Oldsmobile, Ransom Olds y una marca ya desaparecida
Adiós a los automóviles Oldsmobile. La marca más antigua de los Estados Unidos ha muerto en medio de la actual crisis económica mundial. Terriblemente afectada por la quiebra, su casa matriz: General Motors (donde convivió sus últimos 95 años) decidió liquidarla en 2004. Triste fin para la gran marca fundada por Ransom Olds.
Cada Oldsmobile que vea rodando, es una futura pieza de museo. Una emblemática marca que merece su puesto de honor en la Historia del Automóvil. Fundada por Ransom Eli Olds en 1897, se mantuvo fabricando autos durante 107 años. La quiebra que asoló a General Motors, causó sensibles bajas, entre ellas Oldsmobile. Se siente porque Oldsmobile no fue una de las marcas “del montón”. El espíritu creativo que le imprimió Olds desde su nacimiento, le acompañó toda la vida. Baste decir que fue Oldsmobile la primera marca que llevó a Estados Unidos el cambio automático, la tracción delantera, la mecánica diesel, el airbag, los motores de 8 cilindros en ”V” con válvulas en cabeza… en fin, un automóvil que hizo historia en el país del automóvil. La historia de la marca Oldsmobile es la misma de la industria automotriz de Estados Unidos. Un desconocido innovador, capaz de capitalizar su espíritu de empresario emprendedor, desarrolla un vehículo al cual bautiza con su propio apellido. Y algún desvergonzado banquero, rico por demás, que se aprovecha del poco conocimiento financiero del creador para arrebatarle el negocio, aunque dejándole su nombre como símbolo de irrespetuosa e hipócrita gratitud. RANSOM OLDS Nacido en Geneve (1864), un pueblito de Ohio, llegó a los 16 años a la ciudad de Lansing, capital del estado de Michigan, en compañía de sus padres y su hermano mayor. A los 21 años le compró a su hermano la parte del negocio familiar por 1000 dólares y en 1885 comenzó a dirigir su empresa: “Pliny Fisk Olds and Son”. Al año siguiente empezó a trabajar con motores de vapor y en 1887 construyó su primer automóvil. Era un carruaje triciclo con uno de sus motores de vapor y novedoso sistema de propulsión. Rápidamente fue conocido por su artilugio que alcanzaba 29 km/h. En 1893 perfeccionó su “auto” al colocar el motor a un cuadriciclo. Este vehículo lo compró un rico rajá de la India, con vistas a llevárselo a su país ¿Fue entonces Olds el primer exportador de autos americanos? Lo cierto es que nunca el auto de Olds llegó a la India, el buque que lo transportaba se hundió y así la primera exportación automovilística de Estados Unidos fue a parar al fondo del mar. Ransom continuó con sus planes de fabricar vehículos automotores. Tras conocer los empeños de Daimler, Benz y Diesel, centró su esfuerzo en un motor de combustión interna. En 1896 construyó un motor de gasolina. Su negocio se llamó entonces “Olds Gasoline Engine Works”. En su auto se paseaba por las calles de Lansing. Los empresarios locales pronto quisieron ser parte del negocio de Olds y así pudo conseguir unos 50 000 dólares para refundar su empresa: “Olds Motors Vehicle Company”. Su objetivo: fabricar un automóvil tan perfecto como sea posible. Así vendió los primeros cuatro, a razón de 1000 dólares cada uno.
SAMUEL LATTA SMITH Conocido como el barón de la madera y del cobre, Smith se asoció con Olds para aportar 500 000 dólares a una nueva compañía “Olds Motors Works”. Quedó constituida el 8 de mayo de 1899 y se trasladó a Detroit. Fue la primera firma dedicada exclusivamente a la fabricación de automóviles en Estados Unidos. Los autos se llamaban “Olds automobiles”, pero en 1900 se convocó a un concurso para darle nombre a los vehículos que se pondrían a disposición del público. Alguien propuso llamarlos Oldsmobile, nombre con el cual se dio a conocer la marca. Los éxitos de Ransom Olds al frente de la constructora de automóviles Oldsmobile, fueron históricos. Baste decir que en tiempos tan lejanos como 1904, se vendieron casi 5 500 unidades del modelo Curved Dash. Y es que éste fue el primer auto fabricado en serie, en una línea de ensamblaje (invento común que erróneamente se le atribuye solo a Henry Ford). Ningún competidor podía siquiera acercarse a tales cifras. La marca Oldsmobile llegó a ser entonces la más importante de Estados Unidos. Las ideas siempre innovadoras de Ransom) y su propósito de fabricar cada día un auto más fuerte, fiable y barato, fueron el camino del éxito de la compañía. Pero, tal vez cegado por los triunfos de Oldsmobile, Smith “chocó” con Ransom. Otro de los “padres” del automóvil americano: Henry Leland, entonces ingeniero de Oldsmobile, propuso su motor: más ligero y potente de los que se usaban. Olds se opuso porque elevaría el precio del auto. Smith cerró filas con Leland y Olds se vio obligado a abandonar la fábrica que había fundado.
EL FIN DE ESTA HISTORIA Ransom Eli Olds fundó una nueva empresa automovilística: REO, acrónimo de sus nombres y apellido (realmente se llamó REO Motor Car Company). La compañía REO produjo automóviles de turismo hasta 1935 y camiones hasta 1974. Henry Leland también se fue de Oldsmobile y fundó su propia marca: Cadillac, para fabricar grandes y lujosos sedanes. La gran corporación General Motors, ávida de nuevas marcas, en 1909 adquirió Cadillac, aunque sin Leland. El incansable espíritu emprendedor de Leland, conocedor de que cualquier sociedad en expansión necesita autos de lujo, fundó Lincoln, que finalmente fue a parar a manos de Ford. ¿Qué hizo Smith con Oldsmobile? La salida de Ransom de Oldsmobile no se apreció de inmediato. Un año después, en 1905, Oldsmobile todavía produjo unos 6 500 vehículos, al tiempo que la nueva REO solamente llegó a 846. Tres años después, en 1908, la decoración industrial había cambiado completamente: REO ya vendía 4a105 automóviles mientras que Oldsmobile apenas llegaba a 1 055 unidades. El fracaso de Smith lo sacó del juego y en 1909 terminó por vender la marca Oldsmobile a la General Motors. Oldsmobile con General Motors floreció. El Limited Touring (1910) fue la nueva insignia. Lo caracterizaban sus clásicas llantas blancas de 42 pulgadas. Tenía algún extra, como reloj y velocímetro. Un Límited ganó la carrera al famoso tren 20th Century Limited, hazaña que inmortalizó en su cuadro “Setting the Pace”de Wiliam Hardner Foster. La marca se convirtió en el auto experimental e innovador que tanto agrada al amante del automóvil. Consiguió récords de ventas, fabricó modelos que hoy son antológicos, hasta que desapareció en 2004. Pero esa es ya otra Leyenda.