En el extremo oriental del territorio venezolano existe una zona de gran belleza que maravilló al mismo Colón cuando en 1498 descubrió un mar de agua dulce que bañaba las costas de lo que llamó "Tierra de Gracia".

Con dos mil doscientos kilómetros de recorrido, el Orinoco nace en el Estado Amazonas, en la zona fronteriza con Brasil y arrastra las aguas de una inmensa cantidad de ríos que vienen desde las montañas de la Cordillera Andina y de las tierras altas centrales, sufriendo la metamorfosis que lo caracteriza como enigmático y misterioso: de un pequeño goteo, de un poco de rocío en lo alto de una montaña a 1047 metros de altura, en la zona donde se encuentra la selva impenetrable, se transforma en un monstruo medieval que divide a la geografía venezolana en dos partes y que después de su larga trayectoria se entrega al Océano Atlántico formando un delta tan grande como Bélgica, constituido por un intrincado sistema hidrológico con mas de trescientos "caños" que es como se denominan los canales que comunican a una isla con otra, de los cuales sólo tres son transitables por embarcaciones de gran calado. A su vez una gran cantidad de islas formadas por la acumulación de sedimentos forman una fantástica selva fluvial, indescriptible e impenetrable, hermosa sin duda alguna. El Delta del Orinoco es un territorio que ocupa un área aproximada de veintitrés mil seiscientos kilómetros cuadrados, en el Estado Delta Amacuro, entre las coordenadas 8º 30'y 10º de latitud Norte y los 60º y 62º 30'longitud Oeste. Con un clima cálido y húmedo característico de la zona intertropical y una temperatura anual promedio de 26º C con abundantes lluvias entre los meses de Mayo y Noviembre, siendo las mayores en los meses de Julio y Agosto. El sistema que conforma el Delta se basa en una gran cantidad de islas sedimentarias y comunicadas entre sí donde crece a gran velocidad una selva inaccesible y frondosa, donde inmensos árboles y una gran variedad de palmas que pelean por la luz crean el gran laberinto siempre verde donde habitan los seres que han logrado adaptarse a estas condiciones. Son tierras inundables y anegadas, ricas y fértiles donde se puede practicar una agricultura más o menos estable y siempre dependiente del capricho del río, ya que este aumenta y disminuye su nivel con mucha frecuencia. Todo este territorio define un paisaje fantástico que esconde miles de secretos dentro de la selva y bajo las turbias aguas de color ocre, donde el peligro de caer en las fauces de las voraces pirañas, o perderse en el selva infinita, está siempre presente, pero allí nadie le teme. Por el contrario todos sus pobladores tanto animales como seres humanos, se enfrentan a éste a diario, incorporándolo a su forma de vida y aceptándolo tal como es. Pero el Delta no solo está poblado por animales selváticos; el ser humano ha estado presente en él desde hace mucho tiempo: son hombres y mujeres que aprendieron a vivir con el gran río, se trata de la segunda etnia indígena más numerosas de Venezuela con cerca de treinta mil individuos: los Warao. Esa gente tiene sus raíces en las poblaciones ancestrales de los indios Caribes y Chibchas, ocupando la zona Norte de la Guayana venezolana de donde fueron desocupados y perseguidos posteriormente por los mismos Caribes. Han logrado adaptarse a los cambios en el nivel de agua del río construyendo sus viviendas sobre estructuras de troncos que las elevan del suelo, evitando así que el agua llegue hasta el suelo de su "parafito" que es como se denomina este tipo de vivienda. Cada familia tiene un promedio de cinco a ocho hijos, y la autoridad en el hogar la representa la mujer, aunque el hombre es quien se encarga del sustento diario compartiendo algunas de las tareas cotidianas con la mujer y los hijos formando un núcleo familiar donde todos son miembros activos. En el pasado fueron adoctrinados por las misiones capuchinas y franciscanas, actualmente la mayoría de la población ha sido evangelizada por misiones pentecostales y bautistas. Cada Warao ha mantenido viva la llama de sus ancestros y no ha olvidado dónde están sus raíces, a pesar de que en la actualidad, se les ve trabajando en compañías petroleras y en los campamentos turísticos distribuidos a lo largo y ancho de la geografía deltaica. Los Warao que en su lengua significa "gente de canoa" bautizaron al río con su nombre actual de "Orinoco, el lugar donde se rema".

Cómo llegar

Hay vuelos directos a la capital u otros aeropuertos internacionales como el de la Isla Margarita con Iberia, Alitalia o British Airways. En Venezuela, Línea Turística Aerotuy (L.T.A.) tiene vuelos diarios a Maturín (capital del Estado de Monagas), donde un vehículo le llevará durante una hora hasta el poblado de San José de Buja (Estado Delta Amacuro) y después de dos horas de navegación a través de los caños, llegará al Campamento Boca de Tigre.