La nueva excavadora hidraúlica Doosan DX300LC tiene todas las ventajas de los modelos previos y ahora ofrece un nuevo valor agregado al operador. Según sus fabricantes, el equipo fue fabricado bajo el concepto de brindar “un rendimiento óptimo al usuario final”. Esta fórmula se traduce en controles ergonómicos mejorados, menos consumo de combustible gracias a una optimización electrónica del sistema hidráulico y más confort debido a la posibilidad de obtener excelentes vistas para el operador que trabaje en el vehículo. Además, cuenta con la nueva generación de motores Doosan y tiene incorporados materiales de alta resistencia combinados con novedosos métodos de análisis de estrés, cualidad que lidera a un incremento de su vida útil y reduce los costos de operación. El motor es un Common Rail con inyección directa y control electrónico de cuatro válvulas por cilindro. Los inyectores son verticales y está equipado con turbocarga y un intercooler aire-aire. Por otra parte, esta excavadora cuenta con un limpiador de aire de dos elementos prefiltrados que incorporan la auto-evacuación de polvo, lo que permite una optimización del sistema y la dota de mayor versatilidad pues puede adaptarse a cualquier entorno de trabajo. Así, la DX300LC se convierte en un equipo multipropósitos que puede ser utilizada para excavar, perforar, alzar o cargar materiales de todo tipo. Igualmente, el sistema hidráulico del vehículo permite realizar operaciones independientes o combinadas con un alcance máximo de 1751 metros cúbicos y un peso máximo de 64_594 libras. Como equipamiento adicional se le puede instalar un mecanismo de aviso de sobrecarga, asientos con suspensión de aire, reproductor MP3, y tuberías para perforaciones y agarres. Con todas estas novedades, la nueva Doosan DX300LC aparece en estos momentos como la excavadora más segura, operable y duradera del mercado.