Rubén Blades: Visión de un nuevo siglo
Panamá busca darle nuevos aires al desarrollo turístico, con la reestructuración del Instituto Panameño de Turismo (IPAT), en virtud del Decreto Ley No.4 del 27 de febrero de 2008, que está en consonancia con las tendencias modernas que deben primar en este sector económico del país.
«El IPAT no es un Ministerio, no es una entidad burocrática, es una entidad que produce ingresos… Se puede ver al IPAT como algo similar a la Autoridad del Canal», aseguró el ministro panameño de Turismo, el Sr. Rubén Blades, en una tertulia efectuada el pasado marzo en el Salón de Conferencias del Consejo Nacional de Periodismo de Panamá (CNP).
Blades, reconocido cantautor, fue nombrado por el presidente Martín Torrijos al frente del sector turístico panameño, y desde entonces ha desarrollado una fuerte labor en aras de reposicionar este, tanto a nivel de inversiones, infraestructura y capacitación en lo interno, como en una nueva imagen hacia lo externo. «Nosotros teníamos una administración completamente basada en el siglo XX, o sea en los años 60, ¿cómo vamos nosotros a lograr metas del siglo XXI? Entonces tuvimos un problema con eso, teníamos que crear la Ley por eso también, para darle apoyo», aseguró.
Al respecto, se está trabajando y discutiendo con los diferentes sectores la propuesta del Plan Maestro de Desarrollo Turístico, en virtud del Decreto Ley No.4 del 27 de febrero de 2008, «una nueva ley que actualiza la actividad turística y permite un desarrollo sostenible en las áreas que son vitales para garantizar el crecimineto con eficiencia y calidad de los servicios». La nueva Ley crea una oficina permanente para el Plan Maestro de desarrollo turístico, lo cual implica que ahora se pueden evaluar las metas y además que el siguiente gobierno va a seguir la dirección actual del plan.
Al respecto, el ministro Blades explicó que «el otro plan, del 92 al 2002, no tuvo la posibilidad de que fuera evaluado y fueran evaluadas las metas. Las metas pueden ser muy nobles y muy grandes, pero nadie sabía si se cumplían y qué funcionaba y qué no. ¿Por qué?. Porque no había una oficina permanente. Además, un plan maestro implica, en este caso diez años, que el siguiente gobierno va seguir la dirección del plan anterior, o sea de lo que se hizo hasta ese momento».
Con respecto a las campañas internacionales de promoción, enfatizó en que «destinaremos 39,5 millones de dólares en cinco años para la promoción, el IPAT es quien determina para dónde va el gasto y por qué. Es una forma de evaluar el desempeño de la campaña. A su vez, separamos la campaña interna de la externa, para no tener todo en una sola compañía».
Sobre los desafíos actuales, mencionó la necesidad de crear infraestructuras aeroportuarias para el acceso de más viajeros, mejorar la promoción de los diferentes destinos, la capacitación de todo el personal para ocupar los nuevos empleos que se crearán, impedir que áreas de atracción turística se vean afectadas por la actividad de explotación minera, así como la inclusión de los Kunas y los Emberá en las capacitaciones y entornos de estos proyectos.