Una antigua vía férrea de línea estrecha, una población cercana, y una playa sin acceso por carretera, unidos al deseo de alcanzarla por algún medio, hicieron posible que naciera en el municipio villaclareño de Quemado de Güines, Cuba, el “Karahata”, nombre utilitario que devino bautizo para una guagua sobre rieles, de creación nacional. Un chasis soviético de dos ejes, con motor de cuatro cilindros, sirve de base a una carrocería criolla, similar a la diseñada para los modelos de ómnibus GIRON, conformando así un ejemplar único dentro del catálogo ferroviario nacional.