Las principales marcas del mundo continúan desarrollando vehículos híbridos, de diferentes configuraciones y tecnologías. La francesa Peugeot presentó el pasado año varios prototipos muy bien recibidos por la crítica, y ahora da otra vuelta a la tuerca con la presentación del HX1, un prototipo movido por un motor diesel y otro eléctrico.

Esta es una configuración de elevada eficiencia, toda vez que aprovecha la alta autonomía que ofrecen los motores diesel para lograr niveles de consumo de combustibles mínimos y la combina con las bondades de la electricidad. El nuevo vehículo de la marca del León mide 4.97 m de largo, 1.99 m de ancho y 1.37 m de alto. Peugeot lo define como un monovolumen, aunque su carrocería es muy baja. Tiene cuatro puertas laterales con un singular sistema de apertura, que Peugeot denomina de compás. Las puertas delanteras se abren hacia arriba y adelante; mientras las posteriores hacia arriba y atrás. Puede llevar hasta seis ocupantes, gracias a sus tres filas de asientos individuales: el mismo sistema de asientos que Peugeot empleó en el prototipo HR1. La carrocería del HX1 tiene una serie de elementos que cambian la aerodinámica al rebasar los 100 km/h: unas aletas en las llantas cierran su cara externa asemejándolas a un disco; en la parte posterior de la carrocería hay un alerón, se emplean cámaras en lugar de retrovisores y dos aletas a ambos lados. Todos estos elementos buscan mejorar la aerodinámica a altas velocidades para dejar el Cx en 0.28, una cifra solo asequible a autos deportivos unos años atrás. Lo más interesante es, sin dudas, el sistema de propulsión híbrido, compuesto por un motor eléctrico que mueve las ruedas traseras y uno diesel mueve las delanteras, con la opción de no funcionar al unísono. El motor diesel es un cuatro cilindros de 2.2 litros de cilindrada y entrega 204 CV de potencia. El motor eléctrico, por su parte, tiene 95 CV de potencia, para un total de 299 CV. El Peugeot HX1 cuenta con una batería de iones de litio, la cual se puede recargar desde una toma de corriente de 220 V, siendo el primer auto de Peugeot en ofrecer esta opción. Con todo este arsenal a su disposición el nuevo prototipo de Peugeot logra un rendimiento de 3.2 l/100 km, una cota bien contenida que muchos quisiéramos tener en nuestros autos al entrar en un servicentro.