Santa Clara cumple 330 años el venidero 15 de julio y sus hijos se esfuerzan por ponerle belleza a la capital de la provincia de Villa Clara, situada exactamente en el corazón de la Isla de Cuba y ciudad que atrapa a todos con sus bondades. El tiempo que resta no es mucho, pero aún el suficiente para soñar en grande y dotar a la urbe nacida entre los ríos Cubanicay y Bélico del esplendor que merece su hidalguía e historia.
Desde el momento en que las 18 familias fundadoras bajo el tamarindo dieron vida a esta ciudad, glorioso ha sido su devenir y aunque a veces olvidada como un destino de interés turístico, es indudable su valía como un importante escenario de la historia de Cuba. Célebre por su actividad económica ganadera, por sus aguas minero medicinales y por sus paradisiaca cayería norte, es un destino bien posicionado en el mercado que busca resaltar sus valores como destino de ciudad.
La ciudad de Martha Abreu mecenas y benefactora del arte y la cultura de esta tierra, la Ciudad del Che donde se libraron importantes batallas que llevaron al Triunfo de la Revolución, una tierra de cultura y tradiciones centenarias que más de tres siglos después se viste de gala, rescata su patrimonio para ofrecerlo a las generaciones futuras con el mismo brío y arrojo conque sus iniciadores llegaron a convertirla en un importante centro económico de la Isla.
De cara al turismo Santa Clara ofrece una imagen fresca y entrañable que permite a sus visitantes transitar los caminos donde se decidió la lucha revolucionaria, donde el Che esta presente en cada lugar, hierático e inspirador a un tiempo, porque es esta la tierra donde personas de todas las latitudes peregrinan para rendir homenaje a un símbolo de rebeldía y entereza mundial.