Una inédita exhibición en la histórica Plaza de Armas y dos fines de semana con actividad en el emblemático circuito de la Piragua del Malecón iniciaron por todo lo alto las acciones automovilísticas en el verano 2016.

En la explanada de adoquines ubicada frente al hotel Santa Isabel, en el corazón del casco histórico, el club de Autos Deportivos de Cuba mostró los atributos de algunos de sus carros, gracias a una provechosa relación con la Oficina del Historiador de la Ciudad, específicamente  a través del Proyecto Cultural “Rutas y Andares”.

Armando Miari de Casas, presidente del club, dijo a Excelencias del Motor que se piensa mantener una regularidad en el emblemático sitio, así  los aficionados al ramo, nacionales y extranjeros, pueden apreciar la belleza y el buen estado de conservación de muchos de los autos deportivos que circulan por la urbe.

“También queremos utilizar la aledaña Biblioteca Provincial Rubén Martínez Villena para realizar conferencias, exposiciones de fotografías y colecciones relacionadas con el mundo del motor”, adelantó Miari de Casas, propietario de un Austin Healey de 1958.

Quienes se citaron en la Plaza de Armas el domingo 17 de julio pudieron apreciar la majestuosidad de un Austin Halley 1959, un Nash Metropolitan 1959, un Mazda Miata 1994 y un Mazda 2010, solo una muestra de los alrededor  de 50 carros que integran el club de Autos Deportivos.

Pero los niveles de adrenalina subieron en la Piragua durante las actividades por el inicio oficial del verano el sábado 2 de julio, con el protagonismo del club Amigos del Motor y de otros clubes invitados como: Fiat, V8, 360 y Autos Rusos.  También se hizo sentir el taller Triple A al ofrecer un espectáculo de audioshow sobre ruedas.

El reencuentro de las actividades con motor y el Instituto Nacional de Deportes, Educación Física y Recreación emocionó al público en el circuito de las grandes carreras de la pasada década del 50, con las pruebas de aceleración que regalaron varios de los carros más veloces de La Habana.

El "Misil del Cerro", un Chevrolet 1956 propiedad de Eduardo Hernández, fue una de las sensaciones de la jornada, sobre todo por el esperado duelo con un auto moderno: el BMW del piloto conocido como el "Máscara".

Además de estas pruebas, los asistentes disfrutaron de la pericia de varios choferes en el examen de habilidades, acciones que preparan a quienes tienen el volante en las manos para enfrentar cualquier adversidad en las vías.

El fin de semana siguiente el Malecón volvió a reunir a muchos bólidos, equipados con motor V8, para probar que a pesar de los años los clásicos pueden “volar bajito”, como el verano, que ya pisó el acelerador.


Summer Floors the Accelerator

An unprecedented show at the historic Arms Square and two weekends jam-packed with to-dos at the emblematic La Piragua circuit in Havana’s Malecon kicked off the 2016 summer motoring actions in a big way.

Before the Santa Isabel Hotel, Cuba’s Sports Cars Club took the first steps in a relationship with the City Historian’s Office, by means of Rutas y Andares Cultural Project. On the other hand, the heat was on at La Piragua with the clubs attending the show: Amigos del Motor y Fiat, V8, 360 and Autos Rusos. Triple A workshop got itself a good name with an audio show on wheels.