrero, Santo Domingo (República Dominicana) fue designada por la Academia Iberoamericana de Gastronomía “Capital de la Cultura Gastronómica del Caribe”. Honor merecido, sin duda, para la tierra donde se produjo el primer encuentro gastronómico de dos mundos, cuando Cristóbal Colón y su tripulación desembarcaron en 1492.
Desde la Academia Iberoamericana valoramos especialmente que la ciudad de Santo Domingo, uno de los principales destinos culinarios de la región caribeña, reúne todas las características históricas, culturales, turísticas y gastronómicas del patrimonio caribeño con toda su singularidad. La decisión fue absolutamente unánime por parte de los otros 12 países miembros de la Academia Iberoamericana y motivo de satisfacción, no solo para los grandes cocineros locales, sino también para los productores, grandes y pequeños, que inundan con sus materias primas los coloristas mercados dominicanos.
El cuarto mercado turístico de América Latina
El presidente de la República Dominicana, Danilo Medina, ha apoyado con fuerza esta designación. Al fin y al cabo, hablamos del cuarto mercado turístico de América Latina, al que llegaron en 2016 nada menos que seis millones de visitantes. Enrique de Marchena, secretario de la Academia Dominicana de Gastronomía, que preside Luis Ros, señalaba hace poco que “la Capitalidad es una gran oportunidad para el continuo desarrollo del turismo dominicano y, en particular de la ciudad de Santo Domingo”, especialmente de su atractiva zona colonial. Todos los eventos que se están desarrollando son fruto de la colaboración entre la Academia Dominicana y la Fundación Sabores Dominicanos.
El coordinador general de esta última, Luis Marino López, manifestó que “una de las grandes ventajas –y a la vez problema de la gastronomía dominicana– es la gran diversidad de sabores y culturas que la componen, lo que no ha permitido hasta ahora diseñar un perfil definido”. Y Luis Ros señaló, por su parte, que uno de los objetivos de la Academia Dominicana es “establecer alianzas con los diferentes sectores para lograr una mejor valoración de los platos icónicos que representan a la gastronomía local”.
Un patrimonio gastronómico extraordinario
Hablamos de un patrimonio gastronómico extraordinario distribuido, en realidad, por todo el país. Santo Domingo, la capital, es la tierra del mofongo, un plato de plátano asado con queso, chicharrón de cerdo, caldo de pollo y ajo. Originaria de Moca, esta receta se ha perfeccionado en los restaurantes de la capital dominicana.
Más hacia el noroeste, en Montecristi, la receta estrella es el estofado de chivo o chivo liniero, a veces presentado como el relleno para unas empanadas, bañado en Jerez o cerveza. Y en Punta Cana, el gran destino turístico del país, el plato de referencia es la bandera, a base de arroz blanco, fríjoles y carne, acompañado con ensalada y tostones. Pero los amantes del pescado pueden optar por cangrejos, calamares o pulpo que los dominicanos preparan con maestría, acompañadas de coco.
La Capitalidad también servirá para reivindicar el sancocho dominicano, por cuyo origen se pelean las poblaciones de Jarabacoa y Constanza. Se trata de una sopa que incluye carne de res, cerdo, chivo, pollo, de costilla y jamón, sazonado todo con perejil, orégano y ajo. Y otras recetas tradicionales del país son el pulpo al ajillo de Puerto Plata y el langostino con tostones de Barahona, las cuales también se pueden encontrar en los restaurantes de Santo Domingo.
En la tercera edición del Foro Gastronómico Dominicano (que tuvo como lema Cocina Dominicana: formación y transformación) participó “nuestra” María Marte, excepcional cocinera dominicana establecida desde hace años en Madrid y donde ostenta dos soles Repsol y dos estrellas Michelin. Hace un par de años, María fue designada, además, Premio Nacional de Gastronomía al Mejor Jefe de Cocina. A la vuelta a su país, esta gran embajadora de la calidad de los fogones dominicanos fue recibida con un extraordinario entusiasmo.
La importante función de la Academia Iberoamericana
Tras esta designación, está, en primer lugar, la Academia Iberoamericana de Gastronomía, que me honro en presidir. Es una iniciativa de la Fundación Doña María de las Mercedes, que fue constituida por la Confederación de Empresarios de Andalucía y tuvo en su origen el objetivo de reforzar la relación de Andalucía con la Comunidad Iberoamericana de Naciones en aspectos sociales, culturales, económicos y de cooperación, tarea esencial en la que estamos todos comprometidos.
En la Academia Iberoamericana están representadas algunas de las mejores cocinas del mundo, concretamente las de 13 países (España, Portugal, México, República Dominicana, Cuba, Panamá, Venezuela, Colombia, Perú, Argentina, Chile, Brasil y Estados Unidos-Este) y tiene como objetivo fomentar “la investigación, divulgación y protección de las actividades gastronómicas propias de las distintas regiones y pueblos latinoamericanos”, además de “divulgar sus manifestaciones, cuidar de la pureza de sus tradiciones y apoyar la modernización de las técnicas y la consideración de las nuevas propuestas gastronómico-dietéticas”.
Desde mi punto de vista, las academias gastronómicas son la mejor forma de promocionar los alimentos y bebidas, de reivindicarlos como atractivo para el turismo, la gran riqueza de todos nuestros países en este siglo XXI y el principal motivo de esperanza para el desarrollo de economías como la dominicana, en este caso a través de la Capitalidad del Caribe.
Y las academias promueven otro componente fundamental en la alimentación de nuestro tiempo, el saludable desde la perspectiva nutricional. Porque, junto a la búsqueda del placer, comemos básicamente para preservar nuestra salud. Son los dos ejes de “la cocina de la libertad”.
Santo Domingo, the Capital of the Caribbean Gastronomic Culture
On February 20 in Santo Domingo, the Dominican Republic, was designated the Capital of the Caribbean Gastronomic Culture by the Iberian-American Gastronomy Academy. This is no doubt a well-deserved honor for the land where the first gastronomic encounter between two worlds occurred, when Christopher Columbus and his crew landed in 1492.
From the Iberian-American Gastronomy Academy we give kudos to the city of Santo Domingo, one of the top culinary destinations in the Caribbean, a city that boasts all the historic, cultural, tourist and gastronomic characteristics of the Caribbean heritage with all its peculiarities.