LOS PRIMEROS LINCOLN DE POSGUERRA VIERON LA LUZ A PRINCIPIOS DE 1948. PERO LAS PRIMERAS VERSIONES REALMENTE NUEVAS SALIERON AL MERCADO EN 1952, CON UN CAMBIO DRAMÁTICO EN SU APARIENCIA, SIN EMBARGO NO SE PRESENTÓ UNA SERIE CONTINENTAL ESE AÑO. LOS DOS MODELOS DE LINCOLN ESTABAN AGRUPADOS EN DOS SERIES PRINCIPALES: COSMOPOLITAN Y CAPRI, NO SERÍA HASTA 1956 QUE LOS NUEVOS CONTINENTAL ESTARÍAN LISTOS PARA EL MERCADO, CON LA NUEVA SERIE MARK II: NUESTRO PROTAGONISTA DE HOY.

Todas las series de Lincoln fueron rediseñadas para 1956. Los nuevos modelos se basaron en los concept car XL-500 y XM 800, los cuales venían en estudio desde algunos años atrás, pero lo más importante en esta marca ese año fue la reaparición de la serie Continental, con su modelo Mark II. Como su predecesor -el Mark I- este nuevo Continental se convirtió de inmediato en un clásico, su debut el 6 de octubre de 1955 en el París Auto Show le dio de inmediato el protagonismo necesario para cubrir la atención del público y crítica.

Su estilo inconfundible de líneas modernas rompía con el resto de los productos Lincoln. El largo capó, poco uso del cromo, y unas proporciones cercanas a la perfección permitían al Mark II mostrar al mundo uno de los autos norteamericanos mejor diseñados de los años cincuenta. Sin utilizar ningún falso recurso para explotar la imagen del modelo anterior este nuevo Continental logró por méritos propios ser considerado un clásico instantáneamente. Para añadir mayor misticismo a este auto el destino le reservaría la breve existencia de dos años. El próximo 1957 produciría prácticamente el mismo auto, aunque se incluiría un cupé convertible de dos puertas del cual se producirían solamente dos unidades, y para 1958 saldría el Continental Mark III.

La exclusividad del Mark II se completaba con un equipamiento que sólo dejaba como opcional el aire acondicionado. El auto venía equipado con una transmisión automática turbo drive, dirección asistida, asientos de ajustes eléctricos, radio, calefacción, y las muy en moda bandas blancas para los neumáticos. Para mover sus casi cinco toneladas este auto se disponía de un motor V8 de válvulas a la cabeza, 368 pulgadas cúbicas de desplazamiento, y carburador Carter de cuatro venturi capaz de entregar una potencia de 300 H. P. a 4600 R. P. M. A pesar de tanta belleza y sólida mecánica el Mark II no tuvo mejor suerte que su antecesor. Aun cuando en un inicio existieron listas de espera de pedidos, al avanzar el año se hizo evidente la baja demanda de un auto con una imagen adelantada a su época.

El precio de un Continental Mark II llegó rondar los 10.000 dólares, sin dudas era un auto caro, pero la baja serie de apenas 2550 unidades fabricadas ese primer año de 1956 hacía esperar mejores resultados. El próximo año no sería mejor y se produjeron apenas 444 unidades del cupé techo duro y las dos unidades mencionadas del convertible. Sin embargo, la influencia del Continental sobrepasó su tiempo y dejó su huella en muchos productos de Ford Motor Co. en los próximos diez años. Para 1969 una nueva versión del Continental contó con gran éxito de ventas, pero esa ya sería otra historia.