La gastronomía contemporánea se ha propuesto cambiar radicalmente sus fuentes de inspiración. Para crear en la cocina ahora se mira al pasado, a los clásicos, a la génesis de los sabores.  Y es en esta mirada pretérita donde nacen los platos más auténticos, los más sinceros, los que sintetizan todo el patrimonio gastronómico resultante del encuentro entre el viejo y el nuevo mundo.

Fe de ello puede dar la ciudad mexicana de Guanajuato, elegida como capital iberoamericana de la cultura gastronómica 2015. Esta distinción —que por primera vez se entrega a un destino latinoamericano— reconoce el rescate de ingredientes prehispánicos, la vocación gastronómica heredada de nuestros antepasados, la fusión de la comida tradicional con  las adecuaciones de la alta cocina mundial.

Excelencias gourmet se suma a la celebración de este nombramiento, que pone en valor la cocina tradicional, su historia y carácter simbólico, porque  como mismo se mezclaron sangres y pieles, también lo hicieron las sazones. A fin de cuentas, la gastronomía continúa siendo uno de los mejores vehículos de comunicación entre los pueblos.