Maldivas. La Flor de las Indias
La historia de las Maldivas se pierde en la antigüedad, siendo ya conocida por algunos escritores clásicos como Pappus de Alejandría o Escolástico el tebano.
La leyenda cuenta que un príncipe y su esposa, la hija del rey de la actual Sri Lanka, pararon en el atolón Raa y fueron invitados a quedarse como gobernantes.
Más tarde el rey Koimala y su esposa se quedaron en Male con el permiso de la tribu Giraavaru, la tribu aborigen del atolón Kaafu. Todavía hoy los Giraavaru son reconocibles por su vestimenta y forma de peinarse, pero quedan solo unos pocos que fueron realojados en Male, ya que su isla se transformó en un resort turístico.
Se han encontrado restos arqueológicos que hacen creer que los Aryan de India y Sri Lanka vivieron en las Maldivas en el 1500 AC, el "elu" una forma arcaica de Sinhala (hablado en Sri Lanka) muestra grandes similitudes con el Dhivehi, idioma actual del archipiélago. En el siglo I d.c., la poblaban cingaleses procedentes de la isla de Ceilán, actual Sri Lanka, y practicantes del budismo, que difundieron entre los nativos. Los maldivos, excelentes navegantes y pescadores, mantuvieron estrecho contacto con el continente asiático. De él recibieron, en el siglo XII, la influencia árabe y musulmana.
Los colonizadores europeos llegaron temprano a las Maldivas, escala obligada en la ruta al Lejano Oriente. Pero la tenaz resistencia de los nativos a la dominación extranjera forzó a los portugueses a buscar otros puertos y se establecieron en Goa, en la costa occidental de la India. Con el tiempo, el sultán de las Maldivas aceptó el protectorado inglés en 1887. Al no ser muy atractiva económicamente por su producción de aceite de coco, pesca y el cultivo de frutas tropicales, la importancia esencial de este territorio era su posición estratégica la cual aumentó con la apertura del Canal de Suez. Los ingleses no mostraron ningún interés por la población local, lo cual aumentó la rebeldía contra el sultán.
En 1952 una insurrección popular depuso al monarca y proclamó la república. Las tropas británicas intervinieron para "restaurar el orden" y repusieron al sultán en el trono, dos años después. En 1957 Gran Bretaña solicitó ampliar la base de Gan, la propuesta despertó gran oposición y el primer ministro pro británico Ibrahim Alí Didi fue obligado a dimitir. Su sucesor, Amir Ibrahin Nasir, rechazó la oferta, considerando que ésta violaría la neutralidad del país.
En 1959 la rebelión volvió a estallar en las islas del sur, que decidieron emanciparse con el nombre de República de Suvadiva. La situación duro muy poco y en 1960 los veinte mil republicanos de Suvadiva fueron reincorporados al sultanado. Pero el Imperio Británico estaba llegando a su fin. En la década del 60 resolvió retirarse de sus posiciones estratégicas "al este de Suez", asegurándose que sus intereses seguirían siendo defendidos por los Estados Unidos.
En1965 las Maldivas lograron la independencia, inmediatamente reconocida por la ONU.
El sultán no pudo sobrevivir a la carencia de apoyo externo y en 1968 un plebiscito restituyó la república, asumiendo la presidencia el hasta entonces Primer Ministro, Amir Ibrahim Nasir. En marzo de 1975, el presidente Nasir anunció el descubrimiento de un complot dirigido por el primer ministro Ahmed Zaki, quien fue recluido en un islote desértico junto con algunos de sus partidarios. La oferta hecha por Nasir de alquilar las instalaciones vacías de Gan a empresas trasnacionales, fue rechazada por el Majlis (órgano legislativo). Sabiéndose en minoría, Nasir culminó su período en 1978 sin postularse para un tercer mandato presidencial. El Majlis designó en su lugar a Maumoon Gayoom, un intelectual islámico de prestigio internacional.
El nuevo presidente se preocupó por la situación de los pescadores que atravesaban momentos difíciles, y creó una corporación pesquera estatal, que controla el principal recurso del país desde la captura hasta la comercialización. Gayoom fundó escuelas en los 19 atolones principales y abrió el archipiélago al exterior, viajando personalmente a Europa, el Medio Oriente y participando en la VI Cumbre de los No Alineados.
El aumento de 37% que se registró en el turismo entre 1984 y 1985 coincidió con el virtual desmantelamiento de los astilleros maldivianos como consecuencia de la reducción de las importaciones y la pérdida de mercados internacionales. Durante 1986, el turismo mantuvo su importancia económica, generando 42 millones de dólares anuales, cerca de 17% del PIB. Estas cifras se modificaron recientemente: en 1991 Maldivas recibió a 200.000 turistas, que dejaron 80 millones de dólares. La pesca, no obstante, continuó siendo la principal actividad, que emplea a 45% de la mano de obra y genera 24% del PIB. Los ingresos por turismo -113 millones de dólares en 1994- apoyaron la reactivación económica del archipiélago en 1995.
Desde la independencia, la política del gobierno ha estado encaminada a la preservación del medio natural y a la potenciación del turismo como principal fuente de entrada de divisas. Así, en 1987 se promulgaron leyes medioambientales y de control del desarrollo turístico, por las que sólo las islas destinadas a este sector podían albergar hoteles. Estas leyes tuvieron su continuidad en otras de 1998 que favorecieron la formación de los trabajadores del sector turístico y crearon nuevos puestos de trabajo.