El primer piloto ganador de la temporada fue Nico Rosberg, que sumado al abandono de Lewis Hamilton, lo puso en una posición más que cómoda en aras de alcanzar el campeonato. Sin embargo, un piloto como Lewis jamás tira la toalla y más aún si cuenta con las mismas armas para desafiar a su compañero de filas. Así el moreno fue por todas y ganó cuatro carreras al hilo, un resultado que lo puso líder en la clasificación por el título. 

Pero Nico también contó con buen arsenal de potencia y desempeño, ecuación que lo colocó segundo en las cuatro carreras dominadas por el inglés. De esta manera, la ventaja de Hamilton sobre Rosberg a la altura de la quinta prueba era de apenas tres puntos. Así fueron a Mónaco, la clásica urbana, y allí triunfó Nico con Lewis al rebufo. El resultado ubicó al teutón como nuevo líder, con una renta de cuatro unidades sobre el británico. Luego del GP principesco vino Canadá, una liza donde los Mercedes no pudieron hacer frente al Red Bull de Daniel Ricciardo, quien ya demostró desde su debut con la principal escuadra de la bebida energética, en Australia, cuales son sus intenciones este curso. 

Pese a la descalificación de Ricciardo en sus predios, su sed de victoria sumado a la recuperación de la escudería austriaca lo han llevado al podio en las tres últimas carreras de temporada, sumando dos terceros (España y Mónaco) y un primero en la séptima prueba del mundial, Canadá. Estos resultados le valen para situarse tercero en la clasificación de pilotos y ser el único, hasta la fecha, que le ha arrebatado un triunfo al dúo de Mercedes.

Sin embargo, el más beneficiado luego de finalizado el GP canadiense es Nico Rosberg, quien con su segundo lugar y el abandono de Lewis –segundo de la temporada– aumentó su ventaja sobre el británico a veintidós puntos. No es definitiva, pero sin lugar a dudas lo pone a soñar con la corona, más aún si tenemos en cuenta que el alemán no se ha bajado del podio en siete salidas, sumando dos victorias y cinco segundos lugares.

Crítico ha sido el inicio de temporada para el campeón defensor, Sebastian Vettel (Red Bull Renault). El joven tetracampeón ha tenido que abandonar dos veces y en otras dos ha conseguido el tercer cajón del podio, muy poco para aspirar a retener una corona que se inclina sobremanera hacia los drivers de Mercedes. De cualquier modo, se espera la reacción de un Vettel que ahora no solo ve angustiado la superioridad de los monoplazas alemanes, sino que también se siente presionado por los resultados de su compañero de filas, quien lo ha vencido en seis de las siete carreras disputadas.

Por otra parte, Ferrari no encuentra el camino. Ni la llegada de Raikkonen le ha puesto presión al español Fernando Alonso, ni los ingenieros de Maranello le han entregado al asturiano un coche lo suficientemente competitivo para plantarles cara a los pilotos de Mercedes y Red Bull. Sin embargo, Fernando ha superado al finlandés en todos los GP celebrados y negoció el tercer cajón del podio en la carrera china. Un discreto resultado que lo ubica cuarto en la clasificación de pilotos, por detrás de la nueva estrella de Red Bull Renault, Daniel Ricciardo, y por delante del campeón defensor Sebastian Vettel.

En cuanto a la carrera de constructores, Mercedes domina sin sombras con una ventaja que supera las cien unidades sobre Red Bull. Ferrari ocupa la tercera casilla, aunque lejos de la escudería austriaca por más de cincuenta puntos. La casa de Maranello es amenazada seriamente por Force India, McLaren y Williams, en ese orden, una batalla por el tercer lugar de un podio final que no tiene nada decidido.