entijuanarte rEVOLUCIONa
El arte sociológico es aquel que, sin ser exhibido bajo las luces imponentes de un museo o una galería, se integra a los espacios y situaciones cotidianas para influir en su realidad y transformarla. Es una tendencia que ha ido ganando terreno desde la década de 1960 y que continúa siendo de gran relevancia en nuestra sociedad. Su poder radica en funcionar como un efectivo dinamizador de la relación entre la obra y el espectador. Renovando los sentidos de la oferta cultural, el arte sociológico hace uso de la dimensión urbana como membrana social incitando el acercamiento a las artes dentro de la dinámica cotidiana, al apropiarse de espacios de tránsito y uso común.
Es un arte que, ante todo, busca hacerse público y es creado por artistas que deciden salir de los museos y espacios reconocidos de exposición (lugares que pudieran parecer excluyentes; recordemos que un alto porcentaje de la población percibe los museos y galerías como terrenos ajenos, hostiles y extraños a su forma de vida) para integrarse al espacio urbano, confrontando de esta forma su producción artística con las condiciones arquitectónicas y sociales que construyen el contexto. Los espacios en los que se inserta el trabajo de los artistas interesados en generar obras de carácter sociológico suelen ser un reto en tanto les obligan a exponer su obra al contacto heterogéneo de públicos urbanos. Situación que genera en los habitantes de una ciudad una actitud de disposición obligada, alertando en ellos de forma natural e inesperada el placer de detenerse a percibir, disfrutar y pensar en la posibilidad de abrir su experiencia diaria a nuevos horizontes.
El arte sociológico no sólo incita en noso- tros un estado de reflexión como seres humanos –en tanto seres dispuestos a generar espacios de integración social–, sino que potencia el nivel de vida de nuestras ciudades al influir en las áreas de educación, imagen y desarrollo. Su presencia activa en la ciudad es capaz de generar una conciencia creativa comunitaria, que nos exige competencias y habilidades diferentes a las implicadas en el transitar de contextos grises y homogéneos comunes en el entorno urbano.
Toda manifestación o intervención ar- tística nace y se proyecta desde la existencia de una necesidad cultural a la que se ha de responder. Tal es el caso de la Avenida Revolución, la más antigua de Tijuana, BC (la frontera más transitada del mundo) –germen de la actividad turística y del nacimiento de la ciudad en la década de 1920. A raíz de la más reciente crisis económica y política que hoy aqueja al mundo, la Avenida Revolución ha caído en un estado más allá del abandono. Su vitalidad entumecida ante la falta de turismo, comercio e inversión estaba urgida de vivir una verdadera intervención encauzada por proyectos artísticos. Necesitaba el empuje de una transformación que redireccionara su andar y reconfigurara su sentido; la mejor manera de lograrlo sería hacer visibles los valores de sus ciudadanos con propuestas de rango estético e identitario.
Respondiendo a la urgencia de estos intereses, el proyecto entijuanarte rEVOLUCIONa se llevó a cabo en la ciudad a inicios del mes de octubre 2010 bajo la curaduría de Olga Margarita Dávila, quien, con intensidad creativa y a través de distintas propuestas artísticas, buscó absorber el pasado sobre las huellas de las muchas historias que comporta la Avenida Revolución. Su consigna: revivirlas como expresión de un presente promisorio. Siendo éste un momento imperioso para hacer trascender los orígenes mismos de la ciudad más allá de permanecer atrincherada como la “servidora de los vecinos del norte” (de alcohol en tiempos de prohibición; de sexo en tiempos de Vietnam y otras guerras). Tijuana merece creer en su presente como portador de un destino revolucionado. Accionar la ciudad implica impulsar su transformación social a partir de iniciativas artísticas. Casos conocidos de exitosas empresas similares existen en Latinoamérica, en las ciudades de Medellín y Bogotá –ambas, partícipes de altos índices de violencia– ejemplos hoy del potencial que albergan los procesos culturales como motores de la reconstrucción de confianza civil y seguridad social. Otro caso ampliamente reconocido sucedió durante la integración de Berlín Oriental y Occidental tras la caída del muro, en el ejercicio comprometido de activación de proyectos artísticos como procesos de cohesión social.
entijuanarte 2010 enfrentó las exigencias del momento y contexto presente y se obligó a emerger de modo creativo en medio de una realidad socio-urbana compleja y crítica. Parar enfrentar las exigencias de una ciudad en constante estado de alerta era imperioso que se convocaran diversos discursos a partir de consumos visuales y paradigmas culturales renovados. entijuanarte rEVOLUCIONa buscó así desestigmatizar la ciudad, impulsándola a dejar de ser “Tijuana, madre de todos los vicios”, para convertirla en una ciudad recuperada por sus ciudadanos a través del arte. En 2006 el periódico, New York Times afirmaba que Tijuana era una ciudad “Hip&Hot” por su dinámico escenario artístico; el diario LA Times la había ya declarado una “nueva meca del arte” apenas unos años atrás. Revalidando tales aseveraciones mediáticas, entijuanarte 2010 decidió perseguir en su sexta emisión la difícil tarea de devolver a Tijuana ese reconocimiento, ese potencial en su capacidad formadora de creadores y público de alto nivel.
entijuanarte rEVOLUCIONa convocó la in- tervención artística de 22 fachadas de edificios semi-abandonados en la Avenida Revolución y una socio-antropológica en sitio. La decisión de intervenir en el espacio público de una zona comercial-turística que hoy se encuentra en declive, buscó señalar su diferencia de uso entre ciudadanos y visitantes e impulsar la transición vocacional del centro de la ciudad.
