La vida es muy rápida o muy lenta. Es cierto que en esta cuestión sí depende totalmente de lo que ocurra, de colores y de sabores. Los viajes son así como la vida, rápidos o lentos, según sea, el de ida o el de vuelta. Porque la ilusión hace que todo sea como un torbellino y así transcurren los momentos mas felices, como un sueño que se acaba antes casi de comenzar. Y si la vida es como un espejismo, qué no será una semana en el paraíso.

La vida es muy rápida o muy lenta. Es cierto que en esta cuestión sí depende totalmente de lo que ocurra, de colores y de sabores.

Los viajes son así como la vida, rápidos o lentos, según sea, el de ida o el de vuelta.

Porque la ilusión hace que todo sea como un torbellino y así transcurren los momentos mas felices, como un sueño que se acaba antes casi de comenzar.

Y si la vida es como un espejismo, qué no será una semana en el paraíso.

Por este motivo, porque somos conscientes de que los lugares de los que os hablamos son maravillosos, tienen que ir con instrucciones de cómo no perderse ni un minuto, para disfrutarlos sin parpadear.

El porqué de esta filosofía, no lo sé. Quizás porque noviembre es un mes algo melancólico o inteligente, en el que lo fugaz de todo te da por otro lado la fuerza de vivir y conocer.

Abre los ojos, mira alrededor y déjate seducir por lo desconocido. Con excelencias tienes la llave.