El Museo Nacional del Transporte es un sitio de referencia para los amantes de los autos clásicos y antiguos.

Un variado mosaico de autos antiguos de las más diversas marcas y estilos conforma el paisaje habitual de las calles cubanas. La ciudad de Santiago de Cuba no permanece ajena a este transcurrir de la memoria, pero va más allá de la cotidianidad y atesora en un museo relevantes ejemplares del patrimonio automotor.

La propuesta del Museo Nacional del Transporte es viajar en una máquina del tiempo. Así, puede aribar en un Ford de 1912 a la época de las bisabuelas o al año 1996 en una Limousina Volvo, tan moderna, actual y exclusiva, que puede dejar mudo de asombro al visitante con expectativas de encontrar solo anticues. Y es que la galería de autos exclusivos va desde un Buick Skylark , de 1954, del que se fabricaron 150 unidades; un Cadillac El Dorado, de 1957, cuya producción no superó las 500 unidades; un Skoda Felicia cabriolet, de 1960, primer auto llegado de los antiguos países socialistas a Cuba; un Cadillac Limousina, de 1986, del cual solo existieron 6 unidades; hasta un pequeño auto marca Maya Cuba, de producción nacional y totalmente hecho a mano.

Además de las curiosidades técnicas, el museo exhibe autos cuya vinculación a personalidades o hechos de la historia y cultura del país, le otorgan especial relevancia. Parte de la memoria de esta ciudad héroe es el Chevrolet, de 1951, usado por el General Raúl Castro Ruz en los días históricos del Asalto al Cuartel Moncada. Dentro de esta modalidad resaltan, además, un Cadillac de 1958, propiedad del Bárbaro del Ritmo, Benny Moré, y un Ford T-Bird, de 1956, perteneciente a la vedette cubana Rosita Fornés. Más cerca de la fama y los escenarios contemporáneos han pasado a integrar las colecciones de este museo una Limousina Lincoln, de 1987, que fue el coche de famosas figuras que visitaron La Habana a finales del siglo XX y principios del XXI, entre ellas Naomi Campbell, Arnold Schawarzenegger, Jack Nicholson, Alain Delon y muchos otros.

Como un complemento a los 44 autos clásicos y antiguos está la exposición de las miniaturas, integrada por 2700 maquetas que narran toda la historia del transporte, desde el trineo y trabois hasta el último modelo BMW el 750I. Gracias a las donaciones de amigos y visitantes, esta singular muestra se mantiene actualizada.

El Museo Nacional del Transporte organiza cada año el Rally 200 millar de Santiago, donde se reúne lo mejor y más auténtico de los clásicos y antiguos de las provincias orientales. Este año el evento está dedicado al aniversario 490 de la fundación de la ciudad de Santiago de Cuba y cuenta con el auspicio de Bucanero S.A. y sus cervezas Cristal, Bucanero y Mayabe.

De esta forma quien visite la ciudad oriental durante las celebraciones fundacionales percibirá en las vías públicas una mezcla de memorias rodantes y añejos ejemplares reconstruidos por el ingenio criollo. Mientras, dentro de las paredes de este museo -situado en la zona turística Gran Parque Baconao, a 25 kilómetros de la ciudad- un patrimonio peculiar se conserva para nuevos tiempos y concede un espacio para saciar la nostalgia y estimular los sentidos.