Algunas especias y Hierbas aromáticas
Especias caribeñas

En Latinoamérica, muchos platos no se pueden concebir sin el toque distintivo de las especias. Pimienta, chile, nuez moscada, salvia, canela o clavo han enriquecido, durante años, los alimentos más sabrosos de la gastronomía latinoamericana y aunque, muchas de las especias no son originarias de estos países, su cultura y tradición han hecho de ellas excelentes condimentos muy preciados, no sólo en la cocina sino también en el ámbito medicinal.

Tesoros en la antigüedad 1492. Lo que pretendía Cristóbal Colón era encontrar nuevos caminos hacia las Indias, las llamadas islas Malucas, Molucas o el Noluco, donde esperaba llegar por Occidente contando con la idea de que la Tierra era redonda. Cinco semanas fueron las que tardó en alcanzar la isla de Guanahaní, una de las islas cercanas a las Bahamas, Haití y Cuba, con lo que creyó que había descubierto una nueva ruta de la Especiería. Todo un cúmulo de sorpresas y errores que le conducirían a liderar la empresa más afortunada y gloriosa de la Historia: descubrir, por equivocación, el Nuevo Mundo.

Durante un segundo viaje, Colón se embarcó, de nuevo, con el objetivo de encontrar oro y especias orientales, pero, por el contrario descubrió, la pimienta de Jamaica y la vainilla. Clavo, nuez moscada y canela eran los preciados tesoros que allí se cultivaban y cada país luchaba por obtener el monopolio del tráfico de especias, del que sabían era una fuente segura de riqueza. Pero ¿de donde venía esta especial atracción hacia estos productos de apariencia tan frágil? Muchas de ellas servían como estimulantes, otras se empleaban con fines terapéuticos y farmacéuticos y otras en aromáticos perfumes, embriagadores inciensos o en cautivadores aceites y jabones.

Nuez moscada, una tradición muy popular Cuenta la tradición popular que un médico que vivía en la India importó, por primera vez en 1843, la nuez moscada para mejorar y potenciar el sabor del ponche Planter´s Punch.. Desde entonces, se cultiva en Granada una nuez moscada de gran calidad cuyo sabor se caracteriza por ser uno de los más aromáticos, dulces y cálidos. Los portugueses mantuvieron, por mucho tiempo, el secreto de donde se cultivaba esta especia hasta que los holandeses les expulsaron de la Isla de las Especias. Una de sus particularidades es que las malas hierbas nunca crecen a sus pies y según las creencias más arraigadas, es un árbol al que le "encanta" el olor del mar. La delicada flor del moscadero produce un fruto amarillo, redondo y muy similar al melocotón. Cuando madura se parte en dos y aparece una corteza marrón oscura cubierta por un arilo en forma de red y con un color rojo muy intenso. La cáscara dura contiene una semilla que es lo que se conoce como nuez moscada. El arilo o membrana roja se llama macis, que se emplea como especia y además es muy apreciada en la industria farmacéutica.

Actualmente, el uso culinario de esta especia es muy apreciado y con ella se pueden preparar exquisitos platos tanto salados como dulces.

Échale un poco de pimienta a la vida Su aroma es agradable, su fragancia especial y su sabor picante. La pimienta es otra gran protagonista de la gastronomía latinoamericana. La tradición histórica de la pimienta ha alimentado, igualmente, un gran número de relatos y creencias a lo largo de los siglos alzándola, durante muchos años, en una valiosa moneda de cambio protagonista de los más ambiciosos negocios de la Antigüedad. Si hacemos un rápido repaso a la historia observamos que en varios textos sánscritos se menciona el uso de la pimienta en los pueblos de la India y se cree que, entre el siglo VI ó V a J.C se introdujo en Europa.

La pimienta de Jamaica es una variedad que se cultiva en México, Guatemala, Belice y Jamaica y según relata la historia, no era usada ni para fines gastronómicos ni medicinales. Los indios mayas usaban la pimienta de Jamaica para embalsamar a sus muertos antes de que los españoles llegasen a las Indias Occidentales.

Olor a mar Tradición popular y gastronomía se dan la mano en el apasionante mundo de las especias. Los clavos de especia están, igualmente, ligados a la cultura y creencias populares ya que cuentan que la gente de las Molucas o Islas de las Especias plantaban un clavo para celebrar el nacimiento de cada niño. Si el árbol florecía, era un buen presagio para el recién nacido, a quien se ponía un collar de estas especias para protegerlo contra los malos espíritus y las enfermedades. El chile es la estrella en la cocina mexicana, al igual que en muchos platos del Caribe y Sudamérica. El sabor picante del chile revolucionó la cocina de las regiones tropicales acostumbradas a los alimentos sosos como la mandioca en América del Sur o las alubias y frijoles en México.

La verdadera vainilla es muy fragante, y su aroma ha sido descrito por muchos como sofisticado y evocador. Su sabor se corresponde con su aroma, con una dulzura suave y perfumada. El fruto de la granada ha servido de inspiración a muchos románticos quienes describen, en sus leyendas, que, en realidad, era la tentadora manzana del Jardín del Edén.

La cultura de las especias Durante siglos, las especias se han utilizado en muchas culturas y civilizaciones. La Ruta de las Especias sirvió de punto de encuentro y unión de los más variados pueblos y culturas que hicieron de ellas codiciados tesoros capaces de competir con los más caros metales y piedras preciosas.