El programa de alfabetización YO SÍ PUEDO, ideado por especialistas cubanos, ha ayudado a aprender a leer y escribir a millones de personas en varios países del mundo.
La colaboración incluye múltiples esferas como la alfabetización y otros programas educativos.

Sustentada en las ideas de justicia y solidaridad entre los pueblos, el ALBA propugna la integración de Latinoamérica y el Caribe y ejecuta importantes programas en beneficio de los más desposeídos

La Alternativa Bolivariana para América Latina y el Caribe (ALBA) es una propuesta de integración diferente, que hace énfasis en la lucha contra la pobreza y la exclusión social y expresa los intereses de los pueblos latinoamericanos.

Tal y como lo concibió el presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Hugo Chávez Frías, y fue hecho público en el año 2001, el ALBA constituye una herramienta integradora que se presenta a las naciones latinoamericanas y caribeñas como antídoto ante el Área de Libre Comercio para las Américas (ALCA), defendida por Estados Unidos.

Constituye una vía para lograr acuerdos de integración en función de alcanzar un desarrollo endógeno nacional y regional que erradique la pobreza, corrija las desigualdades sociales y asegure una creciente calidad de vida para los pueblos.

De hecho, se suma al despertar de la conciencia que se expresa en la emergencia de un nuevo liderazgo político, económico y social en América Latina y El Caribe.

El nacimiento y paulatina consolidación de la Revolución Bolivariana de Venezuela ha dado la posibilidad a ese estado sudamericano, junto a Cuba de demostrar cuánto se puede hacer.

En este contexto, ocurrió hace unos meses el triunfo electoral de Evo Morales en Bolivia, un país que se ha insertado en proyectos que favorecen tanto a su pueblo como a otros del área.

Al referirnos a los primeros programas surgidos como antecedentes del ALBA hay que destacar la creación en Cuba de la Escuela Latinoamericana de Medicina y de la Escuela Internacional de Deportes y Educación Física, con miles de estudiantes becados sin costo para sus países.

En el 2005 se hizo público el propósito de formar 100 000 médicos en diez años, como parte del proyecto Esperanza Social, patrocinado por Cuba y Venezuela.

Igualmente se desarrolla la Operación Milagro, que ha devuelto la visión a miles de personas de distintos pueblos, que han sido operados por oftalmólogos cubanos. Y actualmente 70 000 médicos de la Isla prestan colaboración en Venezuela, Bolivia, y otras naciones necesitadas.

Hace dos años, en La Habana, los Presidentes Fidel Castro y Hugo Chávez pusieron en marcha la primera experiencia concreta de la Alternativa Bolivariana para las Américas (ALBA), que incluyó la eliminación de aranceles o cualquier otro tipo de barrera arancelaria aplicable a las respectivas importaciones entre los dos estados y la exención de los impuestos sobre utilidades a toda inversión estatal y de empresas mixtas y hasta de capital privado durante el período de recuperación de la inversión.

Tratos preferenciales a los barcos con banderas de los dos países y facilidades a las líneas aéreas respectivas en su labor de transporte de pasajeros y carga, así como en la utilización de los servicios aeroportuarios, y precios de garantía para el pago del petróleo forman parte del entendimiento.

La nación cubana eliminó cualquier restricción a las posibles inversiones estatales venezolanas en la Isla, permitió que exportaciones a Venezuela sean pagadas en productos de esa nación y confirmó la continuación del servicio de cerca de 20 000 médicos y paramédicos cubanos en el referido país.

Caracas ofreció a La Habana financiamiento de proyectos productivos y de infraestructura para sectores como el energético, vialidad, desarrollo portuario y otros, así como acuerdos especiales en materia de telecomunicaciones.

Otros aspectos incluyen el aumento del intercambio comercial, creación de nuevos empleos en Venezuela por la colocación en el mercado cubano de productos fabricados por empresas de ese país sudamericano, la ayuda de Cuba a la creación de Centros de Diagnóstico Integral y salas de rehabilitación y el uso de un método cubano titulado Yo sí puedo en la eliminación del analfabetismo.

Este tipo de colaboración entre dos países latinoamericanos sirvió de punto de partida para otros empeños patrocinados bilateralmente, como la conformación de Petrocaribe con la participación de los estados del Caribe Oriental, favorecidos por el suministro del crudo en condiciones favorables de pago.