Los coches eléctricos siguen ganando terreno en la industria automotriz y aunque, sin lugar a dudas, presentan importantes ventajas sobre los automóviles convencionales su espacio es realmente pequeño dentro de las ventas globales. El país más adelantado en ese campo es Noruega, con el 23 % de la compra de autos eléctricos en todo el mundo. A diferencia de España, por ejemplo, donde ocupa menos del 1 % de las ventas.

Las ventajas más significativas son: no necesitan combustible, convierten la electricidad que consumen en movimiento mecánico gracias a su motor, son muy respetuosos con el medio ambiente, su nivel sonoro es muy bajo. Además, los costos del motor eléctrico en comparación con el de combustión (con una misma potencia) son muchísimo menor. Con el plus de ser más compactos y fiables. Por último, el auto eléctrico no necesita caja de velocidades porque su par motor es el mismo de 0 a 3 000 rpm (por poner un ejemplo), solo se le instala un diferencial que pueda elegir si el auto marcha hacia adelante o hacia atrás.

Ahora bien, presentan algunas desventajas como: la poca autonomía de las baterías convencionales que solo permite circular unos 100 a 150 km con una carga completa. Baterías más modernas duplican y triplican la autonomía, pero su precio en el mercado es excesivamente caro. En la mayoría de los países es muy difícil y hasta imposible encontrar puntos de recarga. Aunque es una realidad que en Europa se incrementan con rapidez. Para rematar, hoy día un coche eléctrico es más caro que uno convencional, eso en gran medida se debe al precio del banco de baterías, indispensable para su funcionamiento.

De cualquier manera, como al principio comentamos, los coches eléctricos siguen ganando espacio dentro de la industria del automóvil. Sus ventajas son claras y sus desventajas pueden revertirse en cualquier momento. Falta ver si los gobiernos y las propias marcas ponen mayor empeño en motivar a los clientes a comprar este tipo de vehículos con precios asequibles, con menos impuestos y con una notable autonomía.


Electric Cars: Pros and Cons
Electric cars are gaining momentum in the motor industry and, although they undoubtedly offer significant advantages over conventional cars, their market share is truly small in terms of global sales. Norway is playing the leading role in this field, where 23 percent of electric cars from around the world are bought. On the other hand, Spain takes less than 1 percent of those sales.

The main pros are that no fuel is required, they are eco-friendly and noise level is very low. Moreover, the costs of electric engines compared to combustion models (delivering the same power) is far lower. There are such disadvantages as the short range of conventional batteries. Today’s batteries double and triple that range, but their market price is excessively high. In most countries, it is hard, even impossible, to find recharging outlets.