Para lograr la consolidación del proceso de sensibilización a las intervenciones artísticas en la vía pública fueron convocados artistas y colectivos de destacadas trayectorias nacionales e internacionales, con sólida presencia nacional: originarios de Tijuana –ciudad anfitriona–; de Zacatecas –Estado invitado–; de ciudades vecinas del sur de California, EE.UU.; de Oaxaca, Monterrey, Distrito Federal y San Luis Potosí –ciudades amigas; así como diversos equipos de estudiantes de arquitectura, artes visuales y diseño. En total participaron cerca de 60 profesionales de las artes plásticas y el diseño de la UABC y CUT Universidad.
Los artistas y proyectos que hicieron de entijuanarte rEVOLUCIONa una realidad tangible fueron: Fidel Figueroa, Luis Carrera-Maul, Colectivo La Piztola, Charles Glaubitz, Pablo Llana, Foi Jiménez, Rubén Gutiérrez Garza, Jesús Ramos, Helio Montiel, Alfredo Gutiérrez, Vero Glezqui, Vanessa García Lembo, Said Dokins, Colectivo HEM, Miguel Ángel Iñiguez, Bárbara Cruz, Luis Manuel Serrano, Elba Roadhs, Oslyn Whizar, Reacciona Tijuana, Equipo entijuanarte rEVOLUCIONa.
Selección descriptiva de seis proyectos Alfredo Gutiérrez / Tijuana: La propuesta de este joven artista consistió en darle rostro a la mítica “Tía Juana”. En la mitología que ronda al nombre de Tijuana hay varias historias, una de ellas explica que el nombre de la ciudad se debe a la contracción de la palabra Tía-Juana –en referencia a una ranchería que existía en la primera mitad del siglo xix en esta región de la cuenca del pacífico. En la intervención de Alfredo Gutiérrez sobre la cortina metálica y fachada del establecimiento “Monte Albán Curios”, el artista se inspiró en los colores, letras y formas del contexto para recrearlo y ofrecer al local una nueva piel.
Pablo Llana / Tijuana: La propuesta de Pablo Llana, artista tijuanense, atiende con ironía y sentido del humor la importancia del cuidado de sí mismo como premisa de existencia y negociación urbana. Dada la condición de Tijuana como ciudad extrema no sólo geográficamente, sino espacio de permisibilidad radical que le ha asignado en herencia una “leyenda negra”, Pablo Llana retoma la figura del villano de la última película de Batman como pretexto para representar la dualidad de la ciudad. La estimulación extrema a través de los excesos y el vicio, así como la ecuanimidad que ha de buscarse a través del amor propio son los dos polos que el artista plantea. Condición dual que se activa al detenerse en una “carita feliz” pintada en el piso de la acera y que dice “Usted está aquí”, punto idóneo para observar las dos cortinas intervenidas.
Luis Carrera-Maul / Zacatecas: La intervención de Luis Carrera-Maul, artista zacatecano, propone un momento de frescura en el agitado transcurrir de la Avenida Revolución. Ante la estridente energía que aún inunda esta parte de la ciudad (mezcla de música en alto volumen proveniente de bares y locales comerciales; juegos de volúmenes y estilos eclécticos de las construcciones; anuncios, mantas y todo tipo de letreros coloridos y luminosos) su propuesta nos invita a entrar en un espacio de silencio y tranquilidad. El mensaje de Carrera-Maul es fundamental, no sólo para la avenida sino de manera general para los tiempos actuales de tensión económica y social: “ARTE ES NATURALEZA”.
Foi Jiménez / Tijuana: La intervención de Foi Jiménez, artista originario de Tijuana, es un gran mural sobre uno de los locales ubicados en esquina en la Avenida Revolución. La propuesta narra- tiva de su intervención pictórico-urbana busca crear nuevos mitos para la ciudad, que literalmente germinen desde su antigua/nueva calle principal. El artista propone en su obra la emergencia de seres fantásticos que habitarán una nueva Tijuana: seres-planta. La naturaleza en una sociedad que renace luego de un turbulento pasado.
Colectivo La Piztola (Roberto, Rosario, Yankel) / Oaxaca: La propuesta del Colectivo La Piztola nos invita a reflexionar sobre lo que hay que “limpiar” y sanear en el entorno colectivo. La Piztola nos incita a identificar cuáles son nuestros íconos, esos emblemas que nos representan; aquellos elementos que nos hacen decir: “Esto es Tijuana”. Los artistas afirman: “Nosotros estamos con ustedes y nos unimos a su causa”. Esta comunión la buscaron mediante puntos de conexión entre Tijuana y Oaxaca, y el más significativo hallazgo-en-comunión, fue la música; específicamente el uso del acordeón. Avanzando por todo el territorio nacional, el colectivo afirma que el acordeón es el punto de encuentro entre pueblos y regiones aparentemente distantes.
Fidel Figueroa / Ciudad de México: Proponiendo una intervención integral al edificio que ocupa el crucero de la Avenida Revolución y la Calle 6ta., la propuesta de Fidel Figueroa es un contundente enunciado para regenerar la ingeniería de la avenida. Al tomar el rastro de las circulaciones de automóviles y transeúntes como principio gráfico y denotarlo en color verde –tonalidad frecuentemente asociada a lo natural y el bienestar–, el artista involucra a todas las personas, locales y extranjeras, que han transitado por este espacio para transformarlos en materia artística. Su acción alude de lleno a los intereses primordiales del proyecto entijuanarte rEVOLUCIONa: ser una apuesta por dignificar, recuperar y apoyar la creatividad y las búsquedas artísticas como medio para encontrar nuevos rumbos ciudadanos en esta avenida.